La semana permite patrones de continuación a la espera de las reuniones de los bancos centrales

A pesar de la sesión de recortes del viernes, en Europa y de avances testimoniales en EE.UU. los patrones que se dejaron aún son aptos técnicamente para las continuaciones. Aunque la semana se presenta complicada puesto que hay reunión de la FED coincidiendo con el final de mes y del BCE que con sus últimas lecturas el mercado parece querer descontar una bajada de tipos. Además contaremos también con los datos de empleo americanos que últimamente son de las referencias que más impacto tienen en los movimientos a corto plazo. 

Estará por ver que puedan completarse estos patrones de continuación o dejar atrás posibles figuras de doble techo secundarias ya que comenzaremos a adentrarnos en el periodo estacional más flojo estadísticamente para las bolsas.

El dólar aporta pocas pistas con su correlación, sigue dentro del rango pero levemente sesgado al alza que estaría apoyando a priori a una evolución positiva de la renta variable. Se mantiene invariable dentro del rango de las últimas jornadas entre los 1,2950-1,3150.

Su sesgo levemente alcista lleva a pensar más en el ataque a de la zona de resistencia del rango primero en los 1,3150. Y si después atacara la zona de resistencia de los 1,3200 y consiguiera superarla, el siguiente objetivo ya se situaría en la zona de los 1,3400-1,3500 para recuperar el impulso. 
El soporte sigue en los 1,2950 sin atacarse más que de forma puntual. Como soporte a vigilar más direccional tenemos el nivel de los 1,2800-1,2700 que sigue como primera referencia y es la zona que marca la pérdida de las opciones impulsivas al sesgar el lateral a la baja si finalmente cede. El siguiente objetivo ya iría a busca la zona de los 1,2500-1,2400 y de ahí ya volveríamos entrar en zona correctiva con la mirada puesta en los 1,2200-1,2000.

El SP500 cerró con un moderado recorte salvando los mínimos de la sesión y que le permitió no confirmara por el momento el patrón de agotamiento que mostraba el jueves. Cedió un del 0,18% para acabar cerrando en los 1.582,24 puntos. El rebote nos deja la opción de poder formar un doble techo si no logra prolongarse más y superar d forma consistente la zona de los 1.600 puntos. Quedaría de momento como un patrón secundario que se debería de confirmar rompiendo el soporte de los 1.535 puntos y nos dejaría un objetivo en al zona de los 1.480 puntos.

De momento el rebote sigue proporcionando opciones al escenario impulsivo. La zona de objetivo primero está en los 1.600 puntos, que de superarse buscarían una extensión hasta el techo del canal acelerado sobre los 1.620-1.630 puntos. Más allá ya nos quedan los 1.700 puntos pero parece que para ello se ha de desatar una euforia a la que no se le ven motivos sostenibles, veremos con los datos de empleo de esta semana y algunos de los resultados que quedan pendientes.

Sigue ajustado el rango de soporte sobre los 1.540-1.530 puntos. Y mantenemos la proyección del soporte más fuerte en los 1.500-1.480 puntos para no perder opciones en el impulso acelerado. Este es el nivel al que lleva el posible patrón de doble techo si acaba por formarse. La zona de los 1.470-1.450 puntos es la que pueden aguantar el intento de consolidar los niveles alcanzados, y se refuerza al contener la proyección de la media móvil de 200 sesiones sobre los 1.458 puntos. Perder este nivel sí que nos colocaría en lateral con otra referencia de soporte en la zona de los 1.400 puntos. La perdida de esta referencia nos coloca en sesgo negativa con búsquedas a los 1.370-1.340 puntos. Si se pierde el nivel de los 1.340 puntos es un recorte mayor que una consolidación y ya se entra en escenarios negativos que por el momento es la opción con menor probabilidad asignada.

El Ibex35 no consiguió cerrar la sesión en positivo pero nuevamente parecía remontar desde la zona de mínimos y permite mantener la estructura de un patrón de continuación que se ha intentando confirmar en la apertura de hoy, pero que para dictar sentencia técnica sobre el mismo tocará esperar al cierre. Al final de la sesión cedió un 0,81% para acabar en los 8.297 puntos. perdía de forma testimonial los 8.300 puntos pero aguantó la primera zona de soporte en los mínimos de la sesión por encima de los 8.250 puntos.

De momento se ha recuperado la estructura de lateral que aún está vigente a pesar de la leve pendiente correctiva del mismo, y presenta opciones a sesgarlo positivamente para buscar su ruptura si confirmar el patrón de continuación que puede estar trazando y aprar ello deberá cerrar de forma consistente por encima de los 8.425 puntos. Atacando ya el nivel de los 8.400-8.500 puntos para buscar los siguiente objetivos. La resistencia clave para proseguir con impulsos a medio plazo está en la zona de los 8.600-8.800 puntos. Una extensión de avances al siguiente objetivo situado en los 9.000 puntos es la que nos activa el posible cambio de escenario a medio plazo con una extensión hasta la zona de los 9.250 puntos. Las siguientes proyecciones ya se sitúan en zonas próximas a los 9.400-9.500 puntos y dan la continuidad a un escenario alcista a medio plazo que por ahora no se nos sigue correspondiendo a las proyecciones fundamentales y que por ahora se antoja complicado.

La zona de resistencia superada de los 8.250-8.200 puntos sigue como primera referencia de soporte débil antes del pivote los 8.000 puntos. No alejamos de la zona clave que mantenemos sobre el nivel de soporte significativo situado en los 7.800-7.700 puntos en la zona de mínimos del año. Es clave porque su pérdida puede marcar el nivel de cambio de dirección y más correcciones. Refuerza su apoyo con la media móvil de 200 sesiones sobre los 7.880 puntos. A medio plazo para aguantar las opciones de escenarios impulsivos la zona de soporte importante está en el nivel de los 7.700-7.550 puntos. El sesgo direccional variaría a negativo si se pierde esta zona y apuntaría ya hacia el soporte de los 7.200-7.000 puntos. Perderlo dejaría de nuevo opciones de buscar la zona de los 6.500-6.450 puntos. Después los mínimos en los 6.000 puntos es la zona que marca de nuevo la entrada en un escenario correctivo que por el momento se mantiene alejada la posibilidad del mismo.