El IBEX 35 pierde un 0,49% por el lastre de Inditex y la rotación sectorial hacia el lujo

El IBEX 35 cerró con una caída del 0,49 por ciento una sesión en la que el selectivo quedó a la cola de Europa y dio un último cambio en los 11.840 puntos, después de haber rozado los 12.000 puntos en la apertura.

El principal indicador de la bolsa española cerró algo por encima de los mínimos del día, y con una diferencia de más de 130 puntos respecto a los máximos que alcanzó a primera hora, en lo que ha sido una de las sesiones más volátiles y extrañas en lo que llevamos de año.

Lo cierto es que el IBEX 35 entró en negativo poco antes de las diez de la mañana, cuando sus principales homólogos europeos cosechaban ganancias del 1 por ciento.

La mayor subida en Europa fue para el CAC francés, que se disparó casi un 2 por ciento gracias a un potente rally alcista de los grandes fabricantes de lujo, encabezados por LVMH, con un rebote del 8 por ciento, seguido por Kering y Hermes, que se anotaron más del 4 por ciento.

Todo vino a raíz de unos muy buenos resultados de Richemont y de un informe de Bank of America, cuyos analistas recomendaron comprar el grupo francés de productos de lujo presidido por Bernard Arnault debido a una mejora de las perspectivas.

Con el sector en ebullición, el valor que más sacó partido en el IBEX 35 fue Puig, que rebotó el 3,7 por ciento, mientras que el Eurostoxx50 progresó más del 1 por ciento.

El IBEX 35, objetivo de los bajistas

Toda esta fiesta fue ajena para el IBEX 35, con los bancos convertidos en objetivo de los bajistas desde primera hora, y con Inditex y Telefónica a medio gas.

“Los bancos españoles creo que están sufriendo mal de altura y alguna recomendación negativa como la de Caixabank (-2,4 por ciento), que ha sido rebajada a mantener por los analistas de RBC Capital”, dijo a finanzas.com Juan José Fernández-Figarés, director de Gestión en Link Securities.

Además, el sector minorista parece que está sufriendo este jueves una “cierta rotación hacia los valores de gran lujo”, lo que afectó “para mal a Inditex (-2,5 por ciento)”, explicó Fernández-Figarés para ilustrar lo que es un movimiento normal en la dinámica del mercado.

Para rematar la mala sesión, Telefónica (-0,4 por ciento) también cedía posiciones, en línea con las caídas de sus respectivos sectores, demasiado lastre en conjunto para el IBEX 35, que fue incapaz de remontar el día.  

La Fed rebaja el suflé

En Wall Street, el Dow Jones y el Nasdaq retrocedían el 0,2 por ciento al cierre de las bolsas europeas, tras anotarse el miércoles subidas superiores al 1,5 por ciento.

En vista de que los ánimos estaban muy encendidos tras el buen dato de inflación, el gobernador de la Fed, Christopher Waller, dijo que podrían darse recortes de tipos de interés en junio, siempre y cuando los datos de inflación sigan siendo favorables, lo que calmó el ímpetu del mercado.

Tampoco ayudó el dólar, que se mantuvo firme en las 1,03 unidades contra el euro, después de que Scott Bessent, el futuro secretario del Tesoro elegido por Donald Trump, recordó la necesidad de mantener al dólar como la moneda de reserva mundial, que es crucial para la salud económica de EEUU y su futuro.

De esta forma, los inversores ni siquiera hicieron un atisbo de apostar por las compras, aun cuando los resultados de Morgan Stanley y Bank of America siguieron la misma línea que el resto de bancos de inversión y salieron mejores de lo esperado.

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