«Las bolsas, con las valoraciones actuales, viven de tiempo prestado»
Aunque la macroeconomía acompaña, para que las bolsas sigan subiendo con justificación hace falta que los beneficios empresariales también cumplan expectativas, afirma este experto
El panorama político se acaba de despejar, pero los mercados de renta variable llevan subiendo varios meses seguidos, con pocas pausas. Por eso, Nick Peters, gestor de estrategias multiactivos de Fidelity International, no puede evitar preguntarse si las valoraciones actuales están viviendo de tiempo prestado. Está positivo con Europa y Japón, pero los beneficios empresariales deberán sorprender para que sigan subiendo.
¿Cómo entiende Fidelity el concepto de 'multiactivos'?
Los dos fondos, tanto el Fidelity Funds Global Multi Asset Tactical Defensive Fund como el FF GMAT Moderate Fund, tienen un objetivo de retorno absoluto. Para conseguirlo, combinamos una pata de exposición a los mercados, a través de renta fija y renta variable, con otra que reúne ideas de trading. Estas últimas no deberán tener ninguna 'beta' (sensibilidad) a la dirección de los mercados y son básicamente posiciones largas frente a cortas. Es lo que nos permite generar una rentabilidad adicional.
¿Qué estrategias destacan en las carteras en estos momentos?
De momento, el crecimiento económico hace sostenible estas valoraciones, pero a estos niveles nos pareció sensato ir recogiendo beneficios. Y la liquidez que generamos ha ido hacia ideas que no dependen del momentum del mercado.
¿Aún encuentra ideas donde merece la pena asumir riesgo?
Esa es la gran pregunta. Solemos decir que en los fondos hay una especie de 'competencia' por el capital entre la pata de mercados y la de generación de ideas. En el equipo tenemos a 10 analistas que seleccionan los fondos y otros cinco que generan estas ideas temáticas. Hasta el momento -toco madera- han sido capaces de encontrar propuestas de valor. Siempre las hay. El mercado siempre nos da oportunidades, pero hay que tener paciencia. Si no las vemos en ese momento, siempre podemos añadir a la liquidez. Ahora tengo un 5 por ciento listo para ponerlo a trabajar.
¿El panorama político se acaba de despejar tras las elecciones francesas y ya cree que las valoraciones de la bolsa están caras?
El mercado estadounidense cotiza a 18 veces beneficios. La última vez que estuvo así de caro era a finales de los años 90. Para que las bolsas sigan subiendo hace falta que los beneficios empresariales acompañen. Y cuando digo acompañen en realidad me refiero a que tienen que batir las expectativas del consenso. En el primer trimestre fueron muy buenas, un 60-70 por ciento de las compañías lograron sorprender para bien. Pero no puedo dejar de preguntarme qué de difícil les resultará seguir haciéndolo. Cuando las valoraciones están tan altas, es normal ver a inversores recoger beneficios. En Europa y Japón estamos más positivos, pero la bolsa europea ha tenido un buen recorrido desde inicios de año, así que, de nuevo, necesitaremos dos cosas: la macro y los beneficios. La economía en Europa se ha fortalecido; en países periféricos, como España, sin duda se está viendo esa recuperación, pero hace falta confirmar que seguirá por esa senda. También necesitaremos que los resultados empresariales vuelvan a sorprender para justificar el avance que ya hemos visto.
Los resultados empresariales del primer trimestre batieron expectativas. Se mantendrá esta tendencia, ¿o volverán a decepcionar en la segunda mitad de año?
Las cifras del primer trimestre fueron buenas. Donde podríamos ver sorpresas es en el lado doméstico. Me da la impresión de que la confianza está comenzando a remontar. Justo cuando el Reino Unido decide abandonar la Unión Europea, uno se pregunta si Europa es ahora más fuerte. La macroeconomía va por la senda correcta; la confianza del consumidor y la empresarial deberían remontar; los bancos han mejorado o están mejorando sus requisitos de capital, por lo que estarán más dispuestos a prestar. Es un escenario positivo.
Con avances generalizados de casi doble dígito, muchos inversores se preguntan si llegan demasiado tarde a la bolsa europea.
Hemos analizado el comportamiento relativo de las bolsas y la fortaleza de los datos macro y vemos que aún hay una brecha. Como equipo, seguimos positivos con Europa. Nadie ha comenzado la retirada aún porque creemos que la historia positiva aún tiene recorrido.
No ha mencionado mercados emergentes entre sus apuestas.
Tenemos algo de exposición, pero no tienen un peso grande. El año pasado ya tuvieron un buen año los mercados emergentes y, desde nuestra perspectiva, es difícil ver cómo va a continuar el 'momentum'. El rally del año pasado se fundamentó en China y cómo las autoridades iban a sostener su economía, lo que tuvo un efecto contagio en los demás mercados emergentes. Este año hay señales de que el Gobierno chino está reduciendo la liquidez y que están ajustando la regulación. En este entorno es más difícil ver cómo los emergentes lo podrán hacer bien, quizás con un dólar más débil, pero encuentro mejor valor en Europa y Japón.
La gran apuesta del año ha sido la rotación hacia valores cíclicos. ¿Sigue quedando recorrido?
Hasta la victoria de Trump las compañías de calidad, de balances fuertes, etc. lo hicieron muy bien y las 'value' y cíclicas, como las financieras o dependientes de materias primas, se quedaron atrás. Los diferenciales entre las valoraciones de ambos eran amplios. Tras la elección de Trump, estos se estrecharon muy rápido. El debate está en qué estilo lo va a hacer bien a partir de ahora. Si el crecimiento económico sorprende para bien es posible que el rally en cíclicos tenga otra ronda. Si no, es difícil de decir. Dicho esto, un área que aún me parece que está barata son las financieras, tanto las estadounidenses como las europeas. Es una idea que puedo jugar en la pata 'market neutral': estar largo los bancos y cortos de S&P 500 y el Eurostoxx. Si la rentabilidad de los bonos sigue subiendo y la curva recupera algo de pendiente, será algo bueno para los bancos ya que sus márgenes mejoran. Además, Trump está hablando de rebajar algo la regulación del sector. Por eso, incluso aunque la evolución económica se ralentice, los valores financieros deberían hacerlo bien.
Se habla mucho de que el Banco Central Europeo comience el 'tapering' a finales de este año o principios del siguiente. ¿Está más cerca una subida de tipos en Europa de lo que se piensa?
No vemos una subida de tipos en el futuro cercano, pero, en cuanto al tapering, a terminar el QE, creemos que el BCE está esperando a que pasen todas las elecciones. Entonces, hablará de reducir el QE. A Mario Draghi se le da muy bien comunicar a los mercados. Nuestro escenario base es que tiene un curso determinado y no creo que los mercados se lleven un susto cuando ocurra.
No estaba muy convencido con el 'Trump trade' desde el principio.
En ese momento ya teníamos una exposición significativa a la renta variable y nos sorprendió, para bien, lo optimista que se puso el mercado. Pero entrando en el año, con todo lo que habían subido las bolsas y lo difícil que, obviamente, iba a ser que Trump lograra los apoyos para todas las medidas que planteaba, nos pareció sensato ir reduciendo nuestro peso en renta variable. Y ya parece que mucho de lo que planteaba en campaña se ha tenido que rebajar de tono.
¿Estamos viendo una corrección como señal de una pérdida de fe en el efecto Trump?
Hay dos respuestas a esa pregunta. Sin duda, los inversores ahora son más cuidadosos con las afirmaciones que llegan de la Casa Blanca, pero como las cifras macroeconómicas del último trimestre de 2016 fueron tan sólidas, probablemente hubiéramos visto un rally independientemente. Por eso, pese a que hay más dudas, no estamos viendo una corrección significativa, porque tanto la economía como los beneficios empresariales apoyan. Dicho esto, según nuestros modelos macro, vemos señales de que el crecimiento seguirá durante los próximos seis meses, pero que será a un ritmo menor. Otra razón por la que nos pareció correcto recoger algo de beneficios. La gran incertidumbre ahora tiene que ver con la política fiscal. Si Trump es capaz de aprobar recortes fiscales agresivos para las corporaciones y llevar a cabo un plan de infraestructuras, veríamos otro avance en las bolsas americanas. Pero de momento, mi escenario base es que no podrá hacer ninguna de las dos cosas.
Mencionó la bolsa americana cotizando a 18 veces beneficios, y el VIX tocó mínimos históricos hace unos días. Ambos factores se dieron los meses antes del estallido de la burbuja tecnológica. ¿Estamos ante la calma antes del caos?
Sí que me pregunto si las bolsas, con estas valoraciones, están viviendo de tiempo prestado. Me parece que a los inversores no les está importando poner en precio todas las buenas noticias e ignorar las malas. Cuando vemos ese tipo de comportamiento, una buena estrategia suele ser tener algo de liquidez. Porque la volatilidad probablemente repunte, aunque es difícil determinar cuál será su catalizador. No solo es la renta variable. Los bonos y los activos inmobiliarios parecen caros. Si hay algún evento negativo, las valoraciones actuales están demasiado altas como para poder soportarlo. Llegará el momento en el que volverá a haber oportunidades baratas, y será el momento de usar nuestra liquidez.