Persiste la debilidad y el sentimiento negativo para Europa

El semifestivo en Estados Unidos se dejó notar nuevamente en una sesión de escaso volumen y en donde volvían las dudas en Europa. En las plazas americanas se acabó plano. Es una muestra de la debilidad y de la preocupación que se siente de nuevo en la Eurozona con la situación griega y al evolución de las primas de riesgo enfrentadas a una situación de nulo crecimiento económico: Asimismo, estamos nuevamente ante la inoperatividad de encontrar medidas eficaces para intentar salir de la crisis en el Eurogrupo. El cúmulo de compromisos electorales da al traste con cualquier tipo de actuación que no sea meramente tacticista y pensando únicamente en clave electoral. El nuevo mandato de Obama tampoco se prevé nada placido y ya con la cuenta atrás para la negociación del precipicio fiscal. En general, el sentimiento no es óptimo para la renta variable. La propia muestra de la debilidad económica de la Eurozona pasa factura al euro, que vuelve a depreciarse contra el dólar y por ahora con la correlación negativa también es la losa para las bolsas.

Para hoy, la jornada pinta en negativo. El acuerdo alcanzado con Grecia de dilatar su plazo temporal parece que no gusta y la evolución de los futuros nocturnos americanos y los huecos bajistas dejados en la apertura de los futuros europeos marcan las correcciones. Que se puedan cerrar o no estos huecos dará una idea de la posible fortaleza para aguantar o no niveles de soporte o los mínimos recientemente vistos.

El dólar ya ha puesto a prueba la zona de soporte de los 1,2700 y, si la pierde de forma consistente, abre el camino a nuevos retrocesos hasta la zona de los 1,2600-1,2500, pero ya ha comenzado a acumular bastante sobreventa en los osciladores de corto plazo, lo que debería propiciar que se puedan aguantar estos niveles de soporte. Perder esta zona nos llevaría a los 1,2400 y, después, la referencia antes de los mínimos en los 1,2250. Los mínimos nos marcarían la continuación del escenario correctivo en la zona de los 1,2050-1,2000 y nos proyectarían en la zona de los 1,1800-1,1500. A pesar de las últimas cesiones, por ahora este escenario aún está con bajas probabilidades asignadas.

Como resistencias para validar cualquier rebote persiste la zona de los 1,2800-1,2850, con la recuperación de la media móvil de 200 sesiones sobre los 1,2815. Las opciones para cambiar el sesgo están en los 1,3050-1,3100, con la necesidad de superar los 1,3200 para tener opciones de prolongar el movimiento de una forma consistente para buscar un cambio de escenario a medio plazo que no se activa hasta la superación de los 1,3400-1,3500. 

El Dow Jones cerró por segunda sesión consecutiva plano, en los 12.815,16 puntos, en los mínimos de la sesión confirmando la debilidad y continuando sin recuperar la media de 200 sesiones. El volumen en descenso por la jornada semifestiva .

En el corto plazo, para validar cualquier opción de rebote pasa por colocarse de nuevo por encima de la media móvil de 200 sesiones, ahora proyectado sobre los 13.000 puntos. Tras esta referencia, ha cobrado importancia la zona de los 13.300 puntos para tener opciones de proseguir con los avances. La zona de resistencia clave sigue en los máximos sobre los 13.700 puntos, a romper con volumen para que pueda validarse la ruptura de una forma consistente. Después, se deben buscar las proyecciones de los 13.800-14.000 puntos. De superarse estos niveles, el siguiente objetivo ya se sitúa sobre los 14.400 puntos. 

La pérdida de la referencia de soporte que eran los 13.000-12.900 puntos y la media móvil de 200 sesiones nos coloca ahora en un escenario lateral, que nos mantiene con el sesgo positivo en tanto que no se pierda la siguiente referencia de soporte que tenemos en los 12.700-12.500 puntos, marcando el límite del sesgo positivo o negativo dentro del mismo. Por debajo de este nivel, nos quedamos con sesgo negativo para buscar la zona de mínimos anuales en las proximidades de los 12.000 puntos. A partir de ahí, el escenario volvería a complicarse con opciones de pasar a negativo si se ataca la zona de los 11.700-11.500 puntos. El sentimiento se enfría pero la fuerte sobreventa que comienza a acumularse en los osciladores de corto plazo puede propiciar que se mantengan los soportes y buscar algún rebote.

El Ibex 35 se apuntó de nuevo al carro de los retrocesos, perdiendo un 0,90% para acabar en los 7.567,80 puntos, buscando la nueva zona de soporte en sus proximidades con un bajo volumen de negocio. No marcó nuevos mínimos respecto a la sesión anterior pero ya hoy no es descartable que lo haga y pase a buscar el apoyo de media móvil de 200 sesiones sobre los 7.460 puntos.

La zona de los 7.650-7.700 puntos puede ser el primer escollo ahora para los rebotes a corto plazo a pesar de sobreventa que comienza a acumularse en los osciladores de corto plazo.

Esta situación nos deja igual en lo respectivo a la zona de resistencia más significativa de los 7.800-8.000 puntos. Y es necesaria la superación de los 8.000 puntos de una forma consistente para validar cualquier rebote significativo. El nivel que puede marcar un cambio direccional lo mantenemos en la superación de la zona de los 8.250-8.300 puntos de los máximos del último. Sólo si se rompe al alza esta zona se puede pensar en ir a buscar objetivo de proyección definitivo del patrón de doble suelo aún vigente de los 8.450-8.600. Su posterior extensión a la búsqueda de los 8.800-9.000 puntos, que daría opciones a un posible cambio de escenario a medio plazo.

El soporte del escenario lateral está en el nivel de los 7.550-7.450 puntos, que sigue reforzado con la zona la media móvil de 200 sesiones que mantiene la pendiente negativa y se sigue ajustando en la banda baja de este soporte. Perder esta zona nos sesga el lateral en negativo. Para el escenario de medio plazo, se debe mantener el soporte de los 7.200 puntos, que respetaría la clavicular del patrón de doble suelo que aún no ha alcanzado el objetivo.

Por debajo de los 7.000 puntos, nos colocamos con el sesgo negativo y dejando opciones de buscar la zona de los 6.500-6.450 puntos. Esta situación volvería a añadir presión sobre la zona de los mínimos anuales y quedaría anulado el objetivo del patrón de doble suelo. Estos mínimos en los 6.000 puntos es la zona que marca de nuevo la entrada en un escenario correctivo. Los objetivos del mismo estarían primero en la zona de los 5.500-5.300 puntos y, después, en los 5.000-4.800 puntos. Se puede complicar el panorama a corto plazo si no se aguantan los soportes y vuelven las presiones sobre la prima de riesgo con el tema del rescate de fondo.