Trump refuerza sus tropas en Oriente Medio tras los ataques a Aramco
El mandatario descarta atacar a Irán de forma inmediata y señala que presentar una actitud de moderación "muestra mucho más fuerza"
Estados Unidos anunció este viernes que enviará más tropas militares a Arabia Saudí y los Emiratos Árabes para reforzar la seguridad tras el ataque a Aramco, la mayor petrolera del mundo, que Riad atribuye a Teherán. Por el momento, no emprenderá un ataque inmediato contra Irán como represalia, aunque la estabilidad en Oriente Medio se mantiene en la cuerda floja. Esta semana, el nuevo número de la revista Inversión analiza la oferta pública de venta (OPV) de esta petrolera y sus posibles implicaciones.
Los detalles del despliegue se especificarán en los próximos días, pero no involucrarán a miles de soldados, señaló el jefe del Estado Mayor Conjunto, el general Joseph Dunford. Se trata únicamente de un primer paso, aunque Estados Unidos no descarta tomar nuevas medidas más adelante.
Horas antes de que la Casa Blanca anunciara esta medida, el presidente Donald Trump señaló a la prensa que presentar una actitud de moderación "muestra mucho más fuerza" que lanzar ataques militares, y que quería evitar una guerra abierta contra Irán.
Por ello, la medida que tomó ayer fue anunciar sanciones "al mayor nivel" contra el Banco Nacional de Irán. Trump insistió en que estos castigos golpean "directamente a lo más alto", y ha explicado que esa entidad actúa como Banco Central iraní, llamado "Banco Central de la República Islámica de Irán".
"Creo que el enfoque de la persona fuerte y lo que sí demuestra fuerza sería mostrar un poco de mesura", manifestó Trump durante la reunión con el primer ministro australiano Scott Morrison. "Es mucho más fácil hacerlo de la otra forma, e Irán sabe que si se comportan inadecuadamente, están en muy mala posición", destacó.
Dunford afirmó que el aumento de tropas les darían a los saudíes una mayor posibilidad de defenderse contra los ataques aéreos no convencionales. "Ningún sistema por sí solo podrá defender de una amenaza como esa", señaló. "Un sistema de capacidades defensivas en etapas mitigaría el riesgo de enjambres de drones u otros ataques que podrían provenir de Irán", añadió.
Sin pruebas físicas
De momento, EE.UU no ha presentado ninguna prueba física que indique que Irán es la responsable de este ataque contra la petrolera, pero continúa la investigación. Lo que sí que aseguró ayer el secretario de Defensa Mark Esper es que Teherán construyó los drones y los misiles crucero utilizados en el ataque. "El ataque del 14 de septiembre contra instalaciones petroleras saudíes representa un incremento drástico en la agresión iraní"-apuntó- hasta ahora Estados Unidos ha mostrado gran moderación".
Al rechazar la acción militar inmediata, Estados Unidos evitó lo que podría terminar en una nueva guerra en Oriente Medio. Se trata de la segunda vez en pocos meses que se evita una disputa de esta envergadura ya que en junio, después de que Irán derribara un dron estadounidense, Trump decidió cancelar un ataque para evitar la muerte de miles de civiles.
"La gente pensó que atacaría a Irán en dos segundos", declaró Trump. "Pero cuento con mucho tiempo", concluyó.