Otra jornada dentro de los rangos

Todo parece encallado direccionalmente en la renta variable, donde los rangos se mantienen sin cambios. Las jornadas presentan volatilidad intradiaria pero sin ir más allá para marcar cambios que definan dirección para más de una sesión. Se respetan tanto los niveles de soporte como de resistencia en una especie de tensa espera en que nadie parece querer mover ficha. Todos los frentes están abiertos y ayer se incrementaban las alertas por la tensión geopolítica de Turquía y Siria. Tampoco hay que perder de vista este polvorín con Irán de telón de fondo. Por ahora, parece que las tensiones no pasan factura al mercado de entrada y sigue ceñido al panorama de la deuda.

La subasta de deuda española ha salido según lo previsto y probablemente los movimientos más acusados vengan con las palabras de Draghi, pero veremos si incluso con ello se modifican alguno de los niveles. La consolidación en torno a las zonas de resistencia, sin perder los primero niveles de soporte importantes, sirve para descargar la sobrecompra que se acumulaba en el corto plazo, pero si luego no vuelve la fuerza puede haber quedado como un proceso ordenado de distribución. Y podría haber algún síntoma de ello viendo evoluciones de indicadores de amplitud y algunos índices sectoriales.

El dólar sigue reforzando el nivel de soporte en la zona de los 1,2850-1,2800 por encima de la media móvil de 200 sesiones y respetando la directriz de avance que ha canalizado el movimiento desde la zona de mínimos del año. Tampoco supera la zona de los 1,2950 que le permita validar las opciones del rebote para ir a buscar la zona de resistencia de los 1,3000 y enfrentarse a la zona de directrices bajistas de mayor plazo que se proyectan en el rango comprendido entre los 1,3050 y los 1,3350.

Si no aguantara este nivel de soporte entre los 1,2800-1,2750, tiene como siguiente referencia los 1,2600-1,2500, que si se pierden quedamos dentro del escenario lateral. Perdiendo los 1,2250 nos colocamos con sesgo bajista, con opciones de atacar nuevamente los mínimos anuales sobre los 1,2050-1,2000 que marcan la continuidad o extensión del escenario correctivo. Si se pierden los siguientes objetivo de corrección nos llevan al rango de los 1,1800-1,1500.

Si rebota desde estos niveles actuales, decimos que tiene como primera resistencia la zona de los 1,3000, pero el objetivo tiene que estar en los 1,3200 para superar la actual directriz bajista, que sigue como referencia de techo y resistencia del movimiento, y buscar la zona de los 1,3300-1,3400 por donde pasa la siguiente zona de resistencia. Superando los 1,3500, ya estaría confirmando el posible cambio de escenario si se confirmara de forma consistente la ruptura de este nivel y apoyando los posibles avances de la renta variable.

El Dow Jones cerraba plano con un avance del 0,09% para acabar en los 13.494,61 puntos, cediendo de forma testimonial al cierre los 13.500 puntos sin superar ni los máximos ni perder los mínimos de la sesión anterior, dejando un patrón de "inside bar" que puede presagiar volatilidad a corto plazo.

Las zonas de soporte se mantienen y la primera está sobre los 13.350-13.300 puntos. Las siguientes las tenemos primero sobre la proyección de la actual directriz acelerada de avance desde la zona de los mínimos del año en torno a los 13.200 puntos, extendida hasta los 13.000 puntos. Respetando este nivel, las opciones impulsivas se mantienen intactas y aún mantendrían su opción, pero ya de una forma menos importante, si se va a buscar el retroceso el rango comprendido entre los 12.850-12.700 puntos.

En este rango, está la proyección de la directriz de avance original desde los mínimos de octubre de 2011, que se apoya en los mínimos de este año en su trazado, una zona de soportes horizontales importantes y la proyección de la media móvil de 200 sesiones que mantiene su pendiente alcista y está situada en los 12.880 puntos. Perder este nivel nos deja de nuevo en escenario lateral con la zona de los 12.500 puntos, marcando el límite del sesgo positivo o negativo dentro del mismo. Por debajo de este nivel, nos quedamos con sesgo negativo para buscar la zona de mínimos anuales en las proximidades de los 12.000 puntos. A partir de ahí, el escenario volvería a complicarse con opciones de pasar a negativo si se ataca al zona de los 11.700-11.500 puntos. Por ahora este es el escenario que cuenta con menor probabilidad de ocurrencia, a pesar de podamos tener los retrocesos hasta los primeros niveles de soporte importantes.

Tampoco tenemos cambios en cuanto a objetivos de avance, pero las opciones de seguir con el sesgo alcista se mantienen al no perder niveles de soporte. La zona de resistencia primero ahora en los máximos sobre los 13.700 puntos. Después, se deben buscar las proyecciones de los 13.800-14.000 puntos para así mantener la pauta ortodoxa del avance.

El Ibex35 volvía a ceder un 0,51% y cerraba en los 7.826,70 puntos con castigo al sector bancario. Dejaba un rango muy estrecho a pesar de los vaivenes brucos dentro del mismo en la jornada. Nos deja sin cambios y mostrando algún giro en los osciladores de corto plazo que se han asomado a la zona de lecturas de sobreventa y ello aún puede propiciar el rebote.

La zona de resistencia más inmediata se sitúa entre los 7.800-8.000 puntos que tiene que superar para validar cualquier intento de rebote. Después la zona de máximos del impulso anterior en los 8.250-8.300 puntos que se deberá superar para buscar las proyecciones sobre los 8.500-8.600 puntos y así validar el escenario de avances dentro del lateral que permitía plantear ataques a la zona de los 8.800-9.000 puntos en donde podemos buscar un nuevo cambio de escenario alcista a medio plazo a pesar de que cuesta encontrar fundamentales que lo puedan respaldar y estando pendientes del rescate.

El rango de soporte se encuentra sin cambios, en el nivel de los 7.700 puntos y la proyección de la media móvil de 200 sesiones que ya comienza a estar plana sobre los 7.570 puntos. Si se consiguen mantener estos niveles como soporte se procederá a ajustar la directriz de avance y la perspectiva de mantener el escenario impulsivo aguantará. Si no lo logra en tanto no se pierdan los 7.200 puntos, situados en la clavicular del patrón de vuelta, el escenario sigue sesgado positivamente.

Por debajo de los 7.000 puntos nos colocamos en lateral con el sesgo negativo y dejando opciones de buscar la zona de los 6.450 puntos que volvería a añadir presión sobre la zona de los mínimos anuales. Estos mínimos en los 6.000 puntos es la zona que merca de nuevo la entrada en un escenario correctivo. Si se perdieran tocarían ver extensiones en la zona de los 5.500-5.300 puntos e incluso no sería descartable el nivel de los 5.000-4.800 puntos. Por ahora este escenario ha visto reducidas sus opciones de ocurrencia pero no lo podemos descartar.