El Ibex está en manos del BCE y Obama
Cierres positivos de desigual intensidad para la jornada de ayer en las bolsas, en las que tampoco los volúmenes fueron nada especial. Además, los distintos avances fueron a buscar niveles de resistencia que tampoco se superaron para confirmar los escenarios que manejamos.
Los mercados se siguen moviendo con los titulares, para hoy tendremos los que nos deje Trichet las la reunión del BCE y después a la espera de las medidas que va a proponer Obama para la activación del empleo en Estados Unidos. Podría ocurrir que, tras los últimos avances experimentados, ya se hubieran descontado sus efectos y nos volvamos a quedar en tierra de nadie. Pero lo cierto es que la debilidad persiste mucho más en Europa que en Estados Unidos desde la visión técnica.
La situación griega es muy peligrosa. Los mercados siguen descontando el "default", aunque se insiste que no va a ser así. Hasta ahora, los mercados se han llevado el gato al agua y se confirma que el escenario para la renta variable no es demasiado halagüeño por las posibles repercusiones en cadena que puedan desarrollarse.
Hacer predicciones no es un ejercicio profesional, pero se pueden mostrar escenarios y ajustar los riesgos en base a ellos. Considero que en la fase actual es más posible perder oportunidades que dinero en el mercado, a pesar de que podamos decir que hay precios muy atractivos en muchos valores. Por el momento, los riesgos de seguir un escenario correctivo son los que están marcando la pauta y conviene ser muy prudentes.
El dólar ha frenado su apreciación, pero se mantienen las posibilidades de un soporte clave en el entorno los 1,4000 y sigue sin confirmar los rebotes. No así el oro, que volvió corregir hasta probar la zona de soporte de los 1.800 dólares/onza, la banda baja del rango de soporte que se iniciaba en los 1830 dólares/onza. No obstante, hasta que no pierda el nivel de los 1.700 dólares/onza, no se podría hablar de una caída de la aversión al riesgo.
El SP500 confirmó el "hammer" del día anterior y mantuvo su impulso en una jornada de avances completa. De hecho, cerró en los máximos del día, por debajo del nivel psicológico de los 1.200 puntos. El nivel de resistencia que lo mantendrá dentro del patrón de suelo está en los 1.210 puntos, con una extensión hasta los máximos alcanzados en el anterior rebote, cerca de los 1.230 puntos. Sin embargo, para validar esta figura, necesitaremos cierres consistentes por encima de esta referencia con un buen apoyo de volumen, así como el ataque a los 1.250 puntos. De esta manera, podríamos volver a ver opciones de quedarnos en un rango lateral.
El objetivo de avance del patrón nos llevaría buscar las diferentes zonas de resistencia que tenemos por este orden: los 1.270 puntos, los 1.285 puntos y el rango comprendido entre los 1300-1310 puntos. Si fallase al superar la resistencia del patrón de suelo, se añadiría más presión a los soporte. El primero está situado en torno a los 1.140 puntos, antes de la referencia importante de los mínimos de cierre sobre los 1.120 puntos, que extendemos hasta los mínimos intradiarios la zona de los 1100 puntos. Perder estos niveles acentuaría la presión bajista. Y el primer objetivo sería la zona de los 1.050 puntos, con una extensión hasta los 1.000 puntos. Los osciladores de corto plazo se mantienen en rango neutral y el sesgo todavía es negativo. Sin embargo, podría dar indicios de giro que apoyarían entonces la ruptura de
El Ibex tuvo un comportamiento más débil que el resto de plazas europeas, pero en los momentos finales de la sesión consiguió cerrar en las proximidades de los máximos del día y mantuvo los avances. El cierre por encima de los 8.150 puntos apenas nos deja en la primera zona de resistencia en la banda baja del rango de soporte del suelo. La primera resistencia importante la presenta en los 8.300 puntos y de ahí hasta los 8.450 puntos para cerrar el hueco dejado de corrección el lunes.
Sin embargo, son necesarios cierres consistentes por encima los 8.500 puntos para pensar en un ataque a los 8800 puntos. La ruptura de este nivel con apoyo de volumen y con cierres consistentes entre los 9.000 y 9.250 puntos, nos permitiría pensar en los 9.800 puntos. Pero si fallamos ahora en el asalto esta zona de resistencias, volveremos a tener presión sobre la zona de soporte de los 8.000 puntos, hasta los mínimos intradiarios de agosto en torno a los 7.760 puntos. Perder estas referencias, daría continuidad del escenario correctivo. En él continuamos y los primeros objetivos se situan en el entorno de los 7.500 puntos y después la zona de los 7200-7000 puntos, antes de los mínimos de 2009, que están situados sobre los 6.700 puntos, en mínimos intradiarios.