Los inversores se toman un respiro pero pronto volverán las incertidumbres

A la espera de que algunas medidas que recogían los Presupuestos Generales del Estado puedan ser aprobadas vía decretos, los inversores se han podido tomar un respiro, breve, porque con la cercanía de la campaña electoral volverán las promesas populistas que afectan a la inversión.

Pedro Sánchez, a pesar de su breve mandato, no ha sido una excepción. En España, todos los gobiernos, cuando las cuentas no les han cuadrado, han puesto en la diana al ahorro y la inversión. Penalizar fiscalmente el ahorro ha sido una constante a lo largo de estos años, la permanente tentación de los políticos españoles. Con el rechazo a los Presupuestos Generales del Estado, que contemplaba una batería de medidas que afectaban de manera directa a los inversores, se abre un periodo de reflexión que debería servir para que los candidatos afinaran mejor sus propuestas en este terreno.

Ha sido escandaloso, por ejemplo, el acoso que desde el año 2015 están sufriendo las sicavs (sociedades de inversión de capital variable) por parte de las principales formaciones políticas, que han competido en ver quién lanzaba el mensaje más populista, provocando un inevitable deterioro en estos vehículos de inversión que sirven para canalizar el ahorro y que son fundamentales para la financiación de las empresas y para el apoyo de nuevos proyectos empresariales. Intentar con las sicavs, como se pretende, poner puertas al campo de las inversiones es algo tan absurdo que debería avergonzar a los políticos que han iniciado esta cacería.

Lo mismo se podría decir de la Tasa Tobin, el impuesto que grava las transacciones financieras y que de entrar en vigor provocaría la huida de inversores hacia otros países donde no existe esta tasa, que son mayoría, o del endurecimiento del régimen fiscal de las socimis, las sociedades cotizadas de inversión inmobiliaria, con argumentos repletos de medias verdades y de datos inexactos. 

En cambio, todos los partidos siguen escondiéndose cuando se trata de afrontar uno de los grandes retos de nuestra sociedad, el futuro del sistema de pensiones. Aquí es difícil ganar votos. Por eso todos los gobiernos siguen hurtando ese debate público tan necesario para afrontar los retos que supone la inevitable reducción de la prestación pública. Como insiste el presidente de Inverco, Ángel Martínez-Aldama, lo que hace falta es un gobierno «valiente» que sea capaz de tomar las medidas de calado que de verdad se necesitan en materia de pensiones. Lo de las sicavs, Tasa Tobin, socimis, etc, son maniobras de distracción, una broma de mal gusto.

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