Las gestoras centran sus lanzamientos en los fondos de impacto
Los fondos de impacto jugarán un papel fundamental en el nuevo ciclo económico
La inversión con criterios ASG fue una de las ganadoras de la pandemia puesto que durante la crisis del coronavirus fue la que demostró un mayor comportamiento resiliente.
Ben Constable-Maxwell, director de inversión sostenible y de impacto en M&G,comenta que «a medida que el mundo se enfoca en la dimensión de los desafíos de sostenibilidad a los que se enfrenta nuestro planeta, las finanzas de impacto positivo tienen la oportunidad de ofrecer recursos financieros a compañías pioneras que ofrecen soluciones a estos retos”
Por su parte, Juan Antonio Roche, director de Productos de Banca March, explica que “desde 2018 defendemos la idea de un ciclo económico atípico de crecimientos modestos y tipos reales negativos, que limita el potencial de las estrategias más tradicionales. Por el contrario, asistimos también a un proceso de transformación global sin precedentes en cuanto a profundidad y rapidez, que el Covid-19 acentuó”
Fondos de impacto para la nueva economía
Todo indica que estamos ante un nuevo ciclo económico que estará marcado por la tecnología, la digitalización y la sostenibilidad. Si algo define el momento de profunda transformación que se está viviendo es la decisión adoptada por los Gobiernos europeos de reconstruir la economía con estímulos que estarán principalmente enfocados al mundo verde, a una manera de vivir que en muy pocos años no reconoceremos, y que pronto será secundada por otros Gobiernos.
Un claro ejemplo es el Fondo de Reconstrucción Europeo que contempla dar el impulso definitivo hacía una economía más sostenible.
En este sentido, la propia presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, no deja de insistir en la necesidad de estar preparado para el cambio climático ya que puede generar incertidumbre y riesgos e impactar en la política monetaria del organismo.
Las gestoras apuestan por estos vehículos
Esto hace que cada vez más las gestoras diseñen sus productos enfocados a tener un impacto positivo en estos desafíos, ya que a la larga son más rentables y, además, cuentan con una gran demanda por el inversor.
Precisamente Banca March y M&G acaban de lanzar sendos fondos que avanzan en esta senda.
Amundi CPR Banca March Impact Fund es el nuevo producto de Banca March y Amundi. Se trata de un vehículo derenta variable con una filosofía de inversión fundamentada en tres dimensiones: accesibilidad, calidad y sostenibilidad.
En este marco, la estrategia invertirá en temáticas como economía circular, energías renovables, gestión del agua, industrialización y urbanización sostenible, alimentación sostenible, seguridad, acceso e inclusión, acceso a la educación y sanidad sostenible.
Por su parte, el fondo M&G (Lux) Climate Solutions serágestionado por Randeep Somel, ofrecerá a los inversores una cartera concentrada compuesta por alrededor de 30 compañías diversificadas en tres áreas de impacto principales: energía limpia, tecnología verde y apoyo a la economía circular. Con carácter anual,M&G informará sobre el impacto climático positivo neto de cada compañíaen cartera y la adecuación de sus ingresos con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU en relación con el clima, marco adoptado por este fondo
“ Este fondo ofrece a nuestros clientes la oportunidad de abordar la emergencia del cambio climático, poniendo a trabajar sus ahorros con un fin positivo» señalan desde la gestora. Y e que Randeep Somel, gestor de M&G considera que el nuevo ciclo económico terminará de impulsarlo.
Así, «la agenda verde y la necesidad de ofrecer soluciones para el desafío del cambio climático promueven la creatividad y el ingenio de muchas compañías enfocadas en dichas soluciones”, explica el gestor quien añade que “creemos que esta es una oportunidad para las próximas décadas para las compañías que ofrecen productos y servicios innovadores, y para quienes invierten en ellas».
Las inversiones alternativas también ponen el foco en la energía verde
Dunas Capital acaba de poner en marcha Dunas Desarrollos Fotovoltaicos (DDF). El lanzamiento de este vehículo de inversión es un nuevo ejemplo del compromiso del grupo con la integración de factores ambientales, sociales y de buen gobierno (ESG, por sus siglas en inglés) en toda su actividad.
El vehículo ha adquirido una cartera de activos fotovoltaicos en desarrollo y se marca un objetivo mínimo de 100 MW de potencia instalada. Los gestores del proyecto, Real Assets, esperan obtener una rentabilidad de doble dígito en un plazo inferior a tres años.
