¿Es imprescindible contratar un seguro de hogar?
En principio no es obligatorio, pero su contratación evita contratiempos del hogar que pueden hacer estragos en nuestro bolsillo
¿Cuántas veces te han ofrecido un seguro de hogar? ¿Es necesario o completamente prescindible? ¿Pueden obligarme a contratarlo?
Bueno, decidirse por un seguro no es cosa fácil: antes de dar el paso definitivo de la contratación, sea con el fin que sea, hay que estudiar detenidamente nuestras necesidades, así como las condiciones y coberturas.
De lo contrario, podemos estar adquiriendo un producto que no nos ofrecerá ninguna ventaja y que, además, nos costará dinero.
Ahora que pasamos más tiempo en casa, no es extraño plantearse mejorarla y asegurarla. La casa propia es nuestro lugar en el mundo, donde pasamos más tiempo con nuestra familia y donde disfrutamos de nuestra intimidad. La casa es, en definitiva, una necesidad vital.
Con el paso del tiempo pueden ocurrir muchas cosas. No en vano, la casa es un espacio vivo, en el que puede aparecer una humedad, romperse una tubería o producirse una avería. Es absolutamente normal.
Sin embargo, estos contratiempos pueden hacer verdaderos estragos en nuestro bolsillo. De ahí que sea interesante contratar un seguro de hogar.
¿Es obligatorio tener un seguro de hogar?
En principio, no. Y decimos en principio, porque debemos matizarlo. Si tenemos una casa en propiedad y no queremos contratar un seguro, no tenemos porqué hacerlo.
Pero la cosa cambia cuando la vivienda está hipotecada: en este caso, el banco nos exigirá contar con un seguro ante incidentes graves, como por ejemplo incendios, porque así lo señala el artículo 10 del Real Decreto 716/2009 de regulación del mercado hipotecario y otras normas del sistema hipotecario y financiero.
Ocurre que la mayor parte de aseguradoras no ofrecen seguros exclusivos para incendios. De ahí que nos veamos obligados a contratar una póliza con una cobertura más global o básica.
En el caso de las viviendas de alquiler, el propietario también puede exigirnos contar con un seguro de hogar y así especificarlo en el contrato, aunque es muy habitual que él ya disponga de una póliza que lo mantenga asegurado ante posibles imprevistos.
En los últimos tiempos, y especialmente después de la pandemia, la contratación de seguros de alquiler se ha incrementado. Este tipo de pólizas protegen a los propietarios ante el impago de alquileres y daños materiales, pero también ofrecen defensa jurídica o asistencia en el hogar por si fueran necesarias reparaciones urgentes.
¿En qué casos es recomendable contratarlo?
Desde pisos.com explican que cualquier propietario o inquilino puede beneficiarse de las ventajas de contratar un seguro de hogar.
Puesto que en toda vivienda que se precie se producen averías, contratiempos e incidentes varios, independientemente de si se trata de una obra nueva o de segunda mano.
Y aunque por lo general es recomendable contratar un seguro del hogar para cualquier tipología de vivienda, está claro que en el caso de los pisos esta necesidad se agrava.
¿Por qué? Pues veamos un ejemplo bastante gráfico. Imaginemos que, por la razón que sea, aparece una filtración en nuestro cuarto de baño desde la ducha que afecta directamente al vecino.
Los daños producidos en el piso de abajo serán responsabilidad nuestra, de modo que tendremos que repararlos y correr con todos los gastos.
Si contamos con un seguro de hogar, será la compañía la que se hará cargo de todo, de modo que tan solo tendremos que preocuparnos por hacer la correspondiente llamada al seguro.
¿Qué tipo de seguros de hogar existen?
Aunque en el caso de las viviendas hipotecadas tan solo necesitemos un seguro básico, no estará de más aprovechar este proceso de contratación para echar un vistazo a todas las modalidades, coberturas y servicios que existen.
En este caso, lo más recomendable es usar un comparador de seguros e informarse bien acerca de las características de cada producto.
La mayoría de seguros de hogar incluyen responsabilidad civil y daños materiales, pero es preciso estar atento a las cuantías aseguradas, no vaya a ser que nos llevemos sorpresas desagradables.
Existen, además, otras opciones, cuya integración en el producto que contratemos dependerá de cada compañía o paquete ofertado.
Así, pueden incluirse coberturas por atascos, desplazamiento temporal de bienes asegurados, robo, hurto y apropiación indebida, obras de arte, joyas o piezas de coleccionismo, daños estéticos, asistencia informática y protección digital, asistencia en reparaciones, urgencias, defensa en viajes, incendios y daños eléctricos.
Hasta puede que algún seguro nos ofrezca cobertura por pérdida de alimentos refrigerados.
Todos estos extras tienen que contemplarse de manera obligada en el momento de formalizar la contratación, teniendo especialmente en cuenta las características de nuestra vivienda y necesidades personales y familiares.
Las ventajas de contratar un seguro de hogar
Contratar un seguro de hogar tiene un coste a considerar en el presupuesto familiar. Aunque la mayor parte de compañías ofrecen facilidades de pago, el coste total de la póliza puede estar entre los 400 y 500 euros anuales. Todo dependerá de las coberturas contratadas.
Así, aunque tengamos que desembolsar esta cantidad, durante el año nos ahorraremos un buen pico en reparaciones. Sobre todo si, además de las coberturas básicas, añadimos al seguro un servicio complementario de reparación y prevención.
Además de ayudarnos a ahorrar al cabo del año, llevaremos el mantenimiento de la casa al día y ganaremos la tranquilidad de tener un técnico siempre a punto.
Además, ante posibles incidentes graves (que no son los más comunes, pero suceden), contaremos con un apoyo logístico y económico que nos dará el colchón de seguridad necesario. En esas circunstancias, haber contratado un seguro de hogar nos parecerá, sin duda alguna, una buena inversión.
