Suaves recortes para BBVA y Banco Sabadell tras entrar la opa en la fase 2

BBVA cierra con un recorte del 0,4% en el IBEX 35, mientras que Banco Sabadell cede un 0,23% después de que la opa entrase en la fase 2

El IBEX 35 cerró la sesión con un recorte del 0,05 por ciento, hasta los 11.377 puntos, con toda la atención puesta en BBVA y Banco Sabadell, tras conocerse este martes que la CNMC llevará el plazo para decidir sobre la opa hasta la fase 2, lo que supondrá que el dictamen no llegará hasta prácticamente el segundo trimestre de 2025.

El banco que preside Carlos Torres abrió la sesión con una subida del 0,4 por ciento por ciento, mientras que la entidad catalana perdía un 0,4 por ciento en los primeros cambios, aunque al cierre ambos bancos cerraron con recortes, del 0,4 por ciento para BBVA y del 0,23 por ciento para el Sabadell, descontando de esta forma la posibilidad de que la opa no salga adelante en caso de que la CNMC imponga condiciones duras a BBVA o directamente opte por prohibir la operación.

Además, la llegada a este escenario supone que, si el regulador de la competencia prohíbe la opa de BBVA o impone condiciones, se entrará en la fase tres, donde el Ministerio de Economía puede trasladar la decisión del a aprobación al Consejo de Ministros.

"El acuerdo final [del Consejo de Ministros], que podrá autorizar con o sin condiciones la concentración, deberá adoptarse en un plazo máximo de un mes y puede solicitarnos un informe", dijo la CNMC.

La posición del Gobierno Sánchez está clara desde el principio, y como ha recordado en repetidas ocasiones el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, la opa dañaría las condiciones de competencia del mercado.

El tiempo, gran enemigo de BBVA

La decisión de la CNMC elimina la hoja de ruta de BBVA y supone un cambio inesperado de planes que enfrenta al grupo vasco con su mayor enemigo, el paso del tiempo, especialmente tras la volatilidad vista en los resultados del tercer trimestre y las elecciones en Estados Unidos con la victoria de Donald Trump.

Medio año más de incertidumbre no es la mejor noticia para las acciones de BBVA, pero tampoco para las de Banco Sabadell. No obstante, la entidad que dirige César González-Bueno gana un tiempo vital para convencer a sus accionistas de las bondades de seguir en solitario.

Para ello, su mejor arma es la marcha del negocio, que puede traducirse en mayores dividendos una vez cerrado este ejercicio. Los 2.900 millones de euros anunciados por Banco Sabadell no son más que un suelo para el dividendo, pero BBVA podría incrementarlo antes de que finalice el primer trimestre de 2025, con todo por decidir en la opa.

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