Sepultureros
Los sepultureros más famosos de la historia nunca existieron. Son la pareja de sagaces rústicos que aparecen afanados sobre la[…]
Los sepultureros más famosos de la historia nunca existieron. Son la pareja de sagaces rústicos que aparecen afanados sobre la tierra con sus azadas en el acto V de Hamlet. Shakespeare, aquel milagro que compendió todos los tipos y humores humanos, los dota de una ironía cómica, donde late esa sagacidad tan propia de los viejos y desconfiados pueblos labriegos. Ofelia, la infeliz enamorada de Hamlet, se acaba de suicidar ahogándose. Uno de los enterradores, el más quisquilloso, se pregunta «si ha de sepultarse en tierra sagrada a la que deliberadamente ha conspirado contra su propia salvación». El otro, puro sentido común, lo conmina a que se deje de zarandajas: «Yo dígote que sí, así que cava presto el hoyo».