La Fed sube los tipos y anticipa tres incrementos para 2018
La Reserva Federal norteamericana ha cumplido el guión y ha subido los tipos de interés un cuartillo desde la horquilla[…]
La Reserva Federal norteamericana ha cumplido el guión y ha subido los tipos de interés un cuartillo desde la horquilla de referencia del 1%-1,25% en que estaban situados hasta la nueva de 1,25-1,50%.
Con vistas al próximo año, de media, la Reserva Federal estima que los tipos de interés llegarán al 2,125%, lo que implica tres incrementos del precio del dinero en 2018, que son, más o menos, las que considera el consenso de analistas. Pese a que la institución ha elevado su previsión de crecimiento para la economía estadounidense, no ha elevado su previsión para los tipos desde la anterior reunión, con lo que el mercado interpreta que no quiere acelerar el endurecimiento monetario pese a que el ritmo de avance del PIB pueda incrementarse. La fortaleza económica americana tiene su base en un mercado de trabajo potente, con creación de empleo sostenida, amplias oportunidades para los trabajadores y salarios al alza, según comentó Janet Yellen en su última rueda de prensa al frente de la Reserva Federal. Pero parece que la institución no se muestra muy convencida respecto a que la reforma fiscal de Donald Trump pueda afectar significativamente a la capacidad de crecimiento de la economía americana.
De acuerdo con Luke Bartholomew, responsable de estrategia de inversión de Aberdeen Standard Investments, "está claro que la Fed cree que puede subir los tipos tres veces más el próximo año, pero ésta es una previsión que los mercados no compran todavía, y son los datos más que la retórica los que convencerán a los inversores en última instancia".
Pero sí que se interpreta que para el año 2020 la política monetaria será restrictiva, puesto que se estima que el precio del dinero estará en el 3% cuando, de acuerdo con la anterior previsión, no llegaba a ese porcentaje.
Una cuestión a tener en cuenta es que la Fed ha subido los tipos de interés hoy con la oposición de dos de sus nueve miembros: el presidente de la Fed de Minneapolis, Neel Kashkari, y su homólogo de la de Chicago, Charles Evans.
¿Qué está ocurriendo en los mercados financieros después de conocerse estas dos cuestiones, la subida del precio del dinero de hoy, ya descontada, y las previsiones para 2018?
En el mercado de divisas, el euro se fortalece contra el billete verde. La moneda comunitaria venía ganando posiciones desde que se publicó un dato de inflación en EE.UU. más flojo de lo esperado y ha registrado un nuevo tirón alcista que le lleva a rondar el nivel de 1,18 unidades y a alcanzar la cota de 1,1825 unidades al cierre de la sesión americana.
El US Dollar Index, el indicador que compara al dólar con el conjunto de principales monedas del mundo acelera el descenso con que arrancaba la sesión americana y baja ya medio punto porcentual.
El movimiento de la Fed ha tenido un impacto favorable en la Bolsa americana, al menos, inmediato, ya que luego la cosa cambió. Así, el S&P 500 ha registrado un avance inmediatamente después de conocerse el comunicado de la autoridad monetaria desde el entorno de los 2.665 puntos en que se movía minutos antes de las ocho de la tarde, hora española, hasta superar los 2.670 puntos. Bien es verdad que a partir de las nueve de la noche, el índice ha empezado a perder fuelle, para llegar a entrar mínima y brevemente en terreno negativo minutos antes del cierre de la sesión. Y así terminó el día, con un recorte del 0,05%, aunque el Dow Jones (0,33%) y el Nasdaq (0,20%) terminaron al alza.
En el mercado de bonos, el rendimiento de los títulos estadounidenses a diez años retrocede y se aleja del 2,40% en que se situaba al cierre de la sesión de ayer. También baja el interés de los cortos plazos: el bono a dos años renta un 1,80% en el mercado secundario, frente al 1,82% en que se situaba la jornada anterior. En este punto, hay que tener en cuenta que ahora se está vigilando muy de cerca la curva de tipos, por el riesgo de que se invierta. A dos años vista, el diferencial entre los diez y los dos años es de treinta puntos básicos. Si se materializa el escenario de una política monetaria restrictiva en 2020 en EE.UU., es probable que veamos cómo la curva se invierte, es decir, que los rendimientos de los cortos plazos empiezan a ser superiores que los de los largos plazos.
El oro también responde al alza: antes de conocerse la decisión de la Fed y la información sobre lo que ocurrirá en 2018 se cambiaba por 1.245 dólares la onza y unos minutos después ya superaba los 1.250 dólares.