Los accionistas de Iberdrola ignoran el caso Villarejo
Los accionistas respaldan en la Junta General de Iberdrola la reelección de Francisco Martínez Córcoles y Ángel Acebes como miembros del consejo. El presidente, Ignacio Sánchez Galán, cargó contra Hacienda por los altos precios de la luz
Los accionistas de Iberdrola pasaron por alto el ruido del caso Villarejo que salpica a varios miembros del consejo de la compañía, cuya reelección fue aprobada este viernes en la junta general.
Nombres como Francisco Martínez Córcoles o el exministro Ángel Acebes, en el foco del procedimiento judicial en torno al ex comisario de la Policía Nacional, volverán a formar parte de la cúpula de la compañía tras el respaldo obtenido por parte de los accionistas.
Con un quórum de asistencia superior al 65 por ciento, la mayoría (en torno a un 98 por ciento) de los inversores presentes en la junta votó a favor tras una semana clave de comparecencias.
A falta de una resolución judicial del caso, en las últimas semanas se ha llegado a especular con la imputación del propio presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, que arremetió durante su intervención contra la Hacienda Pública por las tarifas eléctricas.
Hacienda, el “principal beneficiario” de los precios de la luz
El presidente de Iberdrola aseguró durante la Junta de accionistas que Hacienda es el “principal beneficiario” de los altos precios de la electricidad.
El máximo responsable de la energética señaló que el Ministerio Público recibe unos “cuantiosos impuestos” en proporción al precio de la energía además de ingresos por la venta de derechos de dióxido de carbono (CO2), que en 2021 podrían llegar a “2.500 millones de euros” según sus cálculos.
Galán también criticó el anteproyecto de ley energética que prepara el Ministerio para la Transición Ecológica por el cual se prevé reducir los beneficios que obtienen las centrales de generación eléctrica que no emitan CO2.
“Cargas injustificadas”
El presidente de Iberdrola señaló que este anteproyecto introduce “cargas injustificadas” sobre las tecnologías no emisoras y que suponen en torno al “60 por ciento” de la factura de los usuarios.
Por ello, espera que “sea reconducido” para buscar “soluciones que garanticen la coherencia” entre la política energética y los objetivos de descarbonización.
En este sentido, Galán volvió a recalcar los planes de la compañía vasca para llegar a la neutralidad de emisiones en 2030, “20 años antes” que la fecha marcada a nivel europeo, 2050.
Galán prevé que tras la tramitación del anteproyecto se concrete un marco regulatorio “estable y fiable”, aunque espera un mayor “diálogo” entre las compañías energéticas y el Gobierno para poder alcanzarlo.
Dividendo un 5 por ciento más alto
Galán también aprovechó para sacar a relucir algunas de las principales cifras obtenidas por Iberdrola en los resultados correspondientes al pasado ejercicio.
La energética obtuvo un beneficio neto de 3.611 millones de euros, un 4,2 por ciento más que frente al año anterior, y un 10 por ciento si se ajusta el impacto ocasionado por la crisis del Covid-19.
Iberdrola repartirá también un dividendo de 0,252 euros por título a sus accionistas, que junto con el dividendo a cuenta harán un total de 0,42 euros por acción este año, un 5 por ciento más que en el ejercicio anterior.
Según Galán, los planes de Iberdrola pasan por aumentar la retribución a sus inversores hasta los 0,44 euros el próximo año, “superando el objetivo estratégico” de 0,40 euros que manejaba la compañía.
Asimismo, Iberdrola cerró 2020 con 4.500 empleados más hasta un total de 400.000 trabajadores, de los cuales 85.000 están presentes en España.
El año pasado, la compañía logró sortear la pandemia en bolsa y terminó el ejercicio con una revalorización del 27 por ciento en el IBEX 35 hasta alcanzar una capitalización bursátil de 74.295 millones de euros.