Fondos temáticos para invertir en tu destino
En un entorno marcado por el ruido y la volatilidad, cobra valor la inversión que trata de identificar temáticas y[…]
En un entorno marcado por el ruido y la volatilidad, cobra valor la inversión que trata de identificar temáticas y tendencias de futuro, y por definición, está más enfocada al medio y largo plazo. No son muchas las gestoras que ofrecen en España fondos de este tipo, pero van creciendo en número, con la convicción de que este enfoque tiene ahora todo el sentido.
«El inversor español ha sido siempre muy conservador pero la rentabilidad de la deuda soberana es muy escasa o negativa y los mercados no están baratos, con alta volatilidad y mucha incertidumbre. El inversor debe buscar alternativas, diversificando más eficientemente. La gestión de activos tradicional se centra en unas 1.000 empresas pero es posible salirse de esa manada y moverse con distintos parámetros mediante fondos temáticos, que, al ofrecer acceso a mejores oportunidades, tienden a mejorar la diversificación, generando un exceso de rentabilidad ajustada a riesgo», explica Patricia de Arriaga, subdirectora general de Pictet AM en España. La diversificación mejora también porque un enfoque basado en megatendencias proporciona acceso a temas relativamente independientes del ciclo económico, con mayor diversificación por capitalizaciones y estilos que la inversión tradicional.
Coincide Ana Fernández, fundadora de la EAFI AFS Finance Advisors, en que este tipo de inversión aporta diversificación, pero también estabilidad a la cartera global: «La inversión temática tiene sentido porque ayuda a enfocar las inversiones de acuerdo a una ideología. Por ejemplo, el sector de agua. Se necesita hoy, y seguiremos necesitándolo mañana. Por tanto, es una estrategia que nos cubre el horizonte de inversión para el corto, el medio y el largo plazo».
De Arriaga, que considera que la inversión temática debería complementar a la tradicional en acciones y tener al menos un peso del 5 por ciento, destaca asimismo su visión de largo plazo: «La mayoría de inversores abandona ante resultados decepcionantes a corto plazo. De ello pueden aprovecharse aquellos dispuestos a considerar un horizonte de más largo plazo, alejados del «ruido cortoplacista», la especulación y grandes crisis esporádicas». Pero advierte: los que no puedan tolerar desviaciones respecto a un índice deben abstenerse, pues habrá períodos durante los que las inversiones temáticas queden por debajo, si bien las perspectivas «son muy atractivas a largo plazo y para aquellos dispuestos a convivir con volatilidades superiores al 10 por ciento».
Porque estos fondos, al capitalizar tendencias seculares, generan fuentes duraderas de crecimiento del capital, y ofrecen una mirada al futuro, lo que aporta un gran valor añadido: «Su naturaleza predictiva contrasta con la mirada hacia atrás de los índices ponderados por capitalización bursátil, que se centran en ganadores del pasado», añaden en Pictet AM.
Más demanda
Los inversores empiezan a demandar con fuerza estas estrategias... también por su sencillez: «La compleja situación de los mercados nos recuerda más que nunca la importancia de buscar tendencias de inversión sostenibles en el tiempo. No se trata de jugar a adivinar el futuro, sino de ser visionarios para conseguir retornos a largo plazo. Por otro lado, los inversores se sienten atraídos por un nuevo enfoque que invierte en aquello que todos somos capaces de entender y en una apuesta por el crecimiento y el cambio hacia donde se dirige el mundo», dicen en AFS.
Vafa Ahmadi, director de renta variable temática en CPR AM, de Amundi, considera que, «en un mundo donde las fuentes de crecimiento son escasas, los inversores quieren una rentabilidad duradera que solo puede basarse en el crecimiento. La inversión temática proporciona una alternativa a las estrategias tradicionales: generalmente incrementa las oportunidades de ofrecer más retornos, sin tomar mayores riesgos, en el tiempo. De hecho, captura las oportunidades creadas por tendencias estructurales de largo plazo y por la ciclicidad de medio plazo a menudo asociada a estas tendencias».
La oferta en España
No hay muchos fondos temáticos en España ni fuera. Ello puede ser atribuible, entre otros aspectos a que, a diferencia de la inversión sectorial, la temática requiere un proceso de identificación de megatendencias, generación de ideas, expertos y metodología apropiados, con capacidades globales, explican en Pictet. Pero los inversores españoles se sienten más atraídos por esta inversión a medida que su cultura financiera aumenta, y las gestoras toman medidas, lo que favorece el desarrollo en España. Estas son algunas de las propuestas en nuestro mercado.
Pictet AM. Si hay una entidad que representa esta filosofía es Pictet, que gestiona 25.000 millones de dólares en inversiones temáticas, con 21 años de experiencia y 32 profesionales. La gestora tiene una oferta que parte de la definición de megatendencias del Instituto de Copenhague para Estudios Futuros: fuerzas estructurales económicas, demográficas, geopolíticas, tecnológicas y sociales a largo plazo. Se trata de retos fundamentales que requieren inversión sostenida, como crecimiento económico, urbanización, aumento y envejecimiento de la población, propensión a externalizar los servicios públicos, globalización e individualización, incremento de la riqueza en países emergentes; innovación tecnológica, y escasez de recursos naturales. En las intersecciones se encuentran oportunidades en temas que incluyen una amplia variedad de ideas. Todo ello conforma un universo global de 2.600 empresas cotizadas.
La entidad centra su oferta en cuatro temáticas principales. En primer lugar, salud y biotecnología (las personas mayores de 65 años necesitan cuatro veces más fármacos y su número puede doblarse hacia 2060, mientras aumentan las enfermedades y los costes sanitarios, de forma que la demanda de soluciones más baratas va en aumento); en segundo lugar, tecnologías disruptivas: comunicación digital, seguridad y robótica (la globalización e Internet generan nuevos negocios en comercio electrónico, publicidad y aplicaciones, un mercado de un billón de dólares los próximos cinco año); en tercer lugar, medioambiente: agua, agricultura, madera, energías limpias y eficiencia energética. Y por último, marcas de gama alta. Además, la gestora cuenta con un fondo que combina todas estas temáticas.
Entre los nuevos desarrollos, destaca Pictet Robotics, un fondo que invierte globalmente en tecnologías instrumentales, automatización industrial y servicios y aplicaciones de consumo y se encuentra en la intersección de varias megatendencias globales: crecimiento, envejecimiento de la población, sostenibilidad y conocimiento.
AFS y Gesconsult. Hace dos años, Ana Fernández eligió a Gesconsult para gestionar su sicav Kokoro -corazón o sentimiento, en japonés-, que invierte en seis megatendencias: el aumento de la esperanza de vida (varios sectores entre los que se encuentran el farmacéutico, médico estético, los relacionados con residencias y viajes para personas jubiladas, se han visto gratamente beneficiados); el crecimiento de la clase media en Asia y África (es imparable e invertir en determinadas empresas locales puede funcionar a largo plazo); los bienes de lujo (determinadas empresas relacionadas con este sector tienen un posicionamiento que las hace líderes y su nivel de ventas crecerá a medida que se incremente la clase media y alta); el sector del agua y energías limpias; la tecnología enfocada a la seguridad física y la cibernética y robótica; y el turismo global.
«Esta forma de estructurar las tendencias nos ofrece un horizonte suficientemente largo pero nos mantenemos en alerta con la mirada puesta en el futuro. De hecho, en estos momentos, estamos analizando el impacto en la generación y reciclaje de basuras, así como las inversiones tecnológicas relacionadas con los nuevos hogares que estarán dotados de domótica, energía solar, vidrio líquido, sensores... etc», explica Fernández sobre los planes futuros.
Robeco. La gestora holandesa cuenta con dos tipos de productos: fondos de renta variable temática (invierten en empresas orientadas al futuro, que desarrollan productos y servicios innovadores para abordar los principales retos en materia de sostenibilidad, como los cambios demográficos, la escasez de recursos, la contaminación y el cambio climático, y que podrían crecer más que la media) y fondos de renta variable por tendencias (identifican las tendencias seculares más atractivas y los temas de crecimiento a largo plazo dentro de cada tendencia).
Dentro de los primeros y basándose en temas de sostenibilidad identificados por RobecoSAM -recursos hídricos, energía inteligente, clima y vida saludable, materiales inteligentes e industria agropecuaria-, cuenta con fondos como el RobecoSAM Smart Energy Fund (invierte en empresas con orientación tecnológica que afrontan los problemas relacionados con el cambio climático y los riesgos para la seguridad que afectan al sector tradicional de la energía); Sustainable Agribusiness Equities (empresas que representan un papel integral en la prestación de seguridad alimentaria a largo plazo); Sustainable Global Active (con empresas líderes en sostenibilidad); Sustainable Healthy Living (invierte en empresas relacionadas con hábitos de vida saludables); Sustainable Water y Sustainable European Equities (se fija en empresas que generan rendimientos sostenibles a lago plazo).
En cuanto a los fondos por tendencias, destacan Global Consumer Trends Equities (invierte en empresas relacionadas con el consumo de todo el mundo, como fabricantes de artículos de lujo a precios asequibles, empresas de educación y agencias de viajes online), New World Financial Equities (con empresas activas del sector financiero global) y Property Equities.
Amundi. Desde Amundi, destacan el trabajo de CPR AM, el centro de gestión de estrategias temáticas del grupo, que cuenta con cinco de ellas -envejecimiento de la población, situaciones especiales, lujo y estilo de vida, recursos globales y agricultura y minería de oro- y gestiona 22 fondos abiertos y 16 dedicados, con más de 4.000 millones de euros en activos. Una de sus historias con más éxito es el fondo CPR Silver Age, una estrategia que se centra en las oportunidades que ofrece un fenómeno no reversible como es el envejecimiento de la población mundial y el comportamiento de dos segmentos: los recién jubilados y los mayores de 80 años. Y, a partir de ahí, invierte en ocho sectores: bienestar, gestión de activos, ocio y automóviles (tendencias de consumo del primer grupo), seguridad y dependencia (segundo grupo), salud y farmacia (comunes a los dos grupos), formando una cartera de unos 60 valores, con unos 1.200 millones de euros bajo gestión. Vafa Ahmadi está al frente desde su lanzamiento en 2009.
Más oferta: AXA IM, DEGROOF Petercam, EDRam, Nordea...
También otras gestoras cuentan entre su oferta con fondos temáticos, como AXA IM con su AXA WF Planet Bonds, fondo de deuda que invierte en la temática de transición hacia una economía baja en carbono, a través de bonos verdes y emisores que tienen un impacto medioambiental positivo, según explica su gestor Olivier Vietti. «Creemos en las inversiones sostenibles que pueden crear valor de largo plazo y atractivos retornos, tanto desde el punto de vista financiero como medioambiental», asegura. Puede invertir hasta un 30 por ciento en high yield.
Otra gestora destacada es Degroof Petercam, con su Equities Agrivalue, que invierte en compañías presentes directa o indirectamente en las cadenas de valores alimenticios y en los sectores vinculados con ellas. «El sector de la agricultura presenta un gran potencial de futuro gracias al aumento de la clase media en los países en desarrollo, que va de la mano con un consumo de proteínas más elevado. En los mercados desarrollados, los consumidores son más conscientes de qué comen y quieren ingredientes más naturales en la comida empaquetada, proporcionando otra fuerte dinámica para el sector», comenta Alexander Roose, gestor del fondo.
Adeline Salat Baroux, gestora del Edmond de Rothschild Fund Global Healthcare -fondo temático de renta variable que busca capitalizar las dinámicas del sector sanitario-, explica que el fondo se beneficia de tres factores fundamentales: crecimiento -sobre todo en emergentes-; innovación; y visibilidad, a través de sólidos fundamentales, la alta generación de ingresos y el bajo nivel de deuda que ofrecen las compañías del sector.
Nordea destaca vehículos como el Global Climate and Environment -fondo que invierte en empresas que ofrecen soluciones medioambientales que facilitan la transición hacia una economía sostenible basada en bajas emisiones de carbono-, Emerging Consumer y Emerging Stars Equity, que invierte en la «próxima generación» de compañías líderes en mercados emergentes. En Henderson, Alistair Sayer, Investment Director, destaca el fondo Global Natural Resources, que invierte en sectores relacionados con la minería, la energía y la agricultura. «A medida que la población mundial crece, necesitaremos ser más eficientes en la forma de alimentar a las personas y hacer un mejor uso de la tierra cultivable», explica.
En la oferta de fondos españoles destacan algunos centrados en grandes marcas del futuro, como Ibercaja Global Brands.
¿Y los riesgos?
Eso sí, no hay que olvidar los riesgos: entre ellos, los expertos hablan de no alcanzar la rentabilidad esperada porque la temática tenga un componente sectorial muy elevado -por ejemplo, la robótica-, o confundir megatendencias con modas pasajeras o micro tendencias. «Las verdaderas megatendencias tienen gran impacto pues representan cambios profundos en periodos de diez a 15 años e incluso más. Éstas permanecen, pero los temas evolucionan y hay que monitorizarlos», explica De Arriaga. Además las diferentes temáticas rotan en el tiempo, comportándose unas mejores que otras, lo que es difícil de predecir. Ante este riesgo, cuenta con un fondo, Pictet Global Megatrends Selection, que combina las temáticas y asigna activos con igual ponderación en cada tema, con rebalanceo mensual.