Tres riesgos tras las vacaciones

Último fin de semana de julio. El mes va a concluir con unos resultados positivos para ahorradores/inversores que recuperarán buena parte de lo perdido en junio por las incertidumbres en la negociación entre Grecia y la Unión Europea. Pero termina también con una serie de datos contradictorios que dificultan la gestión de cualquier cartera. Los últimos datos hechos públicos por el Banco de España confirman lo que ya habíamos adelantado: a finales del primer trimestre de este año, el patrimonio financiero de las familias españolas alcanzó niveles desconocidos hasta ahora como consecuencia de la fuerte revalorización bursátil en dicho periodo. Tal patrimonio caerá en el segundo trimestre a la vista del comportamiento de los mercados. Sin embargo, las familias han debido asumir una caída del patrimonio inmobiliario que ahora supone el 75 por ciento del patrimonio de las familias españolas, mientras que el patrimonio financiero neto (quitadas las deudas) representa el 25 por ciento.

Buena salud financiera que debería permitir que asumiéramos con calma la vuelta de las vacaciones, si no fuera por tres grandes incertidumbres. La primera la situación china, cuyas burbujas seguirán constituyendo una grave amenaza durante buen tiempo. La segunda, Grecia, que tiene todavía fuertes compromisos financieros a los que atender y un largo camino hasta estabilizar su situación. Y, finalmente, un nuevo riesgo que aparece en el panorama español: Cataluña. Al presidente del Govern le preocupa que los soberanistas pierdan las elecciones del próximo 27 de septiembre porque eso significaría "dejar en vía muerta" el futuro de Cataluña. Artur Mas prefiere ignorar que, si de ferrocarriles se trata, lo peor es coger un exceso de velocidad porque aumenta el riesgo de descarrilar con el consiguiente daño para todos sus pasajeros. Esa "enfermedad" del independentismo catalán, de la que hablara Manuel Azaña hace más de 75 años, vuelve a afectarnos y amenaza con perturbar los mercados financieros en la entrada del otoño en España. Marchemos de vacaciones contentos, pero expectantes.