Otra semana en lateral para las bolsas. Sin cambios en los niveles técnicos
Una semana más seguimos sin cambios en las bolsas. El pasar del tiempo en torno a laterales sin definición de rangos estrechos[…]
Una semana más seguimos sin cambios en las bolsas. El pasar del tiempo en torno a laterales sin definición de rangos estrechos aburre y sólo es preludio de un movimiento posterior que será brusco y puede que de significativa magnitud. ¿La dirección? Eso ya es otro cantar. No sabemos qué tipo de catalizador va a propiciar el movimiento que sea capaz de superar o perder los niveles claves de cada rango y las pistas siguen muy confusas y además no podemos descartar salidas o rupturas iniciales falsas. Toca seguir vigilante y pacientes sin perder la actitud y con los planes claros para cada caso. Y no va a ser que no habremos tenido tiempo de prepararnos para cada situación. No va a valer la excusa de que nos pilla por sorpresa. Tocará atender correctamente a los niveles de riesgo que se adecuen a cada uno y a los objetivos de plazo y rentabilidad que nos hayamos marcado.
Los bonos siguen con rentabilidades que no favorecen al ahorrador. Las materias primas mantienen sus dudas tras los últimos movimientos correctivos en los metales como el oro y la plata y las fluctuaciones también si definición en el caso del crudo. Las bolsas emergentes han recuperado posiciones, pero no acaban de superar sus niveles anteriores para buscar continuidad en sus movimientos. En las divisas la volatilidad con la libra manifiesta la preocupación de lo poco que se puede evaluar de impacto real del "Brexit" y ello de rebote sigue lastrando la confianza en las bolsas europeas. No cambia la posición de estas respecto a las americanas en cuanto su estado de debilidad/fortaleza respectivamente aún dentro del propio lateral.
Veremos cómo comienzan a incidir los resultados empresariales en esta nueva temporada y si son suficientes para paliar las incertidumbres que continúan dejando los datos coyunturales macroeconómicos que no desatascan la situación. Por el momento las tensiones geopolíticas están a bajo nivel, pero siempre podemos tener una sorpresa con las mismas.
La semana arranca con festivo en Japón y en EE.UU. aunque hay cotizaciones en el mercado Globex.
El dólar ha cedido protagonismo esta semana a la Libra en todos sus cruces. Sobre todo, por el flash-crash orquestado que sufría nada más iniciarse la semana. El dólar atacaba de nuevo la zona de pivote de la media móvil de las 200 sesiones sobre el nivel de los 1,1170 que llegaba a perder incluso hasta aproximarse a los 1,1100 pero tras el dato de empleo en EE.UU. peor de lo esperado se colocaba al cierre nuevamente próximo a la zona de los 1,1200 que sigue sin consolidarse por encima tampoco. Así que queda en tierra de nadie sin confirmar la entrada en el sesgo positivo dentro del rango mayor superando los 1,1200 de forma consistente y lejos aún perder los 1,1000 para entrar en sesgo negativo también en el rango mayor.
Los niveles de salida para movimientos direccionales mayores se mantienen. Una vez se superen los 1,1200 debería buscar los 1,1400-1,1500 para formalizar el patrón de suelo y atacar la zona de los 1,1800-1,2000. Y en la zona de soportes perdidos los 1,1000 debería buscar los mínimos del año sobre los 1,0800-1,0700 y poder atacar los 1,0500 de los mínimos del pasado ejercicio y abrir opciones a buscar la paridad.
El SP500 cerró la semana con leve corrección invirtiendo el viernes su signo, pero sin moverse de nuevo dentro del estrecho rango lateral que parece pivotar en torno a los 2.155 puntos. A pesar de tener un dato importante como el paro, que salió peor de los previsto, no fue suficiente para marcar una ruptura de cualquiera de los extremos y salir del mismo.
Se va produciendo un ajuste lateral hacia la directriz de soporte del avance desde los mínimos del ejercicio sin mostrar por ahora ninguna relevancia técnica que aporte pistas sobre la posible resolución del movimiento.
Los niveles de referencia de resistencia están sobre los 2.180 puntos. Su superación consistente y con intención debería llevara a superar los 2.200 puntos marcando nuevos máximos históricos y quedando en situación de subida libre si es consistente y con intención. En este caso se daría continuidad al escenario de avances a medio plazo para buscar como siguiente objetivo la cota de los 2.250 puntos con una proyección hasta la zona de los 2.300 puntos. La FED y las elecciones pesan para este escenario y hasta que se disipen estas incertidumbres puede mantenerse en este estado de lateralidad con escaso rango.
La banda baja en los 2.120 como soporte. Ceder esta referencia deja al índice con opciones de entrar en la zona del lateral mayor y no confirmar el escenario de avances a medio plazo. Pero se mantendría con sesgo positivo en el mismo y con opciones de recuperarlo, aunque más dilatada en el tiempo, en tanto no perdiera los 2.050 puntos. Se situaría entonces por debajo de la media móvil de 200 sesiones y buscando atacar los 2.000 puntos. Perder este nivel le coloca en sesgo negativo dentro del lateral mayor y puede atacar la zona de mínimos del año que marcan la entrada en un escenario de corrección. Por el momento es escenario es el que tiene las mínimas probabilidades asignadas desde la perspectiva técnica, y se descartaría completamente con la superación de los 2.200 puntos con un nuevo ajuste de niveles.
El Ibex35 mantiene su situación de debilidad al no lograr consolidarse por encima de los 8.800 puntos que son la referencia pivote del rango lateral. En las últimas semanas se van observando sucesiones de máximos y mínimos relativos decrecientes, pero sin perder los niveles más significativos en el caso de estos últimos. El peso del sector bancario y la desconfianza sobre el mismo tiene gran parte de culpa respecto a esta situación, pero tampoco puede abstraerse de la negativa evolución de pesos pesados como Telefónica.
Los niveles siguen sin cambios. El soporte a no perder para con volver a crear alarma está situado sobre los 8.400 puntos. Cierres por debajo abren las opciones de ataque a la zona de los 8.200-8.000 puntos y cierres semanales por debajo de este nivel apuntan a los mínimos del ejercicio como siguiente objetivo en la zona de los 7.650 puntos. Perdiendo esta zona se activa la extensión del escenario correctivo que son se ha conseguido todavía abandonar y se apuntaría a un nuevo objetivo de proyección hasta la zona de los 6.500 puntos. No es posible descartar este escenario en la situación actual y para reducir sus opciones sólo cabe mejorar la situación atacando las zonas de resistencia inmediatas con intención y de forma consistente.
El primer nivel es situarse por encima del pivote de los 8.800 puntos ya atacar los 9.000 puntos con cierres semanales por encima para cerrar huecos pendientes. Después el rango calve e importante que mantenemos a lo largo de todo el ejercicio entre los 9.250-9.550 puntos. Esta zona se ha de superar de forma consistente y con intención para entrar en un escenario lateral a medio plazo, que mantendría aún el sesgo negativo, pero buscaría como siguiente objetivo los 9.800-10.000 puntos. Si se superan quedaría de cara al final del ejercicio buscar los 10.550 puntos que es la zona que marca el cambio de sesgo dentro del escenario lateral. Por el momento escasas probabilidades asignadas para ello. Y sin la mejora del sector bancario a nivel europeo y local parece una misión imposible. Aun contando con un apoyo favorable de las plazas americanas.