Repsol presume de dividendo en su nueva estrategia renovable
Imaz apunta en la junta de accionistas que la prioridad es la rentabilidad para los accionistas
Repsol presentó este viernes su nueva estrategia orientada hacia la transición al sector renovable durante la junta general de accionistas, que sirvió para aprobar además el reparto del primer tramo del dividendo entre los accionistas.
La compañía presentó una treintena de proyectos para que puedan formar parte del del Plan Nacional de Recuperación pospandemia, que cuenta con una inversión asociada de 5.959 millones de euros de los fondos Next Generation de la Unión Europea (UE).
“La meta de la transformación para los próximos años nos empuja a acelerar nuestro viaje a la transición energética”, dijo el consejero delegado, Josu Jon Imaz.
Los 30 proyectos
Los 30 proyectos anunciados reflejan el nuevo foco de Repsol. Ocho están relacionados con el hidrógeno renovable, segmento en el que la compañía espera alcanzar una producción 400 megavatios (MW) en 2025.
Otros nueve estarán ligados con la economía circular. En este apartado, Repsol está llevando a cabo la adaptación de sus complejos industriales para reutilizar los residuos generados y convertirlos en biocombustibles.
El objetivo de producción es contar con una capacidad de biocombustibles avanzados de 1,3 millones de toneladas (Mt) en 2025 y más de 2Mt para 2030.
Cuatro proyectos más estarán enfocados en generación y almacenamiento renovable, mientras que otros ocho serán de infraestructura para la transformación digital.
Con todo, Repsol señala en su plan de objetivos conseguir una mayor eficiencia energética.
Para ello, invertirá 400 millones de euros para reducir 800.000 toneladas de dióxido de carbono.
Críticas de Brufau al Gobierno
El presidente de la compañía, Antonio Brufau, cargó contra el Fondo Nacional para la Sostenibilidad del Sistema Eléctrico ya que, considera, “confunde erróneamente electrificación con descarbonización”.
Brufau explicó que este fondo, aprobado por el Gobierno, repartirá los costes fijos de la factura de la luz entre los comercializadores de luz, gas y productos petrolíferos.
Esto obligará a que todos los sectores energéticos financien los sobrecostes de anteriores proyectos relacionados con electricidad renovable.
Algo que, a juicio de Brufau, “poco tiene que ver con la sostenibilidad futura” del sector eléctrico.
Dividendo, en julio
Pese a que el foco estuvo puesto en la nueva estrategia renovable, Imaz señaló que la prioridad es “asegurar, en el camino, la rentabilidad para los accionistas”.
Repsol combinará en los próximos años el pago de efectivo con la recompra de acciones hasta llegar a alcanzar un reparto de más de un euro por acción en 2025.
Este año la compañía repartirá 0,60 euros por título; misma cantidad que tiene fijada para 2022.
A partir de ese año, el dividendo irá aumentando progresivamente hasta los 0,65 euros en 2023 y los 0,70 euros en 2024.
En 2025 prevé un scrip dividend de 0,75 euros y programas de recompras de acciones de 50 millones anuales para cumplir con el objetivo fijado por encima del euro.
La misma cantidad en 2019 y 2020
En 2019 y 2020, Repsol repartió entre sus accionistas la misma cantidad, 0,916 euros por acción dentro de acuerdo al programa de dividendo flexible de la compañía.
En el primer ejercicio abonó un importe bruto de 398 millones de euros y entregó, además, más de 71,34 millones de acciones nuevas valoradas en 1.017 millones de euros para aquellos que escogieron el pago en títulos de la compañía.
El año pasado, el importe fue de 343 millones de euros y se entregaron más de 98,98 millones de acciones equivalentes a 1.075 millones de euros.
El pasado enero, Repsol desembolsó 102 millones de euros (o 0,288 euros britos por título) para los accionistas que vendieron su derecho de asignación gratuita a la compañía.
También abonó 338 millones de euros en un programa de recompra de acciones propias de 40,49 millones de títulos, el 2,58% del capital, para los accionistas que optaron por recibir los nuevos títulos.