Las joyas del mercado de fondos de bolsa española
El último año no ha sido especialmente bueno para los mercados de renta variable española pero el panorama está cambiando[…]
El último año no ha sido especialmente bueno para los mercados de renta variable española pero el panorama está cambiando en 2019. Gracias a ello, los fondos de inversión que invierten en este activo han obtenido rentabilidades superiores al 7 por ciento en lo que va de año -según los datos provisionales de Inverco correspondientes a enero y febrero-, la segunda cifra más alta de todas las categorías de fondos -solo por detrás de los vehículos de acciones internacionales, que se revalorizan más de un 10 por ciento en dos meses-. Pese a esta mejora en los mercados y en la rentabilidad de los fondos -que, en conjunto, han iniciado el año con un récord de rentabilidad desde que Inverco tiene registros históricos-, los inversores llevan un tiempo instalados en una actitud de aversión al riesgo, que les ha llevado a retirar dinero de estos vehículos y, sobre todo, de los productos más atrevidos: en lo que va de año, ya han reembolsado más de 170 millones de euros de los fondos de renta variable nacional, lo que contrasta con el buen comportamiento de sus carteras. Es decir: los ahorradores, intimidados por la volatilidad, están retirando su dinero justo cuando los mercados vuelven a la senda alcista, perdiéndose las subidas.
En la decisión de los inversores podrían estar influyendo tanto los vaivenes de los mercados como los datos de rentabilidad en al último año. Pero, en un periodo de tiempo más dilatado, de unos tres años, hay vehículos que han ofrecido retornos que incluso superan el 50 por ciento, como el fondo Iberian Value, de Dux Inversores (ver tabla). Volviendo la vista atrás, ¿en qué vehículos habría que haber invertido en los últimos tres años? Viendo sus rentabilidades, ¿es el momento de entrar o, al menos, mantenerse en fondos de renta variable española?
Selección de compañías: clave en Santalucía AM
Entre los fondos de renta variable española más rentables a tres años despunta Santalucía Ibérico Acciones, de una gestora que también sitúa a Santalucía Espabolsa en los puestos más altos del ranking. El equipo de renta variable de Santalucía AM, formado por Antonio Manzano, Beltrán Palazuelo y Kevin Alonso, y capitaneado por Mikel Navarro, explica que las claves son el trabajo que dedican a la gestión y selección de compañías. «El secreto es el trabajo colectivo de un equipo apasionado, centrado en el estudio minucioso de las compañías», indican. «La macroeconomía tiene su influencia pero nuestro trabajo consiste en tratar de saber cuál es el valor de una compañía. El valor viene determinado por los activos que tiene, la rentabilidad que obtiene y el tiempo del que disfrutará de esa rentabilidad. El mercado es una herramienta que nos sirve para determinar si la compañía está barata o cara», explican.
En concreto, invierten en firmas que presentan cierto crecimiento, tienen visibilidad, la rentabilidad del capital empleado es superior a su coste del capital, generan caja, están poco endeudadas y resisten el paso del tiempo. En los últimos años, algunas elecciones clave explican sus resultados: «Dos compañías en las que hemos multiplicado por dos la inversión inicial serían Europac, la cartonera que fue adquirida por DS Smith; y Alantra, la boutique financiera en la que seguimos teniendo una participación importante. Por último, Talgo, con una revalorización superior al 40 por ciento, en la que tenemos algo más de un 6 por ciento». Y, de cara a este año, hablan de oportunidades en Prosegur Cash y Técnicas Reunidas.
El 'value' funciona
Como prueba del éxito del 'value investing', Magallanes Iberian Equity, el fondo de bolsa ibérica de la gestora, gana más de un 46 por ciento a tres años, según los datos de VDOS. «Nuestro fondo Magallanes Iberian Equity invierte en empresas cotizadas en España y Portugal que creemos que cotizan con fuerte descuento frente a su valor intrínseco, basándonos en el análisis fundamental de cada compañía. Somos inversores de largo plazo, pacientes y conservadores, con un plazo recomendado de cinco años», explica el equipo de inversiones, formado por Iván Martín, Otto Kdolsky y Diogo Pimentel. La cartera, que se mueve entre 25 y 30 nombres, con baja rotación, se posiciona en valores poco conocidos, cotizando a precios atractivos y con una situación financiera desahogada. Entre otros, cabría destacar el éxito durante los últimos años de Miquel y Costas, Lingotes Especiales, Fluidra, Corticeira, Almirall, FCC o Faes. Más que de previsiones, prefieren hablar de largo plazo y, con esta perspectiva, añaden a los nombres anteriores otros como Inditex y Gestamp. «Tras las fuertes correcciones de 2018, no vemos la bolsa ibérica cara y vemos un significativo potencial de revalorización».
Otros grandes representantes del 'value investing', como AzValor y Bestinver, también posicionan muy bien sus fondos de bolsa española en el ranking de rentabilidad a tres años. En el caso de la primera, AzValor Iberia se revaloriza más de un 33 por ciento en tres años, gracias a una filosofía de inversión consistente en comprar algo por menos de lo que vale y esperar a que el mercado reconozca dicho valor en precio. El equipo invierte en «buenos negocios, con claras ventajas competitivas, liderados por buenos gestores y que se puedan comprar por debajo de su valor». En los últimos tres años, destacan el buen comportamiento de firmas de sectores variados como Técnicas Reunidas o Mapfre, en 2016; Másmóvil en el año 2017; o Almirall, en 2018. Ahora, el 30 por ciento de su cartera está invertido en tres compañías, de sectores distintos pero con denominadores comunes como contar con un buen equipo directivo, con buena asignación de capital y con el accionista siempre en mente a la hora de tomar decisiones: se trata de Tubacex, Galp y Elecnor.
En el caso de Bestinver, donde Bestinver Bolsa gana cerca de un 30 por ciento a tres años, destacan su análisis fundamental para «identificar buenas compañías, con ciertas ventajas competitivas, con visibilidad de flujos de caja y con balances sólidos que aseguren que van a estar en funcionamiento independientemente del ciclo económico», explica Ricardo Cañete, responsable de renta variable. Y con diversificación: «Tratamos de tener compañías de distinta naturaleza, ya que buscamos diferentes fuentes de rentabilidad y, por eso, tendremos compañías de todos los sectores». En los últimos años, destaca el buen comportamiento de firmas como Altri, Ibersol, Caf, Colonial, Abertis o Viscofán. De cara a este año, no buscan apuestas «sino construir carteras robustas que se comporten bien en cualquier escenario y que ofrezcan una buena relación rentabilidad/riesgo». En ese sentido, señala empresas como Viscofán, ACS, Semapa u otras más cíclicas que hayan descontado un escenario muy negativo como Indra o Acerinox, donde han incrementado la exposición en el último trimestre.
Valor y calidad
Con un enfoque más mixto de valor y calidad operan en Renta 4, donde el Renta 4 Bolsa ha dado retornos superiores al 40 por ciento en tres años. «Tiene una filosofía bien definida, caracterizada por la búsqueda de equilibrio entre compañías de alta calidad y la búsqueda de valor a través de empresas que se encuentren notablemente infravaloradas». Así, invierte aproximadamente el 60 por ciento en compañías de calidad, sólidas, con balance saneado y visibilidad en sus beneficios, como Ferrovial, Inditex, Grifols, Amadeus, Vidrala, CAF o Viscofán. El 40 por ciento restante se destina a compañías que presentan una clara infravaloración respecto a su valor intrínseco, como Applus, Prosegur, Coca Cola European Partners o Arcelor Mittal, explica su gestor, Javier Galán. Los principales contribuidores a la rentabilidad en los últimos años han sido firmas como Amadeus, Europac, Fluidra, CAF, Airbus, CIE o Vidrala. «El fondo ha estado (y está) muy poco invertido en los sectores bancario, eléctrico o de telecomunicaciones, hecho que junto a la selección de compañías descrita explica el mejor comportamiento frente a los índices».
Valor y otros ingredientes
Las claves del Gesconsult Renta Variable son la selección de valores, la gestión activa y la flexibilidad, explica su gestor, Gonzalo Sánchez Crespo. «La selección de valores siempre va enfocada al conocimiento del negocio, la generación de caja y la confianza en el equipo directivo. La gestión activa y la flexibilidad han sido muy importantes dado el entorno de volatilidad de este año», dice, y habla de invertir en negocios de sólidos fundamentales, con preferencia por el corte industrial y la gerencia familiar o, en su defecto, contar con un equipo directivo de confianza. En los últimos años, menciona las alegrías que ha dado el sector industrial y, de cara a 2019, el atractivo en firmas como Cie Automotive, Dominion, Navigator, Cellnex o CAF. Ante la incertidumbre, confía en «una cartera focalizada en compañías donde el cumplimiento de los resultados está más claro, así como la generación de caja».
La gestión activa, selección de compañías gracias a un análisis fundamental y el trabajo en equipo son las consignas de Mutuafondo España, que combina el estilo 'value' con otros vectores de rentabilidad. También tiene en cuenta otros criterios importantes, como la diversificación y la liquidez, explica Ángel Fresnillo, director de renta variable de Mutuactivos. «Las principales ideas de inversión por las que apostamos cuentan con una serie de características comunes: se trata de compañías con capacidad para crear valor a largo plazo, con generación de caja y de beneficios con independencia del entorno económico, con dividendo recurrente, etc.». En 2018, varias fueron las historias de éxito que permitieron al fondo posicionarse en lo más alto del ranking, como Euskatel, Almiral, Zardoya Otis, Solarpack y Solaria. En Mutuactivos creen que se va a producir una sustitución de las energías tradicionales hacia las renovables, por lo que apuestan por este último tipo de compañías, pues las energías eólica y solar ya son competitivas. De cara a este año, sus posiciones están en firmas como Euskaltel, Navigator, Atlantia, Zardoya, Merlin o Técnicas Reunidas. «Entre los sectores que nos gustan figuran el de telecomunicaciones y el de energías renovables», añade Fresnillo.
Evitando la deuda...
Otro de los grandes éxitos de estos años ha sido Santander Acciones Españolas, un fondo que combina el análisis de compañías con el del entorno. «Con las mejores ideas formamos la cartera pero, obviamente, tenemos presente cuál es la situación macro. En fases más maduras del ciclo, buscamos un sesgo más defensivo, primando las compañías con menor apalancamiento financiero», explica su gestor, José Antonio Montero de Espinosa. Invierte en compañías en las que no tenga restricciones de liquidez para poder construir y deshacer las posiciones, mayoritariamente cotizadas en España, de tamaño medio y grande. En los últimos años, la principal fuente de valor ha sido la selección de valores y no tanto la apuesta sectorial. De cara a este año, destaca que lo que tienen en común la mayor parte de las empresas en cartera es un balance saneado. «Tratamos de evitar el apalancamiento excesivo», comenta.
La selección de compañías -en una cartera concentrada y sin restricciones- también ha sido clave en el desarrollo del Caja Ingenieros Iberian Equity, con Didac Pérez al frente, que destaca cómo el fondo combina una parte estructural compuesta por negocios de calidad con una cartera satélite con compañías que atraviesan por algún problema de carácter temporal. El mayor contribuidor en tres años ha sido Fluidra, aunque otros negocios como CIE, energía (Galp y Repsol), Corticeira Amorim, Navigator o Vidrala también destacan. Ahora, y a raíz del comportamiento de determinadas compañías en la última parte del año, aprovechan su posición en tesorería «para invertir de forma selectiva en compañías con un componente más cíclico ya presente en cartera, en las cuales se estaba poniendo en precio un escenario catastrofista». Algunos ejemplos son firmas relacionadas con el petróleo y las papeleras y, en general, que habían sido castigadas a pesar de no haberse materializado un deterioro de sus fundamentales.
También seleccionando valores ha ganado un muy buen puesto en el ranking el fondo EDM Inversión, cogestionado por Albert Fayos, que destaca su estilo bottom-up y la inversión en firmas con barreras de entrada, ventajas competitivas, solidez de balance (poco apalancamiento), con crecimiento de beneficios sostenible y un crecimiento rentable. En los últimos tres años, los principales contribuidores a la rentabilidad del fondo han sido CIE Automotive, Másmóvil, CAF, Repsol, Acerinox, Colonial y Grifols. «Durante este periodo, el fondo ha estado muy infraponderado en el sector bancario, con exposición prácticamente nula hasta el segundo semestre de 2018, donde hemos invertido en dos valores (Santander y Bankinter) hasta un 9 por ciento», dice Fayos. De cara a 2019, sus principales posiciones son Inditex, Grifols, CAF y Gestamp. «Va a ser un año con más volatilidad. En los anteriores, ésta era extraordinariamente baja», añade.