Ibex: ha comenzado oficialmente el rally de Navidad
Las subidas del pasado viernes no fueron todo lo contundentes que quisieron los inversores, sobre todo porque después de esperar[…]
Las subidas del pasado viernes no fueron todo lo contundentes que quisieron los inversores, sobre todo porque después de esperar meses meses al final la vela que dejó no fue precisamente muy bonita, sin embargo el que ese hueco de apertura haya sido respetado este lunes, y sobre todo el ver una vela ahora claramente alcista que se lleva por delante los máximos anuales de la pasada primavera, ya deja pocas dudas en el aire. De hecho, recordarán que vengo hablándoles del beneplácito que le han dado al selectivo español los inversores en opciones de cara al vencimiento de este próximo viernes 20 ya que por encima de los 9.400 puntos no hay ninguna posición importante capaz de generar por si sola una resistencia digna de mencionar. Así que la fiesta de final de año ha comenzado y aquí lo único que puede fastidiarla es que Wall Street se de la vuelta o que los inversores vean que nuestro selectivo español se ha colocado en zona de extrema sobrecompra y tomen la decisión de esperar a que haya una corrección para comprar más barato.
No obstante, con el acuerdo comercial al que han llegado EE.UU. y China y que el Brexit va seguir un camino bastante light gracias al ahora asegurado apoyo en el Parlamento del acuerdo de Boris Johnson con Bruselas, el dinero va a seguir llegando a los mercados. De hecho, hablando del Brexit, tengo que reconocer que una de las cosas que más me ha chocado con diferencia desde que llegué ayer a Londres es la gran cantidad de británicos que están ya cansados de tantos ríos de tinta que se han escrito y horas de radio echadas al respecto del Brexit. Habré hablado con más de 30 personas y todas están cansinas y agotadas de este tema y realmente lo que quieren es consumar ya ese Brexit y echar a andar de nuevo.
Y es que la City es la City, el poderío que desprende esta ciudad de más de 9 millones de habitantes es capaz de asumir un Brexit sin despeinarse. El mundo financiero tiene el poder y ese poder pasa y seguirá pasando por aquí. Ni Frankfurt ni Paris, nadie puede hacerle sombra a Londres en Europa. Por eso jamás habrá un Brexit real. Europa necesita a Gran Bretaña y Gran Bretaña necesita a Europa para seguir siendo la potencia que es, así que debemos estar preparados para ver tratados y acuerdos para dejar las cosas casi como estaban, pero teniendo de esta manera a los ciudadanos británicos contentos.
Y lo mismo pasa entre lo otros dos gallos del corral. Ni a EE.UU. ni a China le interesa una guerra comercial, así que más allá del ruido del día a día, del tuit de turno o de los propios vaivenes de lo mercados financieros, toda agua volverá a su curso.