Iberdrola. El beneficio por acción crecerá un 14,72% en el primer trimestre
La eléctrica anunciará este miércoles unos ingresos de alrededor 10.750 millones de euros, un 14% más que en el primer trimestre de 2020
Iberdrola presentará sus resultados del primer trimestre de 2021 el miércoles próximo, un día en el que se espera que la eléctrica española ofrezca buenas noticias al mercado.
En concreto, se prevé que la compañía anuncie unos 10.750 millones de euros de ingresos, lo que supone un 14% más que los 9.430 millones que obtuvo en el mismo trimestre del año pasado, según las previsiones del consenso de los analistas.
Asimismo, se espera un beneficio por acción de 0,2065 euros, lo que sería un 14,72% más de lo que obtuvo en el mismo periodo del año pasado.
Impacto positivo en la cotización de Iberdrola
“De confirmarse los resultados, esperamos un impacto positivo en su cotización, que está mejorando desde que hiciese mínimos anuales en los 10 euros”, apunta en este sentido Sergio Ávila, analista de mercado de IG Markets.
Hay un precedente que hace que los analistas sean optimistas en cuanto a los resultados de Iberdrola, y es la publicación de las cuentas de las filiales de la compañía en Brasil y Estados Unidos, hace tan solo unos días.
En ambos casos, los resultados salieron por encima de lo previsto. En concreto, la estadounidense Avangrid anunció un incremento del beneficio del 39% hasta los 334 millones de dólares y mejoró sus perspectivas para el conjunto del presente año hasta los 696 millones de dólares (frente a los 665 millones de la guía anterior).
Por su parte, la brasileña Neoenergía ganó un 75% más que en el mismo plazo del ejercicio anterior hasta los 1.007 millones de reales (unos 157 millones de euros).
Resultados de Iberdrola: dónde hay que fijarse
Tras estos buenos resultados de las filiales, este miércoles le toca el turno a la matriz. A este respecto, además de las principales magnitudes, ese día los inversores deberían estar atentos a la evolución del número de clientes.
“Hay mucha competencia por los clientes. En la parte minorista de comercialización de electricidad, hemos visto a otras compañías que han ido a la baja porque han aparecido muchos competidores que se están llevando una parte de la tarta. El negocio de las grandes está decayendo un poco. Vamos a ver en el caso de Iberdrola porque a nivel comercial están todas bastante agresivas. Eso es una cosa a tener en cuenta”, apunta Ángel Pérez, analista de Renta 4.
Otro factor en el que hay que fijarse es la evolución de los precios. “El precio del 'pool' ha subido en España respecto al año pasado y eso perjudica a la posición corta de Iberdrola, que vende más electricidad de la que produce y, por eso, esto les afecta junto con el tema de las materias primas. Ha subido el precio de las emisiones de CO2, lo que ha perjudicado a Endesa y es previsible que afecte al negocio de Iberdrola en España”, añade Pérez.
En el lado positivo, la mayor producción y la subida de precios en el ámbito de las renovables debería jugar en favor de la eléctrica.
Los factores negativos deberían equilibrarse con los positivos de manera que, en conjunto, sean buenos.
Mejorar el mal comportamiento de este año
Así, Pérez también espera que los resultados contribuyan a mejorar la pobre evolución que Iberdrola está teniendo este año en bolsa, cuando se deja un 2% de su valor respecto al 13% que se revaloriza el IBEX 35 debido a la rotación que ha habido en el mercado hacia compañías de valor.
“Le vemos potencial, tiene un valor oculto que no estamos recogiendo en la valoración que hemos hecho y creemos que puede haber una mejora. De cara al medio-largo plazo es una compañía para tener en cartera, porque tiene un crecimiento potente”, dice.
El concreto, Iberdrola ha prometido duplicar el ebitda de cara 2030 y “eso es algo que no pueden decir muchas compañías”, según este especialista.
De este modo, la compañía tiene previsto arrojar un ebitda de 10.000 millones en 2020, de 15.000 en 2025 y de 20.000 en 2030, lo que probablemente provocará un crecimiento de los dividendos proporcionalmente parecido.
Y todo ello con un riesgo bajo, “pues mucha parte del negocio de Iberdrola es regulado y tiene una gran visibilidad”.
Un valor que gusta a los analistas
“Es un valor que, en términos generales nos gusta mucho. Aprovecharíamos cualquier caída para incrementar posiciones y hasta podríamos mejorar de alguna forma el precio objetivo, que ahora tenemos en 12,5 euros. Es una compañía que crece con mucha fuerza, un crecimiento con mucha visibilidad, que paga dividendos atractivos porque genera muchísima caja y ese crecimiento está financiado al 67-70% con la caja que genera”, apunta Pérez.
Ávila está de acuerdo por el lado técnico: “La perspectiva en bolsa de la compañía es positiva. Ha dejado un soporte reciente en los 11,18 euros y se encuentra en tendencia alcista de corto, medio y largo plazo. Mientras cotice por encima de los 11 euros, la predisposición es alcista. Tiene un objetivo técnico teórico de largo plazo en los 13,50 euros”.