La FER cree que la plaza de Abastos debe ser el centro de la vida social

El presidente de la Federación de Empresarios de La Rioja (FER), Jaime García-Calzada, ha afirmado hoy que la plaza de Abastos de Logroño debe ser dinamizadora del comercio y centro de la vida social logroñesa.

Por ello, la FER ha convocado a empresas, expertos y usuarios a una jornada para plantear distintas experiencias de los mercados municipales y su papel dinamizador en los centros de las ciudades, ha declarado García-Calzada a los periodistas, junto con representantes de plazas de abastos de distintos municipios.

El mercado de Abastos de Logroño, ha dicho, es un espacio que, durante la segunda mitad del siglo XX, supuso un punto de encuentro de los logroñeses, "no solo por ser zona comercial, sino por convertirse en un punto de encuentro social y que ha dado vida a todo el entorno".

La FER y los propios comerciantes "añoran esa vuelta atrás" y ha asegurado que "estamos deseando que la plaza de Abastos sea de nuevo un punto neurálgico y dinamizador del comercio logroñés".

En esta jornada, García Calzada ha asegurado que se podrán ver experiencias de otras ciudades que "han revitalizado sus mercados y han servido de dinamizadores y catapultas para una mejor relación comercial".

Además, gracias a los mercados municipales, ha reconocido que "la vida del centro de ciudad se enriquece con unas actividades que nunca deberían haber desaparecido del centro de las ciudades".

Ha lamentado que "en Logroño estamos asistiendo a una problemática comercial como consecuencia de la falta de tránsito de ciudadanos, agravada con el traslado de los Juzgados de la zona centro a Murrieta".

El sentir de los comerciantes, ha añadido, es que "se les muere la clientela" porque "un comercio necesita el tránsito de personas y si la gente no pasa por una tienda, nunca podrá vender".

El director de Arquitectura del Ayuntamiento Logroño, Rafael Alcoceba, ha reconocido que el edificio del mercado de San Blas, desde el punto de vista arquitectónico, se encuentra muy bien, pero, desde el punto de vista social, su situación actual es casi lamentable".

Ha reconocido que el edificio de la plaza de Abastos de Logroño es "muy singular y posee una calificación de protección muy alta, el nivel dos, una de las más altas de la ciudad", pero "se pueden arbitrar soluciones con un programa que plantee el objetivo y las necesidades que tiene".

En esta jornada se recogen diferentes experiencias que han tenido lugar en distintos mercados municipales de otras ciudades, como Barcelona, Vitoria y San Sebastián, con el fin de "abrir un periodo de reflexión y ver lo que podemos hacer con el nuestro para convertirlo en dinamizados de la vida comercial de Logroño", ha subrayado García-Calzada.

El jefe de Análisis y estrategia del Instituto Municipal de Mercados de Barcelona (INMB), Óscar Martín, ha declarado que la Ciudad Condal se apuesta por "la renovación de los mercados para mantener su competitividad".

Una reforma que, ha explicado, "no consiste en la rehabilitación del edificio, sino en reactivar todo el entramado urbano que envuelve el mercado y revitalizar el comercio a través de actividades dinamizadoras".

Ha confirmado que el INMB apoya las actividades propias que cada mercado desarrolla en su barrio, pero también organiza eventos en los que participan todos los mercados, lo que "permite transmitir a los ciudadanos ese sentimiento de pertenencia de los mercados municipales", que son "uno de los equipamientos de la ciudad, junto con las bibliotecas, más valorados por los vecinos".

El gerente del Mercado de Abastos de Vitoria, Eloy López de Foronda, ha detallado que este espacio fue renovado en 2011 porque, de lo contrario, "estábamos abocados al cierre" debido al escaso número de puestos en funcionamiento que tenían.

A través de esta reforma, ha señalado que el mercado ha ampliado la superficie y el número de puestos, ha apostado por los gastrobares, intenta atraer a los jóvenes e incentivar el comercio de proximidad a través de la instalación de una pasarela peatonal que comunica el mercado con una gran superficie comercial.

Por su parte, la gerente del Mercado de San Martín de San Sebastián, Nerea Aramburo, ha explicado que la renovación de su mercado ha sido "completa" porque se ha transformado una plaza de abastos en un pequeño centro comercial, con grandes superficies, que actúan como locomotora.

El cambio, ha reconocido, ha sido "absoluto en toda la zona" porque "no es solo un mercado, es un centro de encuentro donde siempre pasan cosas" y también acoge a "otros sectores de la ciudad, no solo el comercial, convirtiéndolo en un centro del movimiento social de San Sebastián". EFE.

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