Millennials. Cómo deben ahorrar para planificar la jubilación
Varios son los consejos que pueden seguir los trabajadores más jóvenes de cara a la jubilación
No se puede decir que los españoles sean unos temerarios de cara a la jubilación. El 75% de los españoles están preocupados por el sistema público y esta preocupación se incrementa a medida que se acerca a la edad de retiro. Así, los baby boomer, la siguiente gran generación que se jubilará encabeza el ránking con un porcentaje del 82%.
Pero esto no quiere decir que los trabajadores más jóvenes, como son los millennials, no piensen en ella. El 65% de los millennial están preocupados por el sistema de pensiones público y más desde que se están llevando a cabo cambios desde el Gobierno de Pedro Sánchez, como la reducción de los incentivos fiscales a los planes de pensiones y la implantación de un sistema de planes de empresas.
De hecho, nueve de cada diez españoles creen que o no tendrán pensión o esta, en caso de tenerla, será insuficiente para mantener el nivel de vida, según el Informe Naranja que publica ING.
Los millennials es la generación que menos confía en una pensión pública
Así, el 43% de los millennial piensa que no tendrá pensión pública, pero, a pesar de esta cifra, y la preocupación que sienten por el ahorro, apenas han empezado a hacerlo.
Los millennials deben ahorrar ya de cara a la jubilación
Si bien es cierto que los españoles consideran que la edad propicia para ahorrar es a partir de los 32 años, la realidad señala que apenas lo cumplen y que el ahorro se inicia a medida que se acerca la edad de jubilación.
Así, los baby boomer comenzaron a ahorrar a partir de los 41 años, casi diez años después.
Cómo pueden empezar a ahorrar los millennials
Lo cierto es que es hay mucho ruido en torno a productos para preparar la jubilación, y esto dificulta focalizar el esfuerzo donde hay que hacerlo, que es la planificación del retiro cuanto antes, independiente del vehículo que se escoja para ello.
Para evitar esto, EFPA da una seria de consejos de cómo un millennial tiene que planificar su jubilación, sin entrar en productos concretos.
Lo primero que deberían hacer sería ahorrar desde la primera nómina. Independientemente de la cantidad, lo importante es adoptar un hábito.
Si el trabajador millennial empieza a ahorrar pronto, esto le permitirá apostar por activos de mayor riesgo, con una rentabilidad más elevada que los más conservadores. A medida que la edad va incrementándose, la cartera del millennial se irán trasladando a riesgo moderado para acabar en un perfil conservador cuánto más cerca esté de la edad de jubilación.
Pero para esto, algo fundamental y que todavía no se produce de manera sistemática, es el que el ahorrador debería conocer periódicamente el importe de su pensión para poder tomar las decisiones oportunas.
Cuáles son los mejores productos para ahorrar
No existe un producto mejor para ahorrar de cara a la jubilación. Al respecto existen varias alternativas dependiendo de del perfil del trabajador.
Todos cuentas con las mismas mismas ventajas fiscales que los planes de pensiones.
Así, una opción podrían ser los planes de previsión asegurados (PPA), que aseguran un tipo de interés para toda la duración del contrato y, año a año, en función del mercado financiero, pueden remunerar a un tipo asegurado más alto.
Los planes de ahorro individual sistemático (PIAS) son contratos con entidades aseguradoras para constituir una renta vitalicia asegurada. Los rendimientos obtenidos en el periodo de ahorro no tributan si se constituye una renta vitalicia.
Por otro lado, los seguros de vida de ahorro no gozan de ventajas fiscales, pero permiten el rescate en cualquier momento y vienen acompañados de un seguro de vida.
Por último, también se debe valorar los fondos de inversión como una buena alternativa o complemento de ahorro para la jubilación, al ser totalmente líquidos y traspasables de una entidad a otra.
Relacionado con esto, el millennial debería seleccionar correctamente la entidad, sin dejarse llevar por ofertas puntuales.
Y, aquí, entra en juego las comisiones. Cuando se contrata un plan de pensiones u producto de ahorro similar, se debe estar muy atentos a las comisiones de gestión y depósito. Teniendo en cuenta que se mantiene el plan de ahorro durante muchos años, las diferencias de ahorro acumulado pueden ser considerables. No siempre un plan con una comisión más baja es el más adecuado.
Finalmente, el ahorrador de cara a la jubilación puede seguir aprovechando las ventajas fiscales de estos productos, aunque se hayan limitado a 2.000 euros al año. Y es que el beneficio resultante podría seguir invirtiéndolo como ahorro para la jubilación.