Diez apuestas de inversión para 2016
BNP Paribas Wealth Management ha detectado diez ideas de inversión para este año. Las ha desgranado esta mañana Silvia García-Castaño,[…]
BNP Paribas Wealth Management ha detectado diez ideas de inversión para este año. Las ha desgranado esta mañana Silvia García-Castaño, directora de inversiones de la firma en rueda de prensa. Las apuestas se basan en una visión optimista de la situación actual tan complicada que atraviesan los mercados. En su opinión, el contexto de recuperación económica sigue intacto.
Para los inversores más defensivos, apuesta por desafiar a los bajos rendimientos con dos tipos de activos de renta fija: los bonos convertibles y las emisiones 'high yield'. En cuanto a su apuesta por los convertibles, se basa en el hecho de que ve potencial alcista en la renta variable europea en el año 2016. También, en que las perspectivas para el crédito son positivas, dado que esperan que las tasas de impago únicamente aumenten gradualmente, a la vista de la buena salud financiera de las empresas. En el universo 'high yield', García-Castaño se fija, de momento, en el europeo. En el americano esperaría a que el precio de las materias primas se estabilice.
En cuanto a la renta variable, la aproximación que a ella debe realizar un inversor conservador ha de ser apostando por empresas con elevados dividendos. Ahora esta temática puede tener mucho más sentido, sin tenemos en cuenta, como recuerda García-Castaño, que la remuneración al accionista va a desempeñar un papel más importante que la propia revalorización de las acciones en los próximos años, dado que ahora mismo las valoraciones de los títulos se encuentran en su media histórica. De cualquier modo, la experta de BNP Wealth Management cree que hay que apostar por compañías con solidez suficiente como para garantizar el pago de un atractivo dividendo con vistas al largo plazo. Y aporta otra idea dentro de la temática de la remuneración al accionista: los REITS.
En tercer lugar, para los inversores más conservadores aconseja estrategias flexibles tales como los fondos "long-short", los "global macro", así como los productos estructurados.
Para inversores conservadores y dinámicos aconseja valores cíclicos y "value" para aprovechar la recuperación de la zona euro. A juicio de García-Castaño, pese a que se ha producido una gran disparidad en el comportamiento de sectores, no necesariamente los que peor lo han hecho ofrecen mejores oportunidades que los que lo han hecho mejor. En su opinión, puede haber buenas compañías tanto en unos sectores como en otros, sólo hay que intentar detectarlos. Y no descarta la inversión en el sector financiero, que debe salir ganando en un entorno de subida de tipos de interés.
Tampoco descarta la inversión en mercados emergentes. Eso sí, cree que todavía es pronto para entrar de manera agresiva e indiscriminada en ellos. Cree que, para empezar, habría que apostar por economías que se benefician de la caída de los precios del petróleo, así como por aquellas que muestran una gran estabilidad política. Señala que las oportunidades se encuentran en Asia, especialmente en India.
Japón es otra de las apuestas del banco francés. Reconoce que la economía nipona va a crecer a ritmos bajos, pero apunta que la aprobación del código de buen gobierno empresarial así como la fuerte evolución de los resultados empresariales y la mejora del consumo y las exportaciones son promesa de una interesante creación de valor para los inversores.
Por último, Silvia García-Castaño ha detectado cuatro temáticas de inversión interesantes para los próximos años. En primer lugar, la innovación digital, con empresas dedicadas a la ciber-seguridad, la robótica, el comercio electrónico, el equipamiento médito, la informática en la nube... En segundo lugar, compañías que se están enfrentando con éxito a la nueva economía cuyo gran paradigma es Uber y que está presionando fuertemente a la baja los precios de ciertos servicios. En tercer lugar, las empresas en proceso de transformación, de reinvención. Y, en cuarto lugar, las compañías que pueden sacar partido de la lucha contra el cambio climático.