Solaria. Las razones por las que es el peor valor de la bolsa española
Solaria es el peor valor de la bolsa española por su falta de visibilidad y los problemas del sector. Sus perspectivas son muy complicadas
Solaria se convirtió en el peor valor de toda la bolsa española. En lo que llevamos de año, la cotización se desplomó un 36% y desde los máximos de enero, la caída supera el 50%.
En apenas cuatro meses, la cotización del que fuera uno de los valores emergentes del IBEX 35 con la pandemia retrocedió hasta niveles de septiembre.
Los inversores bajistas aflojaron algo la presión sobre Solaria pero todavía tienen el 4% del capital en posiciones cortas. Algunos incluso, como Marshall Wace, acaban de incrementar los cortos en un 25%, hasta el 0,65% del capital.
Su actividad es solo una consecuencia de la dinámica que llevó a Solaria a convertirse en el pero valor no solo del IBEX 35 sino de todo el parqué nacional. Todo se explica por dos factores, la falta de visibilidad de la compañía y el drama que vive el sector.
La falta de visibilidad golpea a Solaria
Cuando Solaria rozó los 31 euros por acción a principios de enero, la tendencia alcista era libro. Cuatro meses después, la compañía vale la mitad en el parqué y las caídas no hacen más que acelerarse.
Las perspectivas de Solaria comenzaron a nublarse bien pronto. Nada más arrancar el año, los analistas de Goldman Sachs retiraron su consejo de comprar.
Unos meses antes, el banco estadounidense había desplegado una defensa cerrada de Solaria que ahora ya no veía. Tampoco el consenso de analistas de Bloomberg, que en aquellos momentos vaticinaba ya una corrección de casi el 30%.
La compañía pudo cerrar el año de la pandemia con un incremento del beneficio del 27%, pero en cuanto los analistas comenzaron a desmenuzar su plan estratégico, saltaron todas las alarmas. A Solaria le falta visibilidad.
El exceso de capacidad instalada deprime los precios de la energía
La compañía reportó unas ventas y un beneficio bruto de explotación por debajo de lo esperado por el consenso de analistas.
El problema es que algo más de la mitad del ebitda que genera Solaria se debe a un incremento de la capacidad en funcionamiento, y no a mejoras en la gestión de las plantas o a incrementos de los precios de la energía.
Solaria gana más dinero porque tiene más megavatios instalados, no porque sea más eficiente
Esta es la peor forma de crecer. La empresa gana más dinero porque tiene más megavatios instalados, no porque sea más eficiente. Y en un entorno donde la tarta del mercado cada vez es más pequeña, genera todas las dudas del mundo.
Los analistas ya habían visto que había un problema muy serio de exceso de capacidad. Pero lejos de amilanarse, Solaria actualizó sus guías con el plan estratégico y añadió todavía más capacidad de la que descontaba el mercado. El mismo día de la presentación se hundió un 12%.
Los precios de la energía evolucionarán a la baja
La justificación no puede estar más clara. En el momento en que ese exceso de capacidad se meta en el mercado, los precios capturados de la energía solar fotovoltaica tendrán que descender. Es lo que se vio con la subasta a finales del año pasado.
Si hay exceso de capacidad, la lógica dicta que habría que reducirla, pero Solaria no solo mantuvo su objetivo de llegar a 6.200 megavatios instalados en 2025, sino que subió más la apuesta y elevó la cifra en 12.000 megavatios más en 2030.
Los analistas no creen que el plan estratégico de Solaria sea realista
Estas proyecciones generan un problema que los analistas llaman de “delivery”. Es decir, pocos piensan que los planes sean realistas. Y si por algo se distingue Solaria es por su historial de retrasos.
De hecho, es muy difícil pensar que ejecutará estas guías a la perfección. Por eso, algunos brókers ya han puesto sobre la mesa la posibilidad de que el grupo se vea obligado a anunciar una ampliación de capital.
El sector de energías renovables hace aguas
Además de tener que cargar con sus propios problemas sobre la espalda, a Solaria se le ha complicado más el panorama tras el reciente hundimiento de las compañías de energías renovables.
El nefasto estreno en bolsa de Ecoener aplazó los planes de Opdenergy de saltar al parqué. Las valoraciones están por las nubes y los proyectos son cada vez menos rentables. A los inversores no les salen las cuentas.
Igualmente, el sector “quizás había descontado de una manera my optimista los planes de reconstrucción europea”, apunta Joaquín Robles, analista de XTB.
No obstante, ahora “estamos viendo que la inversión no llega y parece que no habrá tanto capital destinado a proyectos verdes, lo que ha enfriado el interés de los inversores”, explica este experto.
Complicadas perspectivas para Solaria
Con todas estas noticias, la tendencia bajista de Solaria no ha hecho más que acelerarse, dejando una estructura de máximos y mínimos decrecientes que invita poco al optimismo.
“El aspecto técnico es muy complicado”, añade Robles. Tiene una resistencia muy fuerte en los 19 euros contra la que ya se ha estrellado en varias ocasiones y parece que hay poca gasolina para volver a atacarla.
Por abajo, tenía un soporte importante en los 16 euros que ha cedido a las primeras de cambio.
Ahora, el siguiente nivel que podría detener la caída son los 13 euros, aunque tampoco está muy claro. “No veo zonas de relevancia muy cercanas, por lo que podría seguir cayendo con fuerza”, apostilla Robles.