Cierres semanales positivos, a la espera de la cita con Draghi

La última sesión de la semana, con vencimientos mensuales en las bolsas europeas, cerró en positivo de forma generalizada.

La última sesión de la semana, con vencimientos mensuales en las bolsas europeas, cerró en positivo de forma generalizada. En EE.UU. servía para poner fin a una serie larga de sesiones en negativo, que dejan ante el festivo de hoy todavía la rentabilidad del año en números rojos. En contrapartida de las bolsas europeas, que están en positivo para el ejercicio y que parecen estar más con el apoyo del QE del BCE. Esta semana se despejaran intenciones. Por ahora, el dólar las ha recogido con el viaje a la zona del 1,1500, uno de los objetivos marcados que se activaban con la pérdida del nivel de los 1,1800. Pero veremos que nos depara esta semana tildada como clave por la reunión del BCE.

De entrada, tras el descalabro que produjo la vuelta a la flotación del franco suizo frente al euro, además de colocar rendimientos negativos en los depósito, seguimos con los frentes abiertos en Grecia (elecciones este domingo), nuevas tensiones este fin de semana en Ucrania, el crudo y otra sorpresa hoy con los mercados la caída de casi un 8% de la bolsa China en Shanghái. El motivo a priori es de un incremento del control/regulación para actividad de trading por parte del gobierno. Pero parece que esta va a ser la tónica del ejercicio mucha volatilidad, y veremos si en ello van implícitos movimientos direccionales con continuidad o solamente nos mantendremos en rango.

El crudo está buscando suelo y las rentabilidades de los "bonos seguros" un techo, pero son varias semanas ya las que se mantiene esta situación sin nada definitivo que nos muestre que ello vaya a ser así, al menos desde la perspectiva técnica. Seguimos con los niveles sin cambios, salvo la bolsa alemana que ha logrado marcar nuevos máximos históricos en una evolución el viernes que la convirtió en la mejor de todas. La preocupación por las previsiones a futuro de beneficios en EE.UU. pasa factura a la espera de ver como la FED maneja su normalización en los tipos, en tanto que la inflación contenida por la caída del precio del crudo es una ayuda a contener la misma. El dato del incremento de confianza de los consumidores del viernes permitía modificar el signo que se había mantenido en negativo por cada una de las sesiones de la semana.

El dólar perforó en intradía finalmente la zona d elos 1,1500, marcando un nivel no visto desde 2009, pero acabó la smeana por encima de forma clara de los 1,1500 y parece que con ganasde propiciar un rebote, por la elevada sobreventa que se acumula. Hoy, con la ausencia de EE.UU. puede tenerlo más fácil. Auqnue todos los movimientoss se van a culminar conla decisión del jueves de BCE. Mantenemos pues por ahora esta zona de los 1,1500 como soportes que, si ceden, nos lleva a los 1,1300-1,1200 como siguiente objetivo. El movimiento obliga a ajustar las zona de resistencia, ahora en los 1,1850 como primer nivel para validar cualquier intento de rebote. Y como zona débil el nivel de los 1,1600, que puede verse en la sesión de hoy.

El SP500 acabó la semana con avances para minimizar la bajada inicial, que le había llegado a situar de forma intradiaria por debajo de los 2.000 puntos en los mínimos de la semana de forma clara, y que consigue salvarlos en el cierre. Hay dudas sobre la posibilidad de un cambio de escenario, el patrón de techo sería poco ortodoxo, pero esta calro que cualquier rebote que pueda darse ha de superar de forma consistente el nivel de los 2.060-2.070 y atacar con éxito el nivel de los 2.100 puntos. Los volúmenes negociados tampoco han dado muestras de distribución. Cerraba la sesión con un avanace del 1,34%, en los 2.019,42 puntos.

Aguanta como primera zona de soporte débil en los 2.020-2.000 puntos. Por debajo de los 2.000 puntos, más significativa la zona de los mínimos de diciembre en los 1.970 puntos, que cuenta con el apoyo de la media móvil de 200 sesiones, sobre los 1.966 puntos, extendiendo la zona hasta los 1.950 puntos. Después están los 1.900 puntos, y ya por debajo los mínimos tocados de los 1.820 puntos y su extensión hasta los 1.800 puntos. Este nivel es para confirmar la entrada en lateral, a medio plazo. Se confirmaría el sesgo negativo con la pérdida de los mínimos anuales en torno a los 1.750 puntos para el lateral, con la búsqueda de los 1.650-1.600 puntos, que son los que nos marcan la entrada en fase de corrección. Por el momento sigue presentando la menor probabilidad de ocurrencia este escenario negativo.

Vuelve a quedar pendiente la zona de resistencia de los 2.070-2.080 puntos, que se ha alcanzado pero no superado. En el corto plazo, la zona de los 2.100 puntos actúa como resistencia para buscar nuevos máximos y extensiones dentro del escenario de avances. Después ya quedan las extensiones y proyecciones a los 2.115-2.125 puntos como siguiente referencia.

Publicidad

El Ibex35, en una jornada de vencimiento de rango más estrecho, se permitía acabar en positivo la semana y por encima de los 10.000 puntos. Con la zona de soporte sobre los 9.600 puntos y la resistencia en los 10.200 puntos este es el rango amplio que se ha de perder o superar para buscar mayores movimientos direccionales con cierta consistencia, a la espera el jueves del BCE. Acabó la sesión con un avance del 0,56%, para cerrar en los 10.038,90 puntos.

Ahora tenemos la primera resistencia en los 10.200 puntos, a recuperar para mostrar intención de salida a buscar un nuevo impulso con una extensión hasta los 10.250 puntos, que sigue pendiente. Se queda igual el primer nivel de referencia de resistencia, situado en los 10.400-10.500 puntos, para validar cualquier rebote con la extensión a la media móvil de 200 sesiones, sobre los 10.543 puntos ya con leve pendiente negativa. Por encima, para pensar en un impulso más que un rebote, toca cerrar el hueco en los 10.710-10.805 puntos. Y luego los 10.900-11.000 puntos, como resistencia importantes a superar para tener opciones a un nuevo tramo de avance.

Se extiende el avance hasta los 11.250 puntos para pensar en opciones de recuperar el escenario de avance, superando los máximos del pasado ejercicio con extensión hasta los 11.500 puntos. El siguiente objetivo queda situado en los 11.800-12.000 puntos, y estaría en condiciones de cumplir el objetivo del patrón de vuelta mayor, que sigue vigente y que acaba su proyección entre los 12.000-12.500 puntos. Pero, por ahora, este parece un escenario altamente optimista con el tema de Grecia coleando y los periféricos en el punto de mira con la debilidad macro y sólo confiando en Draghi.

Recupera la zona de soporte débil de los 9.800 puntos, si logra consolidarse de forma consistente por encima de los 10.000 puntos, y la zona clave se queda en los 9.600 puntos, que si se pierden con cierre semanal abren la entrada en un escenario lateral, con sesgo correctivo hasta la zona de los 9.200 puntos. Por debajo, presiones correctivas sí que amenazarían la entrada en fase de retroceso, a medio plazo, que se vería confirmada con la pérdida de los 9.000-8.800 puntos. Pero, por ahora, seguimos otorgando bajas probabilidades a este escenario de corrección, que acabaría por activarse con anulación del patrón y la pérdida de los 7.500 puntos. Ganan las opciones de entrada en lateral frente a la continuidad de los avances, sobre todo con el fallo al no lograr consolidar niveles por encima de los 10.500 puntos en un próximo intento.

En portada

Noticias de