La criptomoneda que soñó Mark Zuckerberg coge forma lejos de sus tentáculos

La criptomoneda que Mark Zuckerberg imaginó en 2019 salió al mercado esta semana, después de 9 meses fuera de la órbita de Facebook

La criptomoneda que Mark Zuckerberg anunció al mundo hace ya más de tres años, Libra, que más tarde pasó a llamarse Diem, vio la luz esta semana, pero lo hizo alejada de la red de influencia del multimillonario creador de Facebook, ahora conocido como Meta.

Zuckerberg abandonó Diem hace 9 meses por la presión regulatoria de la Fed, vendiendo toda la propiedad intelectual y los activos de la misma a Silvergate Capital por 182 millones de dólares.

De las cenizas de este proyecto, no obstante, salieron una red de blockchain y una criptomoneda del mismo nombre lanzadas al mercado esta semana, Aptos, surgidas gracias a la continuación del trabajo que antiguos empleados de Meta hicieron después de que Zuckerberg desapareciera del mapa de la empresa.

Y con el lanzamiento de esta criptomoneda ideada en las entrañas de Facebook y ejecutada fuera de su radio de alcance, el mercado puede estar al filo de una nueva revolución, o de una nueva decepción histórica.

El sueño de Mark Zuckerberg que no pudo ser

Ante la retahíla de cambios de nombres y de propiedad registrados en el camino de la red de blockchain y criptomoneda nacidas esta semana bajo la denominación final de Aptos, es obligatorio un repaso rápido a su trayectoria vital.

Zuckerberg anunció en junio de 2019 la puesta en marcha de un proyecto de criptomoneda que contaba con el apoyo de marcas como Visa, Mastercard, Vodafone, Uber, o Ebay.

El norteamericano bautizó a este proyecto como Libra, y planteó un futuro en el que los usuarios pagarían tanto a los contactos de sus redes sociales, como a los negocios en su órbita, a través de la misma.

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El embrión de criptomoneda, sin embargo, nunca terminó de formarse, dada la preocupación de reguladores como la Fed, que incluso llevó a Zuckerberg a testificar frente al Congreso acerca de este proyecto, ante el monopolio que Facebook podría crear con este sistema de pagos.

En una maniobra que, en perspectiva, parece ser una de las favoritas de Zuckerberg, Facebook apostó en 2020 por cambiar el nombre del proyecto Libra por Diem, buscando así correr un velo sobre la polémica levantada alrededor de su idea.

Los reguladores, no obstante, hicieron caso omiso al cambio de marca, y ante la elevada presión a la que sometieron a la empresa de redes sociales, Zuckerberg optó por deshacerse de su idea en enero de 2022.

El barón de las criptomonedas entra en escena

A pesar de que la idea de construir una red descentralizada que pudiera hacer frente a otras plataformas, como Ethereum o Solana, muriera para Mark Zuckerberg, no lo hizo para algunos de sus trabajadores, que tras la venta de los activos de Diem a Silvergate Capital, formaron su propia empresa.

La idea de estos desarrolladores participantes en la evolución de Diem pasaba por aprovechar el algoritmo de código libre y el trabajo ya realizado bajo el manto de Facebook, y hacerlo crecer de manera independiente.

"Somos los creadores, investigadores, diseñadores y constructores originales de Diem, y aunque el mundo nunca llegó a ver lo que construimos, nuestro trabajo está lejos de haber terminado", escribieron en una publicación del blog de su nueva empresa.

Y en esta nueva aventura emprendida, lograron convencer a fondos de capital riesgo como Andreessen Horowitz o Tiger, y también al conocido barón de las criptomonedas, Sam Bankman-Fried, cofundador y director ejecutivo de la bolsa de activos digitales FTX.

Conjuntamente, tanto Bankman-Fried como el resto de inversores financiaron con más de 350 millones de dólares repartidos entre dos rondas de financiación al proyecto surgido originalmente del laboratorio de Mark Zuckerberg, otorgándole una valoración de 2.000 millones de dólares.

Y ya con esta recaudación en sus arcas, y tras un largo camino, los extrabajadores de Facebook organizados bajo la marca Aptos, pusieron en marcha su blockchain esta semana, y su criptomoneda se puede comprar en FTX desde este 19 de octubre.

Un estreno accidentado

La criptomoneda de Aptos salió al mercado de madrugada con un precio de 8,55 dólares, tal y como indican las pantallas de Coinbase, y tras un día de cotización, perdió cerca de un 7 por ciento para reducir su valor hasta los 7.8 dólares.

De entrada, los creadores de Aptos prometieron que su blockchain será capaz de procesar 160.000 transacciones por segundo, una cifra muy por encima de las 65.000 por segundo que promete Solana, y de los 100.000 que teóricamente realizará Ethereum cuando afine su proceso de fusión.

Los datos iniciales del explorador de bloques de Aptos, sin embargo, mostraban que el protocolo está procesando actualmente cuatro transacciones por segundo, unos números que los creadores achacaron a la falta de usuarios, pero que hundió su cotización debido al alboroto previo a su arranque.

Queda por ver, por tanto, si el equipo de Aptos será capaz de cumplir sus expectativas y ofrecer un retorno a sus inversores, o si, al igual que ocurrió con el proyecto original de Mark Zuckerberg, todo queda en un sueño frustrado.

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