¿Qué está pasando con la criptomoneda LIBRA de Facebook?

¿Sabes qué es exactamente Libra? Libra es una criptomoneda creada especialmente por Facebook en unión con marcas de reconocido prestigio, como Vodafone, Uber, Ebay, .etc... y su tecnología principal es la conocida como Blockchain o cadena de bloques.

La idea de Facebook para esta criptomoneda es prácticamente revolucionar e innovar el mercado y, cómo no, el sistema financiero ya que ofrece diversas opciones que darían mucho de qué hablar. Esto se debe a que con esta criptomoneda cualquiera que tenga un teléfono podrá enviar dinero a otra persona, sin costes, sin intermediación y al momento. Ésto es una característica actual que hacemos de manera cotidiana, pero con la tecnología Blockchain no hay ni control ni costes añadidos por terceros. Pero Facebook va más allá, ha creado Calibra, una cartera digital para almacenar el dinero. Con Calibra teóricamente no sería necesario disponer de una cuenta corriente en un banco. Revolucionario ¿verdad? Solo nos queda saber si permitirá otros usos como, por ejemplo, invertir en bolsa.

El problema es que esto ha provocado un fuerte rechazo por parte de los gobiernos, al no estar regulada y poner en peligro la estabilidad financiera, además, se ha unido por parte de los usuarios un rechazo adicional, y es que, Facebook está detrás de la criptomoneda, y eso no gusta ya que la compañía se ha visto envuelta en varias polémicas por la cesión de datos personales, y a pesar de que Facebook ha confirmado que no investigará los movimientos, es algo que no termina de llegar al usuario y genera bastante desconfianza.

Es por esto que Facebook quiere dar un giro a su criptomoneda para tranquilizar a los bancos y a instituciones reguladoras. Tras un reciente seminario bancario, el líder del proyecto de Libra, David Marcus, aclaró que el principal objetivo de Libra es crear un mejor sistema de pagos y que ellos estaban abiertos a enfoques alternativos. Por lo que ahora Libra ya no se trataría de una criptomoneda global, como al principio, sino que buscarían que fuera una moneda vinculada a las divisas locales de cada país en los que opere. Pasaría a ser una "stablecoin"o una especie de token, es decir, tendría una criptomoneda el dólar, otra el euro, la libra esterlina...etc. De esta forma Libra operaría bajo las normas y regulación de cada país, y Facebook perdería algo de poder y control sobre la moneda de manera voluntaria, algo que tranquiliza a los reguladores al poder controlar algo más a esta criptodivisa.

No obstante algunos de los socios de Facebook para el proyecto Libra, como son eBay, Visa, Mastercard...etc han salido y abandonado el proyecto. De momento el proyecto no está siendo muy respaldado por los principales países a pesar de estar compuesto por una cesta de Libra tokens con las principales divisas. Incluso el Ministro Federal de Finanzas de Alemania, Olaf Scholz, da un NO rotundo a esta moneda tan revolucionaria, ya que para Scholz puede presentar diversos riesgos internacionales acusando al proyecto, incluso, de crear la posibilidad de un caos financiero global, ya que Libra puede llegar a todos los rincones del planeta con sus más de 2.000 millones de usuarios de Facebook, y con ese volumen de suscriptores la capacidad para crear seísmos financieros es real y esto despierta miedo por parte de las organizaciones gubernamentales. Otro caso similar es el de un profesor de finanzas de Stanford. El profesor Dean Witter dijo que es muy probable que las criptomonedas alteren el modelo comercial de los bancos en la próxima década y que las criptomonedas acabarían con las ganancias de los bancos originadas por las tasas de interés bajas. También añadió que el público no debería dejarse engañar por los niveles relativamente bajos de adopción de criptomonedas descentralizadas como es el Bitcoin y que tampoco se debería tomar una represión contra la famosa Libra de Facebook como señal de una suspensión o castigo a las grandes iniciativas privadas.

Desplome del resto de criptomonedas

Estos acontecimientos han generado que nos fijemos en el resto de criptomonedas, las cuáles han empezado a sufrir notables caídas, entre ellas el Bitcoin, llegando a caer hasta a 7.500 dólares. ¿Pero y esto por qué? Pues muy sencillo; si Facebook se ve obligado a abandonar el proyecto de su propia criptomoneda, al no contar con el respaldo de los reguladores de Estados Unidos, arrastrará al resto de criptomonedas con un efecto pánico que repercutirá en todas ellas. Otro factor que lastra el crecimiento de las monedas digitales, es que, la tregua comercial entre Donald Trump y China ha alejado a los inversores del Bitcoin. Con la tregua comercial y, si se produce un acuerdo entre Estados Unidos y China, las criptomonedas como el Bitcoin, el Ethereum, Litecoin ,etc.. dejan ser interesantes como activo refugio. Suceso que ha ocurrido tras la publicación de Donald Trump de asegurar que el acuerdo comercial entre las dos potencias estaba más cerca y por lo tanto esto ha provocado que el Bitcoin y el resto de criptomonedas experimenten prácticamente el mismo dibujo en sus gráficas de precios, cayendo de forma rápida y agresiva y dejando de estar en boca de todos los inversores, incluso de los más minoristas.

Tendremos que esperar a junio de 2020, fecha en la que tiene pensado el equipo de Facebook lanzar la moneda al mercado, aunque de momento, los acontecimientos irán produciéndose con las futuras reuniones de los líderes financieros para estudiar regulaciones que controlen las criptomonedas, sobre todo para dejar claros los problemas que pueden traer como lavado de dinero, finanzas ilícitas y sobre todo, tratar el tema de la protección al consumidor. Por otro lado, Libra podría tener connotaciones sociales muy positivas para zonas más desfavorecidas que se ven obligadas a usar sus monedas locales, que pueden ser poco líquidas o ineficientes y muchas veces esto provoca, para la gente que usa esas divisas, exclusión del sistema financiero estándar por lo que se exponen a una verdadera falta de oportunidades. La posibilidad de una plataforma que conecta a millones de personas genera esperanza de una mayor inclusión financiera y podría dar oportunidades a personas que actualmente no las tienen.

Javier Sanz es analista de Admiral Markets España