Pocas opciones para el ahorro conservador
2018 será un año de transición para el ahorro más conservador. A la espera de que se produzcan las primeras[…]
2018 será un año de transición para el ahorro más conservador. A la espera de que se produzcan las primeras subidas de los tipos de interés en la zona euro, en la primera mitad de 2019, las opciones que hay serán escasas con rentabilidades mínimas. De hecho, Santander se ha referido a esta situación para justificar un recorte en el saldo máximo a retribuir de su cuenta 1 2 3. Los expertos consultados comentan que el próximo año será muy similar al de 2017, aunque si cabe con menos movimientos, mientras que las ofertas más interesantes tendrán limitaciones de tiempo o implicarán una vinculación aún mayor. Pero también hay un pequeño atisbo para la esperanza. Lucía Veiga, experta de iAhorro.com, piensa eso: «Prevemos que a largo plazo despeguen de nuevo».
Estefanía González, portavoz de finanzas personales de Kelisto, clasifica en dos los mejores productos: «Depósitos a plazos cortos, por un lado, y cuentas remuneradas, por otro», pero ambos tienen limitaciones. En los primeros, «habría que mover el dinero de uno a otro aprovechando las mejores ofertas y, de paso, tener el dinero siempre disponible. Mientras que en el segundo caso, exigen una alta vinculación y escasa rentabilidad, por lo que el siguiente movimiento es combinarlo con un plazo fijo», concluye González.
Y en 2018 no hay un producto favorito. Los expertos consultados coinciden en que la mejor estrategia para arañar algo de rentabilidad es combinar ambos, cuentas y depósitos, aunque en relación a las primeras el ahorrador debe tener presente que la entidad le exigirá una alta vinculación. «Las cuentas que ofrecen remuneraciones atractivas son aquellas que exigen la domiciliación de la nómina, pero tampoco debemos olvidarnos de si convienen esas condiciones», aconseja Veiga. González adelanta que esta mayor relación con la entidad se está trasladando también desde los productos de ahorro a los de financiación.
seguros como alternativas
Las aseguradoras han sido junto a los bancos el otro gran damnificado por la política de tipos cero del Banco Central Europeo (BCE). Para intentar captar capital han lanzado determinadas promociones que, según González, no está de más sopesar pero sus rentabilidades no son mucho mejores y «además, no están protegidas por el Fondo de Garantía de Depósitos». Por su parte, Maica López, experta de Credimarket explica que «las aseguradoras se han lanzado a la búsqueda de clientes financieros que buscan mayor rentabilidad y mínimo riesgo». Por este motivo, han recuperado los seguros de ahorro, que ofrecen un rendimiento a la prima invertida en una póliza y que pueden ser una alternativa para ahorradores que busquen un horizonte temporal a medio y largo plazo.
En cuanto al Ahorro 5, comercializado principalmente por las aseguradoras, la inversión aumenta mes a mes pero está lejos de las cifras de los depósitos. Además, las rentabilidades son similares, siendo el diferimiento fiscal la ventaja más relevante.