Fondos: Un primer semestre más volátil
Aunque se esperaba un año más volátil que el anterior, tal vez las expectativas eran más positivas para el primer[…]
Aunque se esperaba un año más volátil que el anterior, tal vez las expectativas eran más positivas para el primer semestre de lo que han resultado ser. Especialmente para Europa, donde las dificultades para formar un gobierno de coalición en Alemania y la extraña coalición de gobierno en Italia, han dejado en el aire la preocupación, una vez más, sobre la futura estabilidad de la Unión Europea. Unido al cambio de gobierno en España, ya al final del semestre, han creado un sentimiento de cautela entre los inversores hacia Europa.
Los inversores prefieren Estados Unidos. A pesar de las dos subidas de tipos por parte de la Reserva Federal, el crecimiento económico continúa mostrando fortaleza y puede continuar, en base a la reforma fiscal a las empresas y al aumento del precio del petróleo. Por otra parte, la guerra comercial iniciada por la Administración Trump, con la imposición de aranceles a China, Méjico, Canadá y Unión Europea, parece que no va a tener importantes consecuencias negativas para la economía estadounidense, o al menos en menor medida que en el caso de las economías afectadas por los aranceles.
En este escenario de transición hacia políticas monetarias más restrictivas y de mayor incertidumbre, las aportaciones netas a fondos de inversión de gestoras nacionales suman durante el primer semestre del año 10.634 millones de euros, si bien la evolución de los subyacentes, o efecto mercado, ha supuesto un retroceso de 2.355 millones de euros. El incremento neto de patrimonio queda en 8.279 millones de euros, dejando el patrimonio total gestionado a 30 de junio en 274.683 millones de euros.
Mixtos y Renta Variable, Sectoriales fueron los más demandados durante los seis primeros meses del año, de acuerdo con el dato de aportaciones netas, con 9.228 y 4.160 millones de euros respectivamente. Los mayores reembolsos netos corresponden a Monetarios y Renta Fija, por valor de 2.123 y 1.669 millones de euros respectivamente.
Por tipo VDOS, la primera posición por cuota patrimonial la mantienen los fondos Mixtos (38,06%), seguidos de los fondos de Renta Fija (21,14%). Los fondos de Renta Variable, Sectoriales representan a cierre de junio un 18,27 por ciento de cuota, correspondiendo un 7,62 por ciento a Global Alternativos y un 7,16 por ciento a Garantizados.
CAIXABANK se mantiene como líder por grupo financiero en cuanto a cuota (16,68%) seguido de BBVA (14,74%) con los diez primeros grupos por patrimonio gestionado sumando un 77,72 por ciento del total. En cuanto a aportaciones patrimoniales por grupo, BBVA encabeza el avance durante el semestre, con el mayor volumen de entradas patrimoniales netas, por un valor de 2.307 millones de euros.
Por categoría VDOS, la sectorial de Salud se sitúa en primera posición del ranking por rentabilidad al terminar junio, con una revalorización de 9,37 por ciento, seguida de las también sectoriales de TMT (8,91%) y Biotecnología (7,36%). Por el contrario, Renta Variable Internacional Latinoamérica (-11,03%) sufre los mayores descensos en su rentabilidad, junto con la categoría VDOS de Renta Variable Internacional Japón Valor (-5,65%).
Las amenazas de guerra comercial están pasando a convertirse en realidad. La Unión Europea ha reducido sus expectativas de crecimiento económico como consecuencia de la imposición de aranceles por parte de la Administración estadounidense. Pero tampoco será muy favorable para el crecimiento económico de la región el compromiso de los países para aumentar el gasto en defensa, tras la última cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
El Brexit continúa generando titulares tras la dimisión de varios ministros del gobierno de Theresa May, entre ellos el propio ministro encargado de las negociaciones, en desacuerdo con la propuesta de Brexit suave de la primera ministra.
Respecto al nuevo gobierno español, por el momento los mercados parecen mantener sus expectativas. Al menos es lo que indicaba recientemente Fitch, que mantenía la calificación actual de A- con perspectiva estable. A pesar de ello, señala algunos puntos débiles de la economía española como el elevado nivel de deuda pública, el reducido ajuste del déficit estructural, la alta tasa de paro y la incertidumbre relacionada con Cataluña.