La morosidad bancaria sigue en mínimos por los créditos ICO y las moratorias
Los préstamos ICO y las moratorias anclan la morosidad en niveles por debajo de abril de 2020
La morosidad bancaria sigue contenida en España gracias a los créditos ICO, moratorias y refinanciaciones. Un año después del estallido de la pandemia del coronavirus, la morosidad de la banca española, que es el porcentaje de créditos impagados en relación con el total concedido, sigue en mínimos.
En abril, aumentó dos centésimas en abril con respecto a marzo y se situó e el 4,53 por ciento, mientras que en marzo, descendió tras dos meses de subidas y se situó en el 4,51 por ciento debido al incremento del volumen del crédito. Aún así, este nivel está por debajo de hace un año.
Según los datos provisionales del Banco de España, la cartera crediticia que estaba en vigor a cierre de marzo sumaba 1,214 billones de euros, lo que supone un descenso respecto a los 1,218 billones del mes anterior.
Aumentan ligeramente los créditos impagados
Este incremento, leve de la morosidad, se debe a una subida del saldo de los créditos impagados ya que pasó de los 54.980 millones de euros de marzo a los 54.991 millones de abril, una diferencia que al ser más grande que la del crédito, también contribuyó a la subida del indicador.
En comparación con los datos de abril de 2020, cuando la pandemia de coronavirus explosionó ya con todas sus consencuencias (se cerró toda actividad durante la Semana Santa), la mora mejoró en casi tres décimas, ya que entonces estaba en el 4,75 por ciento del "stock" crediticio.
De esta forma, la morosidad aún no acusa claramente el impacto de la crisis del coronavirus, contenido de momento por el programa de avales, ayudas y moratorias, algunas de las cuales van caducando, pero otras se mantienen o se refinancian.
La morosidad en los bienes de consumo también cae
La mora conjunta de bancos, cajas y cooperativas también subió ligeramente, pero sigue por debajo de los niveles marcaros en febrero (cuando alcanzó el 4,50 por ciento). Así, sube dos centésimas, desde el 4,44 por ciento hasta el 4,46 por ciento. Aunque sigue por debajo de los niveles de hace un año.
Los saldos dudosos subieron hasta poco más de 52.000 millones, de una cartera de casi 1,166 billones (cae ligeramente desde marzo).
Por último, en los establecimientos financieros de crédito (EFC), especialistas en financiar grandes bienes de consumo, la mora bajó ligeramente hasta el 6,82 por ciento desde el 6,84 por ciento, gracias a que los impagados disminuyeron hasta los 27.200 millones desde los 27.520 millones.