Primeros pasos para contratar un fondo de inversión
Las comisiones y la correcta elección de un asesor son determinantes antes de optar por un fondo de inversión
En marzo se cumplirán cinco años desde que el Banco Central Europeo (BCE) colocó el precio oficial del dinero en el 0%. Esto hizo que muchos inversores en cuentas y depósitos vieran como su rentabilidad caía en picado.
Actualmente la rentabilidad media es cercana al 0%.
Es por ello que los ahorradores se giraron hacia los fondos de inversión como camino para aumentar la rentabilidad por sus ahorros adecuándose a sus necesidades.
Qué es un fondo de inversión
Un fondo es una institución de inversión colectiva. A través del cuál distintos inversores, que se conocerán como partícipes, depositan sus ahorros con el fin de obtener rentabilidad.
Existe una entidad depositaria, que es la que recibe los fondos y una sociedad gestora que se encarga de llevar a cabo la distribución de ese capital en distintos activos para obtener una rentabilidad adecuada en función de unas premisas de inversión.
La importancia del asesor
El fondo de inversión es un producto complejo. Para ello, Víctor Alvargonzález, socio fundador de Nextep Finance, recomienda la elección de un asesor “y mejor si es independiente” para que realice un perfil de riesgo del inversor y supondrá un ahorro de comisiones.
En el caso de que no fuera independiente, Alvargonzález advierte de que “puede colocar fondos con más comisiones y aquellos que estén en campaña, que pueden que haya sido muy rentables en años anteriores, pero no en el futuro”
Si no se optara por un asesor, una opción para el inversor es montar una cartera a largo plazo, que puede evitar las pérdidas, “pero también perdernos muchas oportunidades de inversión”.
Las comisiones de los fondos, una parte importante
Es importante conocer las rentabilidades pasadas del fondo de inversión, pero teniendo en cuenta que éstas no garantizan las futuras.
Pero, sobre todo, saber las comisiones, que pueden suponer un golpe a la rentabilidad final del vehículo.
Existen varias comisiones. La de suscripción, que pueden cobrar un 5%, mismo porcentaje que las comisiones de reembolso y la gestión del fondo, que se sitúa en el 2,25%.
A ello hay que añadir la comisión de éxito y la comisión de depósito, con un 0,2% máximo.
Qué tipo de fondos elijo
Existe una gran variedad de fondos. Para los más conservadores los de renta fija o retorno absoluto, pero luego están mixtos y para los más agresivos los de renta variable.
A ello hay que añadir los ETF, o fondos cotizados, que replican el comportamiento de un índice o un sector determinado.
Lo más habitual es que cuánto más joven sea el inversor mayor porcentaje de renta variable tenga en cartera, para ir reduciendo ese porcentaje cuánto más cerca esté la edad de jubilación.
Además, como recuerda Alvargonzález un buen asesoramiento permitirá al inversor diversificar su cartera, que “eso no significa que tenga que tener de todo”.
Para evitar sustos es recomendable que el inversor no esté mirando las posiciones diariamente puesto que en ocasiones pueden incurrir en pérdidas o números rojos, que se solucionan a largo plazo.
Diferimiento fiscal
Una de las ventajas que tienen los fondos de inversión es que permiten el diferimiento fiscal. Es decir, el partícipe no tiene que abonar impuestos hasta que rescate la inversión.
En estos casos tributará a los tipos establecidos de rendimientos del capital mobiliario, que abarcan desde el 19% hasta rendimientos de hasta 6.000 euros, hasta el 23%.
De fondo a fondo
Una de las ventajas que tienen los fondos de inversión es su flexibilidad a la hora de cambiar de modalidad o de entidad gestora.
Es decir, el partícipe puede ir cambiando su fondo de renta fija a mixto o de retorno absoluto a uno de renta variable sin tener que pagar impuestos.
De igual manera, puede traspasar su fondo de una gestora a otra (porque decidamos pagar menos comisiones o porque nos gusta más el perfil de la gestión) sin tener coste.
Seguridad
Mientras que los depósitos están respaldados por el Fondo de Garantías de Depósitos los fondos de inversión también cuentan con un vehículo equivalente: el Fondo General de Garantía de Inversiones.
Este instrumento se creó para indemnizar a los inversores en caso de que quiebre una gestora o una agencia de valores –o sea declarada insolvente por la CNMV– hasta un máximo de 100.000 euros.
Son productos líquidos
Una de los aspectos que caracterizan a los fondos de inversión es que se trata de productos totalmente líquidos, es decir, el partícipe los puede rescatar en el momento que lo desee.
En el caso de los garantizados debería esperar a las ventanas de líquidez que ofrezcan.