La letra pequeña de la banca sin comisiones
Comisiones cero o cuentas remuneradas son las últimas estrategias comerciales puestas en marcha por el sector bancario para captar clientes.[…]
Comisiones cero o cuentas remuneradas son las últimas estrategias comerciales puestas en marcha por el sector bancario para captar clientes. La mayoría de las entidades de crédito prometen acabar con los gastos asociados a la operativa básica. Pero, ¿realmente son como parecen? ¿Están libres de gastos?
Las comisiones continúan siendo una de las principales fuentes de ingreso de los bancos. Según Facua, los seis grandes bancos de España ganaron solo en el primer trimestre de este año 5.298,7 millones de euros en comisiones, un 13,6% más que el año pasado. Muchas de las críticas a la banca tradicional vienen por la falta de transparencia, y es que, si no se lee la letra "minúscula" que acompaña a sus contratos, estamos perdidos.
A continuación, detallamos algunas "costes extra" que los bancos pueden cobrarnos según las diferentes operaciones que realicemos con ellos.
-Comisiones ocultas dentro de otras: entre las más típicas, están las que nos cobran cuando viajamos al extranjero. Dentro de la Zona Euro, salvo contadas excepciones, tendremos que pagar comisiones si utilizamos la tarjeta para sacar dinero del cajero. En cambio, en destinos con otra moneda, tendremos que asumir otros sobrecostes por el cambio de divisa.
-Comisiones por transferencias internacionales: el coste de las transferencias internacionales transfronterizas (fuera de la zona SEPA) puede llegar a alcanzar un coste mínimo de hasta 40 euros. Todo ello sin tener en cuenta las comisiones derivadas del cambio de divisas y de la posible intervención de un banco intermediario.
- Comisiones por descubierto: es la que nos cobra el banco cuando una de nuestras cuentas se queda con saldo negativo. En este caso la entidad nos penalizará con una doble comisión; una fija, que el banco cobra en concepto de "gasto de gestión de reclamación por descubierto"; y una variable, que dependerá de la cantidad "a deber" y cada entidad determina qué interés le aplica, aunque es frecuente que marquen un importe mínimo.
- Comisiones por dejar de ser cliente: algunas entidades seducen a nuevos clientes con promociones y regalos a cambio de que se abran una cuenta bancaria con una permanencia que puede llegar a los 24 meses. Lo que ocurre en estos casos es que si el cliente quiere dejar de serlo antes del plazo establecido le penalizará y acabará pagando más que lo que costó el supuesto regalo. Lo peor es que no garantizan al cliente que tenga las mismas comisiones durante ese periodo, por lo que se encuentra "atrapado" en un banco y le estarán cobrando comisiones.
- Comisiones si incumples algo de la letra pequeña: en este apartado suelen venir las condiciones por las que no te cobran comisiones pero que nadie te explica. Si, todos sabemos que tenemos que tener la nómina ingresada pero no que tengamos que hacer "x" operaciones con tarjeta de débito, tener ingresos mensuales por valor de "y" utilizar la tarjeta de crédito, al menos, una vez.
Para evitar estos costes extras, antes de poner nuestro dinero en una cuenta sin comisiones conviene que estudiemos minuciosamente la letra pequeña. Importa mucho cuáles son las exigencias para conseguir el coste cero en comisiones, desde la permanencia con el banco, el saldo mínimo que exige la cuenta, los ingresos mensuales que hay que realizar o el gasto en el que hay que incurrir con las tarjetas de la entidad.
Desde BNEXT recomendamos no dejarse cegar por los regalos que muchas entidades nos ofrecen al abrirnos una cuenta con ellos o aquellos que prometen mayor rentabilidad. Suelen ser trampas ideadas para que no leamos la letra pequeña. Hay que elegir buenos bancos en los que confiar, cuanto más transparentes mejor.