Nuevo mapa político

El mapa político español se completó el domingo con la aparición del elemento que le faltaba: la derecha pura, dura,[…]

El mapa político español se completó el domingo con la aparición del elemento que le faltaba: la derecha pura, dura, insobornable, con un programa simple y claro reducido a una palabra, España, que ha irrumpido con fuerza inesperada en el lugar menos pensado, para dar voz a quienes no la tenían. La llaman extrema derecha con acento vejatorio mientras andan sueltos todo tipo de extremismos, algunos anticonstitucionales, pero de eso hablaremos luego. Lo que quedó enterrado esa noche no fue sólo el bipartidismo de PP y PSOE, renqueantes desde hace tiempo, sino también el cuatripartidismo emergido durante los últimos años, sin demasiado éxito por lo que vemos. Si Podemos era el hijo espurio de un PSOE desgastado por el poder y la corrupción, Cs era la marca blanca de un PP con idénticas taras. Pero esos dos vástagos no han llegado a convencer. Sus trampas y prisas recordaban demasiado a sus progenitores para inspirar confianza y ha tenido que ser una formación completamente nueva, sin otras credenciales que estar del lado de las víctimas y un intenso amor a España, la que venga a desbaratar el plan sucesorio que se estaba forjando. La noche estuvo, por tanto, llena de vencidos, pues lo que se dice vencedor, sólo hubo uno: el que tiene la llave del próximo gobierno andaluz, que puede ser también el de España.

Más información

En portada

Noticias de