El IBEX 35 marca máximos anuales pese a las caídas de Banco Santander y Caixabank

El IBEX 35 avanza un 0,38%, da un último cambio en los 11.797 puntos y marca máximos anuales, pese a los recortes sufridos por Banco Santander y Caixabank

La bolsa española cerró la sesión con un rebote del 0,38 por ciento para su principal indicador, el IBEX 35, que marcó máximos anuales en los 11.797 puntos.

Tras un comienzo con muchas dudas, los inversores optaron por las compras y redoblaron su apuesta por los sectores defensivos, tras conocerse que los PMI de la zona euro mostraron la primera contracción del sector manufacturero desde marzo.

La lectura de este indicador metió a los principales índices europeos en terreno negativo, pero el mercado comenzó a descontar que el BCE tendrá que ser bastante más agresivo con los próximos recortes de tipos.

“El mercado casi exige un recorte de tasas más agresivo, especialmente después de lo que ha hecho la Fed”, dijo Marija Veitmane, estratega senior de State Street, en declaraciones a Bloomberg Television. El BCE "definitivamente está rezagado", dijo esta experta.

La incertidumbre se mantuvo hasta que la apertura alcista de Wall Street inclinó la balanza a favor de las compras.

Pendientes de la Fed

Varios miembros de la Fed se pronunciaron sobre el reciente recorte de tipos de 50 puntos básicos anunciado por el banco central estadounidense, que sigue en el centro de la atención inversora.

Así, el presidente de la Fed de Minneapolis, Neel Kashkari, apoyó una nueva reducción de medio punto porcentual en los tipos de interés para fin de año, tras apuntar a un debilitamiento del mercado laboral y reiterar su apoyo al recorte agresivo del banco central.

Mucho más moderado fue Raphael Bostic, presidente de la Fed de Atlanta, quien aseguró que comenzar con un recorte grande de tipos es un buen paso para acercar los tipos a niveles neutrales, lo que no significa que la Fed deba comprometerse con grandes recortes en el futuro.

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La sensación general es que la Fed tiene margen de sobra para estimular la economía con más rebajas de tipos, sin dejar de lado su objetivo de inflación, lo que calmó los ánimos en Wall Street.

Los bancos del IBEX 35, en el punto de mira

Con todo, la peor parte en Europa se la llevaron los bancos, tras conocerse que Alemania no venderá más acciones de Commerzbank, en una decisión que el mercado interpretó como una oposición frontal del ejecutivo germano a una eventual operación corporativa con Unicredit.

De esta forma, el banco alemán se desplomó en bolsa casi un 6 por ciento y terminó por arrastrar a todo el sector.

En el IBEX 35, Banco Santander terminó con una caída del 1,5 por ciento, mientras que Caixabank retrocedió el 1 por ciento.

Por el contrario, BBVA se libró del castigo y cerró en tablas, tras conocerse que el banco vasco avisó a los inversores en Estados Unidos de que la posibilidad de que el Ministerio de Economía bloquee la opa a Banco Sabadell es remota.

En la parte baja del selectivo, Grifols fue el valor más castigado, con una caída del 3 por ciento, después de que el fabricante de hemoderivados informara al mercado de que ha acelerado el cambio a presidente no ejecutivo de Thomas Glanzmann, lo que deja todo el poder en manos del consejero delegado, Nacho Abia.

Además, Puig Brands terminó con una caída del 1,96 por ciento, después de que los inversores castigaran con fuerza al sector de lujo, al subir las expectativas de que la economía de China crezca por debajo de lo esperado. En el grupo de los más bajista también se metió Fluidra, que terminó perdiendo el 1,7 por ciento.

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