Las rupturas de los soportes se hacen más evidentes y las opciones de rebote se fían a las intervenciones
El sector bancario que teníamos como factor clave, determinante y necesario para poder afianzar recuperaciones ha perdido en esta última semana sus soportes y ha vuelto a marcar mínimos
Pasado el ecuador del mes se sigue validando el dicho de la renta variable americana del "sell in May and go away" (vende en mayo y aléjate). Por ahora no ha entrado en escena el posible efecto del ciclo presidencial americano que en estos ejercicios se oponía al refrán. A falta del cierre semanal las bolsas están acumulando una de las perores semanas del ejercicio. Ayer nuevamente se generalizaron los recortes a ambos lados del atlántico y los datos macroeconómicos mostraron su peor cara no dando opción a frenar las caídas. El deterioro sufrido tras la falta de acuerdo para formar gobierno en Grecia ha vuelto a poner evidencia la fragilidad Europea. Falta de reacción, anquilosamiento para tomar decisiones, la constatación de que el crecimiento económico no avanza (recesiones técnicas ya están confirmadas) y la pasividad a la que se hace frente a todo ello ya han pasado factura a las bolsas y se ha contagiado. El sector bancario que teníamos como factor clave, determinante y necesario para poder afianzar recuperaciones ha perdido en esta última semana sus soportes y ha vuelto a marcar mínimos. La propia banca española con la evolución de las primas de riesgo ha pesado mucho en el sector. Hoy nuevamente vamos a ver como se cotizan las rebajas de rating por parte de Moody's a las 16 entidades españolas. El pesimismo hace mella, la falta de confianza es evidente y el deterioro del entorno no ayuda. Nuevamente se fía todo a la intervención por parte de las autoridades monetarias para intentar una vez más dar la vuelta a la situación, para acabar con los peores augurios que se lanzan en forma de rumores de intervenciones, corralitos, rupturas y salidas del euro. Estamos otra vez en una situación de máxima dificultad para los ahorradores e inversores.
Para hoy esperamos nuevamente una jornada convulsa, con vencimiento de derivados incluidos, sin datos macroeconómicos relevantes durante la sesión. Con el aliciente del estreno de Facebook en bolsa con opiniones muy divididas sobre la misma. De momento las bolsas asiáticas han cerrado en negativo la semana y la apertura de los futuros europeos también es a la baja en torno a un 1% a tenor de los futuros nocturnos americanos que también reflejan recortes y con un dólar que ha confirmado la pérdida de los 1,2700 y que se acerca a los mínimos anuales. Técnicamente al situación está muy tocada y por más que se imploren rebotes por las sobreventas acumuladas los escenarios se mantienen correctivos en las plazas débiles y laterales en las fuertes y sobre esa premisa hay que tener las estrategias implementadas.
El dólar está buscando la zona de mínimos del ejercicio en una prueba de su nivel de soporte que situamos entre los 1,2650-1,2600. Si pierde esta referencia da opción a un nuevo tramo de apreciación de la divisa americana frente al euro con el objetivo primero en la zona de los 1,2500 y posteriormente manejando un impulso posible hasta el nivel de los 1,2250-1,2000. Como se mantiene la correlación negativa con las bolsas esto a priori añade presión correctiva. Si la sobreventa que se acumula favorece que pueda mantenerse el soporte y se dé un rebote los 1,2800 son la primera resistencia en el corto plazo, pero para validarse y tener opciones a recuperar el rango lateral ha de lograr superar de forma consistente el nivel de los 1,2900-1,3000. Si ello sucede daría tranquilidad a la renta variable, pero no hay opciones a cambio de escenario en tanto no se superen primero los 1,3200 y luego se busquen las referencias de los 1,3500-1,3600.
El SP500 cerró en los mínimos de la sesión en los 1.304,86 puntos, en una jornada de volumen similar a las del ejercicio y bajista de inicio a fin. Se aproxima al rango objetivo de corrección que tenemos establecido en la zona de los 1.300 puntos y la proyección de la media móvil de 200 sesiones en torno a los 1.280 puntos. En esta situación estamos dentro del escenario lateral con el sesgo aún positivo en tanto no se pierdan estas referencias. Este es el que consideramos el primer rango de soporte importante para hacer frente a los recortes para que no se comience a poner en duda el fondo del mercado. Perder estos niveles y buscar la zona de los 1.210-1.200 puntos nos colocaría con sesgo negativo dentro de este lateral y llevaría a extremar la vigilancia de un posible ataque a la zona de los 1.160 puntos que es la referencia que no lleva a entrar en un escenario de corrección si acaba por perderse.
Los rebotes que puedan producirse por la sobreventa que comienza a acumularse en los osciladores de corto plazo se deberán validar primero con la superación de la resistencia del corto plazo que tenemos en los 1.335 puntos y después la más importante en el rango de los 1.370-1.400 puntos. En esta situación puede volver a intentar recuperar el escenario de avances y para ello se debería atacar la zona de resistencia de los máximos anuales sobre los 1.420 puntos. Nos extendería el objetivo hasta el nivel de los 1.450 puntos como siguiente referencia para buscar la zona de los 1.500 puntos para mantener la ortodoxia técnica del escenario de avance.
El Ibex35 cerraba en los 6.537,90 puntos nuevamente presionado por el sector bancario y, aunque lograba al cierre alejarse de los mínimos de la sesión, el siguiente tramo a buscar el objetivo de los 6.300 puntos ya ha quedado en marcha. Hoy con la jornada de vencimiento y el descuento de dividendo de Telefónica se va a producir la aproximación cuando menos a las cercanías a este nivel que puede actuar como nueva zona de soporte. La volatilidad y los movimientos bruscos durante la sesión en cualquier dirección se han colocado de nuevo a la orden del día. Si los bancos se comportan como tras la última bajada de rating podemos encontrarnos con subidas apoyadas por el sector y que se active el nivel de soporte. Si no lo aguanta nos aproximaremos ya al objetivo teórico proyectado de la ruptura a la baja del rango lateral que tenemos entre los 6.000-5.800 puntos. Por debajo tenemos como referencia histórica los mínimos del año 2002 sobre los 5.300 puntos.
Cualquier rebote que pueda darse tiene como primera zona de resistencia la referencia de los 6.700-6.800 puntos y para que pueda extenderse más allá de la calificación de rebote técnico debería lograr cierres consistentes por encima de los 7.200 puntos. Luego quedaría el intento de recuperar el rango lateral perdido que tiene como resistencia su zona de soporte que ajustamos sobre los 7.500-7.700 puntos. Recuperar este escenario llevaría implícita la mejora del sector bancario de una forma global. Dentro del rango lateral tenemos las resistencias de los 8.000-8.200 puntos cuya superación nos sesgaría al alza el movimiento dentro del mismo buscando la referencia de los 8.450-8.650 puntos.
Pensar en ataques a la zona de techo del rango lateral en los 8.800 puntos presenta aún muy bajas opciones. De la ruptura del mismo al alza y de una entrada en un escenario alcista sigue como utópico. Se nos mostrará con la superación de los 9.000 puntos que entonces supondrían extender los objetivos hasta la zona de los 9.800-10.000 puntos.
Está claro que seguimos dentro del escenario de corrección a la búsqueda de un posible suelo con referencias de soporte anteriores, pero no podemos establecer el nivel efectivo en que puede producirse y desde luego aún más difícil su plazo temporal. Sobre todo por la complejidad que reciten las incertidumbre la situación. Ajustemos los riesgos a los escenarios y tengamos previstas alternativas para cada uno de los mismos en cuando se nos vayan confirmando.