El Ibex rebota por un suspiro: mantiene los 10.100
Un euro fuerte y revisiones negativas de los analistas impiden al selectivo español recuperar el ritmo de subidas. El Ibex-35 se corona como el peor de la semana, al ceder un 1,90% estos cinco últimos días
Con varios frentes sacudiendo, el Ibex-35 no encontró la estabilidad que le falta desde finales de la semana pasada. Se despide de la semana un 1,90% más abajo, sellando cuatro de las cinco sesiones en negativo. Tras el calentamiento de las tensiones en Corea del Norte, los inversores tuvieron que digerir la inestabilidad política en Cataluña, algunos datos macroeconómicos flojos y la continuada escalada del euro con el beneplácito del Banco Central Europeo.
El principal indicador de la Bolsa española mantuvo hasta el cierre el baile entre los números rojos y verdes. Logró recuperar la cota crucial de los 10.100 puntos que cedió a media sesión, y con eso le bastó para dar un último cambio en los 10.129,6 puntos, un testimonial 0,05% arriba.
El euro sigue definiendo el temperamento de las Bolsas, después de que el Banco Central Europeo no se mostrara preocupado por la escalada que se anota en el año. El euro se mantiene firme por encima de los 1,20 dólares. Una economía robusta, pero sin inflación a la vista ha fortalecido a la divisa comunitaria un 14% frente al dólar americano en lo que va de año.
Una divisa más fuerte no solo erosiona las cuentas de resultados de las compañías europeos, sino que suena a preludio de un 'tapering' (retirada de estímulos). El presidente de la entidad, Mario Draghi, pospuso a Octubre cualquier decisión, pero los expertos, como Philippe, Ithurbide, de Amundi, apunta a una reducción de la inyección monetaria este enero próximo.
Pero a la Bolsa española le basta con sus propios quebraderos de cabeza. Esta semana se ha reactivado el temor de una secesión catalana y sus efectos en las cotizadas con sede en Barcelona. Las noticias han cruzado aguas internacionales y las agencias de rating internacionales han alertado de las posibles consecuencias. Fitch ha amenazado con recortar el rating de Cataluña, mientras que Goldman Sachs ha dado un toque a CaixaBank y Sabadell.
Apoyó en la sesión el 1,21% que subió Banco Santander, con el beneplácito de los analistas de Morgan Stanley, así como la recuperación de CaixaBank ( 1,41%), IAG ( 1,45%) y Telefónica ( 0,38%). Y pesaron el 0,71% que se dejó Inditex, y el desplome de Siemens Gamesa.
Los peores de la sesión fueron Siemens Gamesa (-3,96%), que sigue pagando una mala temporada de resultados, seguido de Enagás (-1,68%) y Acciona (-1,59%).
Las dudas se prolongaron hasta el cierre de la sesión, con los inversores planteándose los efectos del huracán Irma en los mercados financieros. El presidente de la Reserva Federal de Nueva York, William Dudley, reafirmó la necesidad de seguir subiendo los tipos de interés en Estados Unidos, aunque reconoció en una entrevista en la cadena americana CNBC que los huracanes podrían afectar la fecha de ese ajuste monetario.
Con el nerviosismo instalado, las principales plazas europeas cerraron con tono mixto. El FSTE MIB destacó al remontar un 0,25% y también salvó la jornada el Dax alemán ( 0,06%). El Eurostoxx terminó en tablas. Lo que no lograron el Cac francés (-0,02%) ni el FTSE 100 londinense (-0,26%).
Los inversores no solo se deshicieron de sus acciones. También ha sido una sesión de ventas en los bonos gubernamentales, especialmente los periféricos, como los de Italia, Portugal y España. Así, la rentabilidad exigida al bono del Tesoro español se elevó al 1,516% y la prima de riesgo se ensanchó a los 122,3 puntos.