Ucrania sigue dando mucha volatilidad a las bolsas, que se defienden con los resultados

Jornada nuevamente muy volátil en la sesión de ayer, que se iniciaba, de forma positiva, por los buenos resultados y expectativas que aportaron de forma significativa Apple y, en menor medida Facebook, después del cierre de mercado de la sesión anterior. Y que se vio completada con otros resultados que, de momento, están decantando el saldo positivo en la publicación de expectativas. Sin embrago, tras el inicio de la sesión americana, noticias de que Rusia indicaba maniobras militares en la frontera de Ucrania, tras altercados entre el ejército ucraniano y los pro-rusos, que activaron una fuerte corrección generalizada de la que no se escaparon esta vez las plazas americanas. Las correcciones fueron significativas, pero también lo fue su recuperación posterior, aunque no se volvieron ya a alcanzar los niveles de máximos, que se habían tocado durante la jornada, motivados por el optimismo de los resultados. Al final mucho movimiento, que se califica de ruido y que, de momento, no supone ningún cambio en referencias y niveles.

Sigue la incapacidad para superar resistencias en zonas de máximos y las correcciones no se llevan por delante los soportes. El saldo final de la sesión fue modestamente positivo, después de haber pasado por niveles extremos. Los bonos sufrieron los mismos vaivenes, pero en sentido contrario, aunque las vueltas mantuvieron niveles de rentabilidad, que siguen sin ser alternativa. El dólar se depreció algo, pero sin alejarse aún demasiado de la zona de pivote de los 1,3800, para buscar resistencias.

Las palabras de Draghi, en su conferencia en Holanda, no aportaron nada nuevo y quedaron eclipsadas por el efecto de la crisis ucraniana. Al ser la sesión antes de del fin de semana, y como está la situación, puede aparecer más presiones vendedoras para cerrar posiciones y quedarse con menores riesgo, vista la imprevisibilidad e incertidumbre que se mantiene con la tensión en Ucrania. Por lo demás, la sesión con más resultados y un inicio en números rojos por este incremento de la tensión. Técnicamente puede ganar peso el sesgo correctivo, en el corto plazo, pero, nuevamente, sin poner en aprietos la tendencia de fondo. Los niveles técnicos relevantes se mantienen otra sesión más sin cambios.

El dólar cerró por encima de la zona de los 1,3800, de forma más significativa, aguantando el nivel de pivote como soport,e tras perderlo, de forma testimonial ,en los mínimos de la sesión, para acabar en la parte alta de la misma, en otra sesión de rango estrecho. Continuando sin modificar los niveles.

Los 1,3700, que son el primer soporte clave a perder, para marcar el inicio de la apreciación, que se ha reforzado con este nuevo rebote. Después, la zona de los 1.3600 y los 1,3500 se mantienen como referencia consistente, a perder para marcar la opción del cambio de rango. La media móvil de 200 sesiones, que ha actuado como zona de referencia, está ahora sobre los 1,3583. Se mantiene pendiente de superación y la resistencia en los 1,3900-1,3930, para marcar un nuevo rango de avance y, después, sin cambios, en la zona del rango, extendido entre los 1,4000-1,4100, como posible siguiente objetivo.

El Dow Jones cerró plano, habiendo marcado nuevos máximos y también nuevos mínimos, respecto a la jornada precedente, con un volumen en línea con la sesiones anteriores. El patrón de velas refleja por completo las dudas que existieron en la sesión de ayer, que no se decantó ni por los buenos resultados ni por las tensiones en Ucrania, aunque participó de ambas. Se mantiene los osciladores de corto plazo, girados al alza en la zona de lecturas neutral, manteniendo las opciones del impulso. El cierre, el mismo de la sesión anterior, de forma testimonial, en los 10.501,65, en la zona de altos del ejercicio pero sin romper.

Podemos ajustar una primera zona de soporte débil, sobre los 16.400 puntos, aunque esta referencia se queda también sobre los 16.200 puntos. Sin cambios en la primera zona de soporte relevante, que ha aguantado el primer envite, sin entrar la parte alta del rango, que tenemos en el corto plazo en los 16.000-15.800 puntos. La clave está en esta referencia de los 15.800 puntos, que no debe perderse, para no dar opciones a acelerar la corrección y apuntar a un posible patrón de vuelta con el que vigilar la zona clave de los mínimos anteriores, sobre los 15.400 puntos.

La recuperación de la media móvil de 200 sesiones refuerza la misma como soporte, sobre los 15.781 puntos. Y, después, quedan los 15.400-15.350 puntos, en los que han quedado los mínimos anuales, a no perder para no sembrar dudas que nos colocarían en un escenario más lateral. Atacando después el nivel clave, a tener en cuenta si volvemos a tener correcciones en los 15.000-14.800 puntos, lo que confirmaría el establecimiento de rango lateral y pérdida de la tendencia alcista de fondo. Perder esta zona debilitaría bastante la situación técnica, porque puede suponer buscar objetivos teóricos en los 13.500 puntos, con el riesgo de iniciar un escenario bajista, que sigue teniendo la menor probabilidad de ocurrencia asignada hasta ahora.

La superación de los 16.600 puntos es la referencia con la que se validaría el nuevo impulso, y dejaría de ser rebote de forma consistente, buscando cierres semanales, por encima de los 16.650 puntos. La siguiente resistencia para tener opciones a ver un nuevo rango en los avances, que está en la zona de los 16.800-17.000 puntos. Mayores proyecciones sólo las podemos ajustar con extensiones, ya que seguimos estando con el escenario de subida libre, sin más referencias, y que se sitúan en el rango entre los 17.000 y los 18.000 puntos, que ya comenzaremos a ajustar, si se superan los máximos históricos, que están costando mucho de ser atacado en lo que llevamos de año.

El Ibex se quedo en positivo, pero sin la opción final de superar los 10.500 puntos al cierre, que si se vieron en los mejores momentos de la sesión, en la que en los mínimos se buscaban también las proximidades de los 10.300 puntos. El volumen fue reducido y se mantienen los osciladores de corto plazo, que están cortados, al alza, en la zona de lecturas neutral. Cerró la sesión, con un avance del 0,36%, en los 10.462,00 puntos, y hoy, desde la apertura en números rojos, deberá probarse el cierre semanal, logra quedarse por encima de los 10.400 puntos o deja opción a una vuelta a los recortes, de corto plazo, con los patrones de agotamiento y dudas que quedan.

Continuamos dentro de la opción del rebote, en la zona a extendida hasta los 10.500 puntos, para poder tener en consideración la aparición de un nuevo impulso, que le lleve a superar a los máximos anuales y se coloque sobre los 10.700 puntos. Después tocará buscar referencias posteriores como siguiente objetivo, en los 10.800-11.000 puntos, también, a priori, difíciles de superar a la primera, aunque contando con la opción de extenderse hasta los 11.250 puntos. Por ahora se han mantenido los soportes claves, que nos respetan la vigencia de la figura de vuelta mayor y que nos deja como objetivo teórico, a medio plazo, la referencia de los 12.000-12.500 puntos. Las dudas que aparecen en la sesión de hoy vuelven a llevar las miradas más a las zonas de soporte. El cierre de posiciones ante el fin de semana, para reducir los riesgo en Ucrania, puede reforzar la señal de debilidad que se dio en la jornada de ayer.

Como cerramos con avances no hay cambios en las zonas de soporte. El nivel de los 10.200 puntos actúa como primer soporte débil. Y la zona clave, que sigue reforzada, está situada en el nivel los 10.000 puntos, que sigue como pivote y que cuenta con el refuerzo de la directriz acelerada de avance ajustada, que sigue vigente. No hay cambios en los soportes claves, de medio plazo, el primero en los 9.700 puntos de los mínimos anteriores. Después ya está la zona del hueco, dejado sobre los 9.530 puntos, que comienza a reforzarse ya con la proyección de la media móvil de 200 sesiones, ahora en los 9.545 puntos, y en la que comienza también a confluir la proyección de la actual directriz primaria de avance.

Esta zona puede frenar los retrocesos más significativos, apoyando a que se mantuviera un sesgo alcista menos acelerado, en caso de los recortes más marcados. Para mantener sano el escenario a largo plazo, ha de aguantar en el rango de los 9.400-9.250 puntos, en la base ajustada del canal de avance, en caso de retrocesos importantes. Los 9.000 puntos quedan zona de atracción por cifra redonda, pero sin relevancia técnica, a priori. Por debajo tenemos la zona de los 8.800 puntos que, de perderse, son los que se encargarían de anular opciones impulsivas y nos marcaría un posible sesgo negativo, dentro del lateral, atacando los 8.200-8.000 puntos. Después tenemos referencias en los 7.700-7.500 puntos, que nos cambia el escenario a correctivo. Mantenemos todavía muy bajas probabilidades, asignadas aún al escenario correctivo, que sólo comenzarán a incrementarse, si se pierde la zona clave de los 9.400 puntos.