Ni deducción ni precio: lo que hace falta es crédito
Quienes vaticinaban que los precios de los pisos ya estaban lo suficientemente bajos como para adentrarse en el mercado, se[…]
Quienes vaticinaban que los precios de los pisos ya estaban lo suficientemente bajos como para adentrarse en el mercado, se confundieron; y quienes anticiparon que nos encontrábamos ante la probable recuperación del mercado inmobiliario en 2010 como consecuencia de la práctica desaparición de la deducción en el IRPF, tampoco han acertado. Ni una causa -caída de precios- ni otra -desgravaciones fiscales- han sido suficientes como para lanzar a miles de ciudadanos a comprarse una vivienda antes de que finalice este año.
¿No son razones suficientes? No. Porque el factor que realmente condiciona la adquisición de una vivienda es el crédito. Y así lo demuestran las estadísticas de venta de vivienda en el tercer trimestre, con caídas interanuales del 17%.
No es que no haya dinero en el mercado para prestar. Claro que sí. Las entidades financieras viven de captar ahorros y de vender préstamos. Y son las primeras interesadas en que los ciudadanos se endeuden durante años. El problema está en que los requisitos para solicitar una hipoteca ya no son los mismos que hace dos o tres años, porque la banca no está dispuesta a asumir riesgos que puedan acabar con su negocio en el futuro. Y nosotros seguimos sin concienciarnos.
Un conocido me comentaba hace pocos días que había solicitado una hipoteca por 100.000 euros, para una vivienda que valía 130.000 euros. "¡Sólo pido 100.000 euros y no me los dan!", me comentaba. "Normal", le dije. "Por "pequeña" que sea esa cifra, supera el 80% del precio de la casa en 4.000 euros, y por ahí no pasará ningún banco ni caja", le aclaré. "Si, además, la cuota mensual va a superar el 35% de tus ingresos mensuales, olvídate de la operación", le aconsejé.