Abengoa. El “sí” de los bonistas, un paso más hacia la salvación
El complejo entramado de ingeniería financiera que diseñó Abengoa para evitar la quiebra progresa lentamente pero aún no es suficiente para la salvación
El complejo entramado de ingeniería financiera que diseñó Abengoa para evitar la quiebra progresa lentamente hacia la salvación del grupo.
El visto bueno de los bonistas al plan de reestructuración firmado en agosto, era una condición necesaria para seguir adelante, pues requería su expresa adhesión.
Durante los últimos cinco años, los bonistas del grupo vieron diluida su participación en un 95%. En este mismo periodo, Abengoa necesitó más de 10.000 millones de euros en quitas ya capitalización de deuda.
Con todo, la aceptación de los bonistas es una condición necesaria pero no suficiente para que la reestructuración llegue a buen puerto. Todo, a expensas de la demanda judicial interpuesta por los minoritarios, cuyo objetivo es paralizar el plan.
¿De qué depende que la reestructuración salga adelante?
- Financiación y apoyo del ICO. Abenewco1, la nueva sociedad que será matriz, recibirá un préstamo a 5 años de hasta 230 millones de euros con la garantía del Estado a través del Instituto de Crédito oficial (ICO), y otros 20 millones que aportará la Junta de Andalucía.
- Avales. Abenewco pactó una línea de avales revolving a 5 años de hasta 126,4 millones. Esta línea se puede ampliar hasta 300 millones. El objetivo es financiar las necesidades de contratación y ejecución prevista hasta finales de 2021.
- Conversión de deuda. Los acreedores, a los que se les deben 153 millones de euros, tienen que aceptar convertir esa deuda en préstamos participativos. Esto tiene que suceder antes de mediados de diciembre, que es cuando expira el plazo de negociación que establece el preconcurso. Este es el punto más candente, las negociaciones con los acreedores. De ellas depende que Abengoa esquive la quiebra.
- Aceptación de los bonistas. Es la que se acaba de producir.
La causa judicial. Todo este plan se podría ver alterado por la causa judicial abierta contra Abengoa por sus accionistas minoritarios. Estos son los puntos clave.
- Los minoristas, agrupados en Abengoa Shares, pidieron la suspensión cautelar del plan de reestructuración. Alegan que han sufrido un “daño irreparable”, pues el plan diluirá su participación hasta el 2,7%. Aseguran que representan a un 14,5% de los minoristas. Abengoa dice que no alcanzan el centenar y representan un porcentaje del capital “muy inferior al que están atribuyéndose”.
- Este jueves se celebrará en los juzgados de Sevilla la vista de la suspensión cautelar solicitada por los minoritarios.