El Ibex despierta con el vencimiento, pero deberá lidiar con la perdida en EE.UU. y Europa
Por fin, la zona de los 11.250 puntos del Ibex fue superada y con contundencia.
Por fin, la zona de los 11.250 puntos del Ibex fue superada y con contundencia. Los bancos aportaron su grano de arena y se notó. Y ello tras el discurso de Yellen, que cambió paciencia por flexibilidad, dando lugar a que atrasaran las expectativas de subidas de tipos en EE.UU de principios del segundo semestre a mediados. Eso sí, expectante con los datos, y es que, ciertamente, las últimas cifras americanas siguen sin estar para tirar cohetes, y con el precio del crudo bajo sin presiones inflacionistas. Por ahora, la esperada subida de tipos por parte de la FED parece enfriarse.
El dólar fue el primero en notarlo, al apuntarse un significativo y brusco repunte que le llevaba en los máximos de la semana a probar los 1,10, para luego perder nuevamente fuelle, pero delimitando el rango. El crudo marcaba nuevos mínimos y las rentabilidad de los bonos "seguros" siguen bajo mínimos. En Europa, Grecia sigue coleando, pero cada con menor impacto en los mercados, sólo con dosis de volatilidad puntuales. Las zonas de máximos anuales, en muchos casos e históricos en otros, siguen estando muy cerca, pero se nota lago el cansancio acumulado. Ante esta situación tocará ver como se lo hace el Ibex para intentar seguir acortando diferenciales que se han acumulado en este inicio de ejercicio por el mal comportamiento del sector bancario, principalmente, que aún tiene asignaturas pendientes. Lo que sigue estando ahí y con atención a las palabras que pueda pronunciar hoy Draghi es la dinámica de su QE que sigue positiva para las bolsas.
Técnicamente, el fondo sigue positivo y en el Ibex toca ajustar niveles por la ruptura en el resto de índices, que siguen vigentes los alcanzados en semanas anteriores, pero en algunos casos mirando a las zonas de refuerzo de soportes.
El dólar ha rebotado desde el objetivo marcado sobre los 1,0500, que ha actuado, por el momento, como soporte claro. La palabras de Yellen le llevaron a buscar de forma puntual el nivel de los 1,1000 y esta es la referencia que delimita ahora el rango. Para pensar en la aparición de un suelo y que hubiera un posible cambio de escenario, deberían volver a verse niveles en los 1,1100-1,1200 de forma consolidada. Y después superar los 1,1500-1,1600 y, por el momento, las condiciones macroeconómicas no se dan para ello, a pesar de que han podido relajarse las previsiones para la subida de tipos. Podemos estar tiempo en este rango, en función de los datos que vayan saliendo, y la clave para mayores apreciaciones del billete verde se queda ahora en la pérdida consistente de los 1,0500, que apuntarían entonces si a la paridad.
El SP500 cerró la semana en la zona de altos, y así ha conseguido recuperar la cota de los 2.100 puntos, sin haber marcado nuevos máximos históricos. El rebote quedaba validado con la superación de los 2.080 puntos, que son ahora el primer soporte débil, pero para lograr afianzarse un nuevo impulso se han de romper otra vez los máximos históricos y buscar niveles más allá de los 2.125 puntos. Cerraba la sesión con un avance del 0,90%, en los 2.108,10 puntos.
Ajustamos como primer soporte débil el nivel de los 2.080 puntos, y después gana fuerza con el último rebote la zona de los 2.040 puntos. Seguimos con la zona de soporte en los 2.000-1.980 puntos, reforzándose ahora ya contando con el apoyo de la media móvil de 200 sesiones, sobre los 2.007,62 puntos con una clara pendiente positiva. Después está la zona de los 1.950 puntos y los 1.900 puntos, y ya por debajo, los mínimos tocados en octubre de los 1.820 puntos, que nos situarían con el sesgo negativo, dentro de un escenario lateral a medio plazo. Con zona de soporte intermedia en los 1.750 puntos, el nivel es el que nos marca la entrada en fase de corrección. Por el momento sigue presentando la menor probabilidad de ocurrencia este escenario negativo.
Validado en el corto plazo el rebote, al superar la zona de resistencia de 2.080-2.100 puntos. Después son los 2.120-2.125 puntos el siguiente objetivo, para quedar de nuevo en subida libre hasta los 2.150-2.160, por donde se proyectan antiguas directrices de techos de canales anteriores.
El Ibex35 se marco en el cierre semanal una de las subidas del ejercicio, para superar la zona de resistencia de los máximos del pasado año, justo en la jornada de vencimiento. Así que el volumen toca ponerlo en cuarentena y tocará ver la consistencia de esta superación para abrir ya en nuevo tramo impulsivo, que no presenta muchas zonas de resistencia fuertes. Así que a poco que el resto de plazas acompañen, podríamos asistir a un buen tramo de avance, aunque sin descartar un posible testeo previo a esta zona superada de los 11.250 puntos, si hay cansancio en el resto de bolsas.
Se ha confirmado pues el patrón de continuación que se dibujaba y que permanecía vigente en tanto no cedieran los 10.800 puntos, y que se ajustan como nueva zona de soporte significativa. Por debajo de esta referencia ya sería otro escenario, de vuelta al lateral, manteniendo el sesgo positivo. El escenario pasa a predominar de nuevo es el impulsivo, si logramos esta consolidación efectiva por encima de los 11.250 puntos. Acabó la sesión con un avance del 2,96%, para cerrar en los 11.419,60 puntos, marcando nuevos máximos anuales y por encima de los del ejercicio anterior.
Recuperamos el escenario de avance, superando los máximos del pasado ejercicio con la búsqueda de la siguiente referencia en los 11.500 puntos. El siguiente objetivo queda situado en los 11.800-12.000 puntos, y estaría en condiciones de cumplir el objetivo del patrón de vuelta mayor, que sigue vigente y que acaba su proyección entre los 12.000-12.500 puntos. Escasas resistencias para estas opciones de avance, que salvo un freno provocado por el resto de bolsas, no sería de extrañar que pudieran verse con rapidez. Aunque, quizá, de forma previo y para validar al fortaleza de la ruptura, no haya que descartar una prueba de la zona de resistencia, superada de los 11.250 puntos. Tocará recortar diferenciales con el resto de plazas de la eurozona en el ejercicio.
Mantenemos la zona de pivote en los 11.000 puntos, pero sin demasiada relevancia más allá del corto plazo. Se refuerza el primer nivel de soporte sobre los 10.800 puntos para mantener la estructura de consolidación impulsiva. Después se queda el rango de los 10.600-10.400 puntos apoyado, con la media móvil de 200 sesiones, en los 10.594 puntos, como zona media del rango lateral mayor con una pendiente bastante plana.
Por debajo, la zona de soporte en los 10.350-10.200 puntos y con los 10.000-9.800 puntos que quedan base del lateral y referencia clave, con una extensión máxima a los 9.600 puntos, que si se pierden con cierre semanal, abren la entrada al lateral, con sesgo correctivo, hasta la zona de los 9.200 puntos. Por debajo, presiones correctivas sí que amenazarían la entrada en fase de retroceso, a medio plazo, que se vería confirmada con la pérdida de los 9.000-8.800 puntos. Pero, por ahora, seguimos con bajas probabilidades para este escenario de corrección, que acabaría por activarse con anulación del patrón de vuelta mayor, con la pérdida de los 7.500 puntos.