Los cierres semanales dejan dudas sobre los soportes
Por debajo de los 7.000 puntos, el Ibex se colocaría con el sesgo negativo y dejando opciones de buscar la zona de los 6.500-6.450 puntos
Las bolsas volvieron a sufrir el viernes correcciones a las que lograron sobreponerse al cierre de forma más significativa en Europa que en Estados Unidos. El discurso de Obama con las plazas europeas cerradas y que se habían beneficiado de las subidas apoyadas por los índices americanos no reflejaron el último tramo final de correcciones. A pesar de la postura dialogante para abordar el tema del precipicio fiscal, los puntos de partida siguen alejados para el acuerdo que tiene como fecha límite el final de ejercicio para que puedan prorrogarse unas medidas que de lograrlo preocupan a las bolsas por el impacto que puedan tener en el crecimiento de la economía americana, que deja bastante que desear en su solidez. Las vueltas en V dejadas desde los mínimos de la sesión en los índices europeos se van a tener que poner a prueba en el inicio de la semana, en un entorno de máxima debilidad. El dólar no apoyó los avances de una forma consistente y, por tanto, no aporta aún señales positivas para la renta variable.
Que se haya aprobado la nueva tanda de recorte en Grecia puede ayudar a tranquilizar algo a los mercados, pero los pobres datos de Japón que al final han llevado al primer cierre de la semana en rojo para el Nikkei nos van a llevar a la indefinición. En la apertura, los índices han optado por una leve corrección, por lo que persistirán las dudas sobre las opciones de continuación de los rebotes desde las zonas de mínimos.
El dólar está muy próximo a la zona de soporte de los 1,2700 y ha consolidado por el momento la pérdida de la media móvil de 200 sesiones que se queda en tono a los 1,2815. La zona comprendida entre los 1,2800-1,2850 es la que queda como primera resistencia y nivel clave para validar cualquier intento de rebote que podría entonces favorecer de nuevo al mantenimiento de soportes de la renta variable. Después, aún le quedaría la zona de los 1,2950-1,3000 que tendría que superarse para dar consistencia a los avances. Para cambio de escenario más de medio plazo, las referencias están en la zona de los 1.3200-1,3300 y su confirmación pasaría por la superación consistente de los 1,3500.
La zona de soporte está probándose en los 1,2700 que, si acaba por perderse, vamos a buscar la zona de los 1,2600-1,2500, que es el rango de soporte que marca el sesgo dentro del rango lateral. Perder esta referencia nos coloca en negativo con el siguiente objetivo en la zona de los 1,2450 y la posible búsqueda de los 1,2250. Ésta es la zona de soporte que defiende los niveles de los mínimos anuales en los 1,2050-1,2000. Perder esta zona nos lleva a extender la fase correctiva con los siguientes objetivos en el nivel de los 1,1800-1,1500. Adentrarnos en este tramo de sesgo negativo supone retrocesos para las bolsas con riesgo de ser pronunciados si acabara el dólar por seguir en su apreciación y perder los mínimos anuales.
El SP500 cerró con un tímido avance del 0,17% para acabar en los 1.379,85 puntos, quedando en el nivel de la media móvil de 200 sesiones y quedando en la parte alta del siguiente rango de soporte que tenemos en los 1.370-1.335 puntos.
Cualquier rebote manteniendo la media móvil de 2.000 sesiones tiene una zona de posible resistencia en los 1.400 puntos y que tienen que ser superados de forma consistente para quedar en posición de continuar con los avances hasta la siguiente zona de los 1.430 puntos. La siguiente resistencia que se mantiene en el nivel de máximos entre los 1.465 puntos y los 1.470 puntos es la fuerte ya que ha frenado por tres veces la continuidad de los avances en los últimos dos meses. Si finalmente es superada, deberían llevar a buscar la zona de los 1.500 puntos y una posible extensión hasta los 1.520 puntos. Las proyecciones de canalización están sobre los 1.600 puntos y ello supondría continuar con el escenario de avances a medio plazo. Ahora, esta opción ha perdido opciones ya que estamos entrando en una fase más lateral.
Si perdiera la zona de soporte de los 1.370-1.335 puntos, comenzaríamos a sesgarnos negativamente dentro del rango lateral. Por debajo, queda la referencia de los 1.300-1.270 puntos, cuya pérdida nos llevaría a un escenario de corrección confirmado con la cesión de los 1.240 puntos para buscar la zona de los 1.160 puntos y su posible extensión hasta los 1.100 puntos. Por el momento, este escenario aún lo seguimos teniendo como el menos probable a pesar de que la situación se ha debilitado.
El Ibex 35, tras bajar de forma sustancial y marcar nuevos mínimos respecto al retroceso anterior, acabó cerrando de forma leve en positivo al subir un 0,16%, acabando en los 7.636,60 puntos y quedando aún fuera la banda baja de la zona de soporte que tenemos en los 7.650 puntos y que ahora puede ser una primera resistencia.
En los mínimos de la sesión, por debajo de los 7.500 puntos, casi se apoya en la media móvil de 200 sesiones que se proyecta ya sobre los 7.466 puntos y de momento se mantiene por encima del primer apoyo del escenario lateral en el nivel de los 7.550-7.450 puntos, que sigue reforzado con la zona la media móvil de 200 sesiones, que mantiene la pendiente negativa y que se sigue ajustando en la banda baja de este soporte. Perder esta zona, nos sesga el lateral en negativo. Para el escenario de medio plazo, se ha de mantener el soporte de los 7.200 para que siga sesgado al alza que respetaría la clavicular del patrón de doble suelo que aún no ha alcanzado el objetivo. Por debajo de los 7.000 puntos, nos colocamos con el sesgo negativo y dejando opciones de buscar la zona de los 6.500-6.450 puntos. Esta situación volvería a añadir presión sobre la zona de los mínimos anuales y quedaría anulado el objetivo del patrón de doble suelo. Estos mínimos en los 6.000 puntos es la zona que marca de nuevo la entrada en un escenario correctivo. Los objetivos del mismo estarían primero en la zona de los 5.500-5.300 puntos y después en los 5.000-4.800 puntos. El panorama fundamental no permite para nada descartar a este posible escenario ya más si comienza a complicarse la situación en el resto de bolsas.
Con el modesto avance, se sigue sin cambios respecto a la zona de resistencia de los 7.800-8.000 puntos. Y es necesaria la superación de los 8.000 puntos de una forma consistente para validar cualquier intento de rebote. El nivel que puede marcar un cambio direccional lo mantenemos en la superación de la zona de los 8.250-8.300 puntos de los máximos del último. Sólo si se rompe al alza esta zona se puede pensar en ir a buscar objetivo de proyección definitivo del patrón de doble suelo aún vigente de los 8.450-8.600. Su posterior extensión a la búsqueda de los 8.800-9.000 puntos que daría opciones a un posible cambio de escenario a medio plazo.
El sentimiento se está retornando nuevamente negativo con las presiones sobre el sector bancario y la prima de riesgo. Los datos macroeconómicos no ayudan y pesan factura.