Las bolsas quieren mantener el protagonismo

Una jornada que parecía propicia para las consolidaciones de los últimos avances, en la que aparecieron datos poco favorables y en la que se mascaba una crisis política con cambio de primer ministro en Italia, acabó en positivo, en las bolsas fuertes.

Una jornada que parecía propicia para las consolidaciones de los últimos avances, en la que aparecieron datos poco favorables y en la que se mascaba una crisis política con cambio de primer ministro en Italia, volvió a acabar en positivo, de forma muy clara, especialmente en las bolsas fuertes. Los valores tecnológicos volvían a liderar las subidas quedando el Nasdaq a nada de conseguir nuevos máximos de los últimos 14 años, y con opciones de atacar de nuevo las zonas de resistencia de los máximos históricos el SP500 que ya se anota casi 100 puntos desde los mínimos de la corrección.

Y aunque no se disiparon completamente las dudas especialmente en el Dow Jones o el Ibex por ejemplo, el posible cierre semanal de hoy con el festivo del lunes por el día de los presidentes puede dar nuevas pistas. De momento no peligra la tendencia de fondo y los virales comparativos de estas última sesiones entre la situación del 29 y la actual (para nada comprables más allá de un nuevo ejercicio de bolsa ficción) que anuncian cracs inminentes, van a tener que esperar. Vale la pena recordar que estos cracs no suceden cuando todo el mundo los anuncia. Así que parece que más bien aún no toca. Correcciones seguro que vamos a tener y más profundas que esta última seguro, este ejercicio se muestra propicio para ello, pero no está aún todo el "pescado vendido" para que suceda. Los bonos continuaron apoyando los avances de la renta variable al no añadir presión sobre los tipos y el dólar mantuvo sus signos de debilidad que aún hoy pueden volver a incrementarse.

Las bolsas asiáticas cerraron mixtas, pues no digerían bien los retrocesos que se apuntaban en los futuros nocturnos americanos, y ello ha provocado inicios de sesión con dudas en Europa, que se han disipado por ahora en el transcurso de la mañana, a la espera de los movimientos de los bolsas americanas a ver si son capaces de mantener el ritmo o apuntan a respiros. Sorprendente que de momento las bolsas pasen de puntitas sobre la crisis política italiana, que incluso su bolsa es al de mejor comportamiento.

El dólar se consolidó de forma clara, por encima del pivote de los 1,3600, que sigue en su función, y busca el ataque a la primera zona de resistencia de los 1,3700 que ya ha probado en la sesión europea aunque sin lograrlo de forma consistente. Ahora, los 1,3600 son primer soporte en su función de pivote. Después el soporte sobre los 1,3500 se mantiene como primera referencia consistente, para marcar la opción del cambio de rango. La siguiente proyección que tenemos como soporte clave en los 1,3450-1,3400. Si se pierden, se puede pensar en otorgar mayores probabilidades a otros escenarios de apreciación del billete verde. La media móvil de 200 sesiones, que ha actuado como zona de referencia, está ahora sobre los 1,3401 superando al alza zona confluyente con los mínimos relativos anteriores y es una zona de fortaleza antes de los 1,3200.

La zona de los 1,3700 es la primera referencia a tener en cuenta para dar continuidad al rebote, a ver qué ocurre con el cierre semanal. La zona de resistencia importante, con el nivel de los 1,3800-1,3830 antes de buscar la opción del techo del canal, se proyecta sobre los 1,4000, con opción previa en la zona de los 1,3900. Después se activaría el siguiente objetivo en la zona de altos de 2011 sobre los 1,4000-1,4100 con un nuevo rango al alza.

El Dow Jones, que inició la sesión dudas por los datos macroeconómicos acabó en la zona de máximos del día con un buen volumen de negocio y recuperando de forma testimonial la barrar psicológica de los 16.000 puntos, que actúa como primera resistencia que extendemos hasta la zona de los 16.200 puntos, para tener opciones de anular patrones bajista y volver a plantear un impulso hasta la zona de máximos históricos. Y ello a pesar de la anulación por mal tiempo de la comparecencia de Yellen en el senado, a modo de anécdota. El nivel del cierre semanal ha de ser clave para la siguiente semana que no se inicia hasta el martes.

El avance fue al cierre de un 0,40%, para acabar en los 16.027,59 puntos. Los osciladores de corto plazo están en zona de lecturas de sobreventa, confirmando los indicios de giro que validan la referencia de soporte y propiciar el rebote que va tener en los 15.800-6.000 puntos la primera referencia importante para validarse. Las espadas siguen en alto ante la importante resistencia extendida de los 16.200-16.250 puntos, que anularía las opciones de aparición de un patrón de HCH que podría llegar a hacer las delicias de los bajistas si se confirmara.

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Con la opción al rebote se recupera la vigencia de la zona de los 16.150-16.250 puntos, antes de tener opciones de volver a plantear el escenario de atacar a los máximos históricos y buscar mayores continuidades. Queda pendiente de forma clara la superación, de forma consistente, los 16.500 puntos, que vuelven a ser primera resistencia extendida hasta los máximos de los 16.600-16.650, la siguiente referencia que ha entrado en liza está en la zona de los 16.800-17.000 puntos. Mayores proyecciones sólo las podemos ajustar con extensiones, ya que seguimos estando con el escenario de subida libre, sin más referencias, y que se sitúan en el rango entre los 17.000 y los 18.000 puntos que ya concretaremos si nos comenzamos a aproximar. Veremos ahora la prueba de la fortaleza de fondo vistos los primeros niveles de soporte que han aguantado los retrocesos. La clave está en si hay fuerza para seguir con los avances o se entra en zona de retroceso mayor y se apunta a un cambio de escenario más lateral y con menor pendiente.

La recuperación de la media móvil de 200 sesiones refuerza la misma como soporte, sobre los 15.500 puntos, con el nivel extendido hasta los 15.300 puntos, en los que han quedado los mínimos anuales. La siguiente opción no lleva ya a los 15.200-15.000 puntos, a no perder para no sembrar dudas que nos colocarían en un escenario más lateral. Atacando después el nivel clave a tener en cuenta, si volvemos a tener correcciones en los 14.800-14.600 puntos, lo que confirmaría el establecimiento de rango lateral y pérdida de la tendencia alcista de fondo. Perder esta zona debilitaría bastante la situación técnica porque puede suponer buscar objetivos teóricos en los 13.500 puntos, con el riesgo de iniciar un escenario bajista.

Comienzan incrementarse las probabilidades de los escenarios más correctivos tras las últimas muestras de debilidad, pero aún nos quedan como el escenario menos probable, ganando más bazas el lateral frente a la continuidad de los avances, a falta de validar definitivamente este nivel proyectado de soporte que ha aguantado. La perdida de los mínimos del año, sin haber marcado nuevos máximos, confirmaría un patrón de vuelta que nos lleva a estos escenarios. De ahí ahora la importancia del rebote.

El Ibex35 acabó la sesión otra vez por encima del psicológico nivel de los 10.000 puntos, pero otra vez sembrando muchas dudas en sus inicios con la presión al sector bancario de fondo. Sigue sin superar la zona de los 10.150-10.200 puntos, para retomar el impulso, una vez validada la opción de rebot,e que suponía el dejar atrás los 10.000 puntos y que es una referencia calve para poder avanzar. De momento está digiriendo bien la crisis política italiana que no supone incremento de las primas de riesgo. Acabó la sesión con un avance testimonial del 0,18% en los 10.098,90 puntos, cerró el hueco inicial y sigue buscando la superación de la resistencia, por ahora con un comportamiento algo más débil que el de la bolsa germana la de consideración de fuerte de la eurozona.

Los 10.000-9.900 puntos siguen como referencia débil de soporte en el corto plazo, en una sesión más para encarar el cierre semanal. El primer soporte clave se mantiene en su zona de extensión en los 9.700 puntos de los mínimos anteriores, y por debajo ya de la directriz acelerada del impulso con extensión hasta la zona del hueco dejado sobre los 9.530 puntos. Para mantener sano el escenario a largo plazo se mantiene en el rango de los 9.350-9.250 puntos en la base ajustada del canal de avance. Pero el objetivo de un patrón de techo secundario sigue amenazante si se pierden los 9.700 puntos que nos llevan hasta la otra referencia en los 9.000-8.800 puntos.

Y está esta zona ya reforzada por la media móvil de 200 sesiones, sobre los 9.081 puntos que pueden frenar antes los retrocesos y apoyaría a que se mantuviera un sesgo alcista menos acelerado, en caso de los retrocesos más significativos si se alcanza este nivel. Por debajo tenemos la zona de los 8.500 puntos que, de perderse, son los que se encargarían de anular opciones impulsivas y nos marcaría un posible sesgo negativo dentro del lateral, atacando los 8.200-8.000 puntos. Después tenemos referencias en los 7.800-7.600 puntos y, luego, ya hacia el soporte de los 7.200-7.000 puntos. Mantenemos todavía muy bajas probabilidades asignadas aún al escenario correctivo, pero es importante que puedan mantenerse de forma consistente los 10.000 puntos, si no, si se pierden la zona de los 9.500 puntos, comenzará el proceso de ganar probabilidades este escenario más lateral o negativo.

Continuamos con los 10.200-10.250 puntos para anular opciones de aparición de patrones secundario de giro, lo que deben superarse para mantener el impulso. Los niveles importantes quedan sin cambios en las zonas de resistencia, la primera referencia pendiente de superar está en el rango de los 10.500-10.650 puntos. Referencias posteriores como siguientes objetivos los situamos en los 10.800-11.000 puntos, también a priori difíciles de superar a la primera, como más próximos, si se lograra superar la zona de los 10.600 puntos de forma consistente. Por ahora se han mantenido los soportes claves. La figura de vuelta mayor sigue aún vigente y nos deja como objetivo teórico a medio plazo la referencia de los 12.000-12.500 puntos. Este es el escenario más positivo por el que seguimos apostando.

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