Sesión de transición, a la espera de que Draghi apunte maneras
La sesión de ayer fue prácticamente de transición, volatilidad en las presentaciones de los datos americanos, pero con escaso impacto en los rango de negocio finales, que quedaron mixtos.
La sesión de ayer fue prácticamente de transición, volatilidad en las presentaciones de los datos americanos, pero con escaso impacto en los rango de negocio finales, que quedaron mixtos. Movimientos de cierre muy moderados que, en bastantes casos, llegaron a quedar planos. La situación no está demasiado clara. Siguen las voces de la FED, que continuará el "tapering" progresivo con la idea de eliminar los estímulos en el último trimestre del ejercicio, cuando la cifra del paro se haya consolidado por debajo de los 6,5%, que se espera se alcancen pronto.
Así que las miradas van a estar centradas en este dato de mañana. Mientras en Europa preocupa el entorno deflacionario y se espera hoy la comparecencia de Draghi, el consenso es que no haya una modificación en los tipos, que se guarde aún este cartucho, pero está por ver que no se puedan fomentar medidas que favorezcan la liquidez y que esta pueda trasladarse de nuevo a la economía real. La gran asignatura pendiente, ya que por ahora parece que todo se cortocircuita y no pasa del sistema financiero. Pero últimamente Draghi ha dado alguna que otra sorpresa así que tocara estar atentos.
El dólar está consolidando la recuperación de los 1,3500, por ahora también en un rango estrecho. Y los bonos han frenado sus recortes de tipos en zonas de resistencias. Si revierten su dirección podrían ayudar a consolidar los soportes en la renta variable y favorecer el posible rebote desde estos niveles. Técnicamente, el fondo pues se mantiene alcista, pero poniendo a prueba referencias que se han de validar con los rebotes, y estos se han de enfrentar a resistencias para que pueda ser confirmado y ver las opciones reales que hay de tener un nuevo impulso. Las incertidumbre y la confusión en el corto plazo está ahí, y en este entorno de mayor volatilidad se hace más necesario esperar a las confirmaciones.
Las bolsas asiáticas han cerrado mixtas, y la apertura europea se presenta con moderados avances, a pesar de Draghi, con la opción de conservar las zonas de soporte, si lo que salga de la reunión se acoge favorablemente.
El dólar se debilitó y se mantuvo por encima del nivel de los 1,3500, perdiendo la referencia sólo de forma testimonial en los mínimos de la sesión. Los osciladores de corto plazo están en la zona de sobreventa, y mostrando indicios de giro, al alza. En manos de Draghi quedará el posible movimiento de rebote, así que, por el momento, seguimos sin cambios en las referencias de niveles.
Dejamos el primer soporte sobre los 1,3500, para confirmar el cambio de rango ha de perderse de una forma más consistente para confirmarse hasta la nueva proyección que tenemos, como siguiente nivel clave en los 1,3450-1,3400, a perder para pensar en otorgar mayores probabilidades a otros escenarios de apreciación del billete verde. La media móvil de 200 sesiones, que ha actuado como zona de referencia, está ahora sobre los 1,3382, en zona confluyente con los mínimos relativos anteriores, y puede ser la zona de fortaleza antes de los 1,3200.
la zona d pivote de los 1,3600 tiene ahora la condición de primera zona de resistencia antes de los 1,3700. La zona de resistencia importante, con el nivel de los 1,3800-1,3830, antes de buscar la opción del techo del canal se proyecta sobre los 1,4000, tras opción previa en la zona de los 1,3900. Después se activaría el siguiente objetivo en la zona de altos de 2011, sobre los 1,4000-1,4100 con un nuevo rango al alza.
El Dow Jones cerró la sesión casi plano, no sin antes haber realizado una excursión a la zona de mínimos, que suponía marcar nuevos mínimos anuales intradiarios, para acabar casi en la zona de altos del día. Ello supone dejar pendiente un patrón de posible rebote, que debería de confirmarse en la sesión de hoy, cerrando de forma positiva por encima de la media móvil de 200 sesiones, que actuó ayer como resistencia, para tener opciones de iniciar la validación de un rebote. La clave estará en el movimiento que pueda darse con la intervención de Draghi, pero principalmente mañana en el cierre semanal tras conocerse el dato de empleo. El recorte fue al cierre de un 0,03% para acabar en los 15.440,23 puntos. Los osciladores de corto plazo están en zona de lecturas de sobreventa pero aún sin confirmar los indicios de giro que ayudaría a validar la referencia de soporte y propiciar el rebote que va tener en los 15.800-6.000 puntos la primera referencia importante para validarse.
Si hay opción al rebote, después se recupera la vigencia de la zona de los 16.150-16.250 puntos, antes de tener opciones de volver a plantear el escario de atacar a los máximos históricos y buscar mayores continuidades. Queda pendiente, de forma clara, la superación de forma consistente los 16.500 puntos, que vuelven a ser primera resistencia extendida hasta los máximos de los 16.600-16.650, la siguiente referencia, que ha entrado en liza, está en la zona de los 16.800-17.000 puntos. Mayores proyecciones sólo las podemos ajustar con extensiones, ya que seguimos estando con el escenario de subida libre, sin más referencias, y que se sitúan en el rango entre los 17.000 y los 18.000 puntos, que ya concretaremos si nos comenzamos a aproximar.
Veremos ahora la prueba de la fortaleza de fondo en que niveles de soporte aguantan los retrocesos, y si hay fuerza para seguir con los avances o se entra en zona de retroceso mayor, y se apunta a un cambio de escenario más lateral y con menor pendiente.
Atacada la primera zona de soporte importante de los 15.500-15.400 puntos, para los retrocesos más significativos, y habiendo quedado por debajo de la proyección de la media móvil de 200 sesiones, en esa referencia con su valor en los 15.478 puntos, que son ahora zona de resistencia intradiaria y primera referencia a superar para validar las opciones de que se mantenga el soporte. La siguiente opción no lleva ya a los 15.250-15.000 puntos, a no perder para no sembrar dudas, que nos colocarían en un escenario más lateral.
Atacando después el nivel clave a tener en cuenta, si volvemos a tener correcciones en los 14.800-14.600 puntos, lo que confirmaría el establecimiento de rango lateral y pérdida de la tendencia alcista de fondo. Perder esta zona debilitaría bastante la situación técnica porque puede suponer buscar objetivos teóricos en los 13.500 puntos, con el riesgo de iniciar un escenario bajista. Comienzan incrementarse las probabilidades de los escenarios más correctivos tras las últimas muestras de debilidad, pero aún nos quedan como el escenario menos probable, ganando más bazas, el lateral frente a la continuidad de los avances, hasta que no se defina el soporte.
El Ibex35 rebotó por segunda sesión consecutiva, aunque sin poder superar las primeras zonas de resistencia que validen la opción de un rebote mayor o el inicio de un nuevo impulso. Y aún se queda por debajo de la directriz de avance perdida pero aguantado como zona de soporte el rango de los 9.700-9.550 puntos. Cualquier impulso necesita un ataque consistente al rango de los 9.900-10.000 puntos, y consolidarse de forma consistente, por encima de los 9.800 puntos, en cierres para tener garantías de ello, en tanto que se mantienen los volúmenes altos de negocio. Cerró la sesión con un avance del 0,21%, en los 9.775,00 puntos, y aún persiste al amenaza de que aparezca el patrón de techo, que podría activar retroceso hasta los 9.200-9.000 puntos, si no lo anula con la superación consistente de los 10.000 puntos, si se presenta el rebote.
El primer soporte sigue estando a prueba en su zona de extensión en los 9.700 puntos de los mínimos anteriores, y por debajo ya de la directriz acelerada del impulso, con extensión hasta la zona del hueco, dejado sobre los 9.530 puntos es otro objetivo, también probable, si continúan las correcciones. La zona clave para mantener sano el escenario, a largo plazo, se mantiene en el rango de los 9.350-9.250 puntos, en la base ajustada del canal de avance.
Pero el objetivo de un patrón de techo secundario sigue amenazante, si se pierden los 9.700 puntos que nos llevan hasta la otra referencia en los 9.000-8.800 puntos. Y esta zona, ya reforzada por la media móvil de 200 sesiones, sobre los 9.024 puntos, que pueden frenar antes los retrocesos, y apoyaría a que se mantuviera un sesgo alcista menos acelerado, en caso de los retrocesos más significativos, si se alcanza este nivel. Por debajo tenemos la zona de los 8.500 puntos que, de perderse, son los que se encargarían de anular opciones impulsivas y nos marcaría un posible sesgo negativo dentro del lateral, atacando los 8.200-8.000 puntos. Después tenemos referencias en los 7.800-7.600 puntos y luego ya hacia el soporte de los 7.200-7.000 puntos. Mantenemos todavía bajas probabilidades asignadas aún al escenario correctivo, pero es importante que puedan recuperase de forma consistente los 10.000 puntos si no si se pierden la zona de los 9.500 puntos comenzará el proceso de ganar probabilidades este escenario.
Para validar cualquier opción de rebote en la sesión de hoy, es clave la zona de los 9.760-9.800 puntos, para después volver a activar las opciones de continuidad, en la zona de resistencia importante de los 9.900-10.000 puntos. Después serán los 10.200 puntos, para anular opciones de aparición de patrones secundario de giro. Los niveles importantes quedan, sin cambios, en las zonas de resistencia. La primera referencia pendiente de superar está en el rango de los 10.500-10.650 puntos. Referencias posteriores, como siguientes objetivos, los situamos en los 10.800-11.000 puntos, también a priori difíciles de superar a la primera, como más próximos si se lograra superar la zona de los 10.600 puntos de forma consistente.
Por ahora se han mantenido los soportes claves. La figura de vuelta mayor sigue aún vigente y nos deja como objetivo teórico, a medio plazo, la referencia de los 12.000-12.500 puntos. Este es el escenario más positivo por el que seguimos apostando, a la espera de ver la profundidad de la corrección, si no daña el escenario que se ha colocado en una situación delicada técnicamente, sobre todo por el aspecto del resto de índices fuertes, del que no se puede acabar de desligar.