Contratar seguros como alternativa para abaratar la hipoteca
Hay varios requisitos a tener en cuenta a la hora de valorar si contratar seguros para reducir el coste de la hipoteca
En la inmensa mayoría de los casos, si se quiere conseguir un préstamo hipotecario con un buen tipo de interés, es necesario cumplir un requisito: contratar uno o más seguros mediados por el banco (de hogar, de vida, de protección de pagos…).
Estos productos adicionales, sin embargo, tienen un coste, así que es lógico preguntarse si suscribirlos merece realmente la pena.
Según el comparador bancario HelpMyCash.com, en algunos casos sí puede salir a cuenta, aunque para asegurarse, recomiendan analizar las condiciones de las pólizas ofrecidas por la entidad, calcular si contratarlas abarataría la hipoteca y comparar esa oferta con la de otras financieras.
Valorar si los seguros son interesantes
Según HelpMyCash, lo primero que hay que hacer es leer detenidamente las condiciones de los seguros propuestos por el banco.
En ese sentido, es importante saber cuánto se rebajaría el interés de la hipoteca (la bonificación) en caso de contratarlos: en 0,10 puntos porcentuales, en 0,20 puntos, en 0,30… Esto es especialmente relevante, pues si se suscriben y posteriormente se cancelan, el tipo aplicado subirá en los puntos que se establezcan en la escritura hipotecaria.
Asimismo, hay que fijarse en las coberturas reflejadas en esas pólizas. Por ejemplo, en un seguro de hogar es importante saber qué daños cubriría, mientras que en uno de vida conviene mirar qué importe del préstamo se liquidaría en caso de fallecimiento. Si dichas coberturas no interesan al cliente, quizás sea mejor no contratar los seguros.
Y por último, pero no por ello menos importante, hay que mirar cuánto costarían esos seguros y cómo se pagarían: con una prima anual (cuotas anuales), con una prima única (pago completo por varios años), etc.
Si son de prima anual, hay que tener presente que la aseguradora podría aumentar el precio de la póliza cada año, aunque el cliente tendría derecho a no renovarlo (en cuyo caso perdería la bonificación correspondiente).
Comprobar si abarata la hipoteca
Si el solicitante cree que esos seguros son interesantes, el siguiente paso será comprobar que su contratación realmente abarata la hipoteca.
Para ello, será necesario calcular cuánto costaría ese préstamo tanto si se suscriben esas pólizas como si no se hace. Y en este punto, conviene saber que si no se contrata el seguro de hogar propuesto por el banco, el cliente está obligado a suscribir un seguro de daños con cobertura antiincendios con la aseguradora que quiera.
Pongamos, por ejemplo, que un banco ofrece un interés del 1,50%, que está bonificado en 0,25 puntos porcentuales por contratar un seguro de hogar ofrecido por la entidad que cuesta 200 euros al año.
Si se pidiera una hipoteca de 150.000 euros a devolver en 25 años, para amortizarla habría que pagar un total de 184.971,35 euros, sumando el capital prestado, los intereses y el coste del seguro.
En cambio, si no se firmara esa póliza, el interés aplicado sería del 1,75%. Para el ejemplo anterior, y suponiendo que se contratara un seguro de daños con otra aseguradora con un precio de 150 euros al año, habría que pagar un total de 189.055,10 euros.
En este caso concreto, por lo tanto, contratar el seguro de hogar propuesto por la entidad sí abarataría la hipoteca, aunque como este probablemente se encarecería en cada renovación anual, el precio de la oferta bonificada podría ser algo más alto que el mencionado.
Comparar con otras ofertas
Ahora bien, que una hipoteca sea más barata por contratar seguros con el banco no significa que sea la mejor que se puede obtener. Por ello, desde HelpMyCash aconsejan comparar esa oferta con préstamos hipotecarios de otras entidades, tanto si estos tienen pólizas asociadas como si no las incluyen.
Desde este comparador recomiendan, en ese sentido, tener en cuenta las hipotecas de bancos con los que no es necesario contratar seguros para conseguir un interés competitivo: Hipotecas.com, Coinc, Pibank… Sus tipos pueden ser más altos que los que ofrecen otras entidades que sí piden suscribir sus pólizas, pero al no ser imprescindible firmar sus seguros, los préstamos que ofrecen pueden salir más baratos a la larga.
Tras hacer esta comparativa, el cliente podrá valorar qué oferta le sale a cuenta y podrá decidir si contrata una hipoteca con seguros o si se decanta por otra. Además, al disponer de propuestas de varios bancos, podrá negociar con distintas entidades para tratar de obtener un mejor precio.