El Ibex-35 recupera los 10.500 que no veía desde noviembre
La tregua en la apreciación del euro ha cuajado en Europa con un leve mejor comportamiento que le ha hecho posible al Ibex-35 reconquistar los 10.500 puntos. En Estados Unidos, los buenos resultados han favorecido que el Dow Jones haya atacado por primera vez en su historia los 26.000 puntos ocho sesiones después de alcanzar los 25.000 puntos. Las materias primas en su conjunto, desde los combustibles hasta las preciosas, han sufrido un intenso correctivo.
El Ibex-35 ha cerrado la sesión de hoy por encima de los 10.500 puntos por primera vez desde principios del pasado mes de noviembre. Ello, después de una semana sobre los 10.400 puntos, en que parecía que no podía ir más arriba.
Al cierre, el indicador se anotaba un 0,51%, para dar un último cambio en los 10.520 puntos. Con ese resultado, el selectivo ha sido el mejor de todos en el Viejo Continente. El Dax alemán terminó el día con un repunte del 0,35%. El Cac 40 francés también se salvó de las pérdidas, con un mínimo ascenso del 0,08%. En rojo, el Ftse Mib de Milán, que se dejó un 0,21%, el Ftse 100 británico, que retrocedió un 0,17%, y el PSI-20 de Lisboa, que bajó un 0,13%.
Europa, en realidad, no ha sido capaz de sacarle partido de verdad a la depreciación del euro frente al billete verde. La moneda única, al cierre de la sesión retrocedía un 0,3% respecto al dólar, para colocarse el tipo de cambio en 1,2230 unidades, desde cotas cercanas a 1,23 en que terminó ayer.
La recuperación del dólar no fue un obstáculo para Wall Street, que abría al alza después de un largo fin de semana y se mantenía en positivo en el momento del cierre de los mercados del Viejo Continente. Allí el Dow Jones llegó a marcar los 26.000 puntos por primera vez en la historia en la apertura, aunque después se vino un poco abajo. Y el S&P 500 se acercaba a los 2.800 puntos. Nuevos máximos para ambos indicadores. Ello, con el apoyo de los buenos resultados presentados por Citigroup, General Motors o UnitedHealth, que han reconocido el apoyo de la bajada de impuestos que sacó adelante Donald Trump.
Además de bajada del euro, también observamos caídas en las rentabilidades de los bonos, sobre todo en el Viejo Continente. El rendimiento de los títulos alemanes a diez años se alejó del 0,60% que rondaba el lunes al cierre, mientras que el de sus comparables españoles caía por debajo del 1,50%. Con ello, la prima de riesgo española se sitúa en los 92 puntos básicos. Son niveles parecidos a los que rondó el pasado verano, entre finales de julio y principios de agosto.
Algo sintomático de lo que está ocurriendo es que el sobreprecio que el mercado le exige a Italia en comparación con España está ahora en los cerca de 50 puntos básicos desde los apenas 24 de mediados de diciembre. Los inversores han incrementado el riesgo percibido en Italia ante las elecciones del próximo mes. Aunque ese diferencial está muy lejos del que existía el pasado junio, cuando un bono italiano tenía que pagar casi 75 puntos básicos más que un comparable español. Y es que el riesgo percibido en los próximos comicios es menor que el que existía el pasado año, cuando más fuerzas cuestionaban la participación de Italia en el euro.
Buena evolución para las 'utilities', peor para las materias primas
La caída de las rentabilidades de los bonos ayudó a las 'utilities' a comportarse muy bien. Así, Iberdrola subió un 2,04%, mientras que Acciona y Endesa subieron casi un 2%. Otras compañías dependientes de financiación ajena también lo hicieron muy bien: ACS, Ferrovial y Colonial se apuntaron alrededor de un 1,4%.
El mejor fue Aena, con una subida del 2,42%.
En el otro lado de la tabla, Acerinox y ArcelorMittal fueron los peores, con recortes de un 1,65% y de un 1,21%, respectivamente. Después, Sabadell, que se dejó un 1,04%. Y los descensos de Repsol y de Técnicas Reunidas se quedaron a las puertas del 1%.
Entre los grandes valores, pérdidas también para Inditex (-0,31%) y para BBVA (-0,05%).
Lo que ocurrió en los peores valores del Ibex-35 tiene su explicación: en el mercado de materias primas, el barril de Brent, de referencia en Europa, retrocedía un 1,2%, hasta los 69,41 dólares. Ello, después de que el lunes superara los 70 dólares por primera vez desde diciembre de 2014. El barril de West Texas también se movía a la baja: retrocedía un 0,37%, hasta los 64 dólares.
No sólo el crudo perdió posiciones. También hubo recogida de beneficios tras un formidable inicio de ejercicio en el cobre, el aluminio, el zinc, el plomo y el níquel. Quizás por la recuperación del dólar. Posiblemente también porque los inversores cayeron en la cuenta de la sobrecapacidad existente en el mercado.
Además de los metales industriales, también perdieron posiciones los preciosos. El precio del oro cedía al cierre un 0,40%, hasta los 1.334 dólares la onza.
Pero la caída del precio de las materias primas no está provocando descensos en los emergentes. De hecho, las Bolsas de esas áreas geográficas han marcado su nivel más alto desde 2008.