¿Llegará ya el ansiado cambio de tendencia en depósitos y cuentas?
Depósitos y cuentas de ahorro han sido las grandes víctimas de la política expansiva del Banco Central Europeo (BCE). Los[…]
Depósitos y cuentas de ahorro han sido las grandes víctimas de la política expansiva del Banco Central Europeo (BCE). Los ahorradores han visto cómo estos tradicionales productos prácticamente han desaparecido y solo quedan pequeños reductos ofrecidos por bancos extranjeros y 'online' con remuneraciones limitadas en el tiempo y en cantidad. En cuanto a las cuentas, ha habido más competencia y ofertas más atractivas, pero ligadas a una fuerte vinculación.
Sin embargo, con el fin del QE, parece que hay un pequeño resquicio para que se cuele la esperanza de un mercado con rentabilidades más altas, pero será todavía muy paulatino. Estefanía González, portavoz de finanzas personales de Kelisto, espera «una leve evolución al alza del interés pero será muy despacio». De igual opinión es Laura Martínez, experta de iAhorro, quien considera que, si finalmente el BCE confirma que sube tipos, la remuneración de estos productos «se estabilice en torno al 0,10 por ciento en 2019 y de cara a 2020 podría elevarse hasta el 0,50 por ciento». En cuanto al panorama de cuentas de ahorro, Martínez cree que «se mantendrá la política de cero comisiones a lo que habrá que sumar rentabilidades pequeñas». Lo que sí esperan los expertos es que a principios de año haya ciertas noticias positivas para los clientes. Las entidades podrían lanzar nuevas ofertas con el objetivo de captar clientes y pasivo. Por poner un ejemplo, Martínez espera que se reactiven «promociones que regalan dinero en efectivo o incluso que devuelven un porcentaje de los recibos». De hecho, Javier Mezcua, experto de HelpMyCash, insiste en que «sí veremos promociones puntuales para captar clientes, como regalos por abrir cuentas y planes amigos. También esperamos que se mantengan las cuentas remuneradas de alta rentabilidad, que permiten a los clientes conseguir tipos de interés muy altos (hasta el 5 por ciento), pero sobre saldos muy limitados (hasta 15.000 euros), lo que limita las ganancias, y a los bancos les permite ganar clientes y, sobre todo, nóminas». González insiste que serán las cuentas híbridas, las que combinan las mejores características de las cuentas remuneradas, la gran apuesta de los bancos.
Los cambios que se esperan en enero
La competencia entre las entidades para atraer clientes seguirá siendo muy activa, pero para ganarse clientes con nómina y que están dispuestos a vincularse. De hecho, González recuerda que recientemente Ibercaja lanzaba su cuenta «Vamos», con una oferta muy similar a la de Bankinter. Por su parte, CaixaBank recupera los regalos de su «Cuenta Family» y Openbank ha renovado su oferta y regala un Amazon Echo por domiciliar la nómina. Martínez insiste en que la lucha entre bancos se reactivará el próximo enero, ya que «suele ser un mes complicado tras los gastos de Navidad por lo que puede ser el momento perfecto para atraer a aquellos ahorradores que quieran sacar el máximo beneficio a su cuenta o pequeños ahorros». A esto se une que algunas entidades han reducido las rentabilidades de sus cuentas, una oportunidad que podrían aprovecharlas otras entidades. Y en esta nueva etapa, González cree que las cuentas nómina serán los productos conservadores más atractivos por el interés que ofrecen. Pero advierte que si se está decidido a contratar una deberá fijarse «en la vinculación que exigen y en las cantidades máximas a remunerar». Mezcua, además, piensa que las entidades darán un impulso a nuevas formas de invertir como los robo advisor, que permiten invertir con pequeñas cantidades y sin apenas comisiones.