Urbas. Las acusaciones de corrupción a su presidente frenan la racha alcista
Anticorrupción atribuye a Juan Antonio Ibáñez Fernández, presidente de Urbas, delitos societarios y relativos al mercado
Las acciones de Urbas, uno de los valores históricos de la bolsa española, frenaron su racha alcista de tres sesiones tras conocerse que la Fiscalía Anticorrupción pidió ocho años de cárcel para el presidente del grupo, Juan Antonio Ibáñez Fernández. El viernes de desplomaron un 12% y este lunes rebotan el 2,5%.
La compañía se había disparado alrededor del 15% en las tres últimas jornadas anteriores al viernes y acechaba los máximos de septiembre gracias a la compra de Sainsol Energía, lo que supuso la entrada de Urbas en el sector de las energías renovables..
Sin embargo, la cotización entregó todas las ganancias en una sola sesión por los problemas del directivo, a quien Anticorrupción atribuye delitos societarios y relativos al mercado.
El ministerio público entiende que se cometieron estos delitos en la ampliación de capital aprobada en julio de 2015, cuya nulidad solicita.
En concreto, la acusación apunta a que se en esta ampliación se aportaron únicamente inmuebles, pese a las necesidades de capital de Urbas. En particular, habría habido una sobrevaloración de estos activos inmobiliarios.
Servicio integral de instalación de placas solares
La noticia empañó por completo la euforia desatada en bolsa tras la compra de Sainsol Energía. Este grupo ofrece un servicio integral de instalación de placas solares y tiene la capacidad para ejecutar el ciclo completo, desde el diseño hasta el mantenimiento postventa.
“Es este un hito importante en el plan estratégico de la compañía” dijo Sainsol Energía, ya que va a permitir un crecimiento exponencial basado en tres pilares: el posicionamiento comercial conseguido, la experiencia técnica acumulada y las sinergias con el grupo Urbas.
De este modo, Urbas podrá acelerar tanto sus promociones propias como los proyectos en los que trabaja Sainsol Energía. La compañía es socio preferente de IBC Solar, el líder alemán del autoconsumo.
Según datos de la Unión Española Fotovoltaica, el año pasado se instalaron en España 596 megavatios en autoconsumo, frente a los 137 megavatios instalados en 2019, lo que supone un crecimiento para el mercado del 335%.
En este sentido, la misma fuente prevé que el mercado del autoconsumo fotovoltacio genere en España entre 5.000 y 8.000 millones de euros hasta 2030.
Ataque a los máximos de septiembre
La noticia supuso todo un revulsivo en bolsa para Urbas. El grupo venía de cotizar en un rango lateral desde el pasado mes de octubre, pero volvió a tener a tiro los máximos de septiembre, en los 0,023 euros.
Pero la acusación contra Ibáñez Fernández devolvió al valor al nivel de los 0,0198 euros. De reactivarse el impulso alcista, el siguiente nivel relevante para Urbas tras los altos de septiembre serán los máximos de 2017 que marcó en los 0,027 euros.
Eso sí, “deberá respetar al cierre los 0,018 para que el aspecto del valor no se vea comprometido en el corto plazo”, apunta José Luis Herrera, analista de Banco Big.
Buenos resultados para Urbas en el año de la pandemia
En el año del coronavirus, Urbas presentó un beneficio neto de 8 millones de euros, frente a las pérdidas de 1,48 millones registradas en el ejercicio anterior.
La facturación alcanzó los 21 millones de euros, cuatro veces, impulsada por la compra de la constructora Murias. Las cifras le sirvieron a Urbas para anotarse una subida del 9% el día de la presentación.
El grupo apostó por la diversificación de los negocios, como prueba la compra de Sainsol Energía. Antes, además de Murias, se hizo con una mina de feldespato a cielo abierto en Silán (Lugo), con unas reservas estimadas de 600 millones de euros.
Además, la compañía planea desarrollar un proyecto turístico y residencial en la ciudad cubana de Cienfuegos, con una inversión prevista de 3.000 millones de euros y un plan de desarrollo a veinticinco años.
El sector de energías renovables está en el foco de los inversores
El aterrizaje de Urbas en el sector de las energía renovables despertó la expectación entre los inversores, pues se produce justo en el momento más dulce para estas compañías.
Es cierto que tanta expectación desató una corrección en las últimas semanas, nada extraño considerando la llegada de grandes compañías. Es el caso de Acciona, que se prepara para sacar a bolsa su filial de renovables, o de Opdenergy, que anunció este jueves su próximo estreno en el parqué.
Las compañías pretenden posicionarse en las energías verdes, que están llamadas a ser uno de los sectores más pujantes en la reconstrucción tras la pandemia del coronavirus.
No obstante, la última subasta mostró que los precios de la energía se mueven a la baja, lo que puso en alerta a los inversores sobre el posible riesgo de burbuja.