Chantaje múltiple
Los chantajes dominan nuestra política, como los grafitis los muros. Chantajista número uno es el presidente del Gobierno, que chantajea[…]
Los chantajes dominan nuestra política, como los grafitis los muros. Chantajista número uno es el presidente del Gobierno, que chantajea a todos, incluidos quienes le llevaron a la presidencia. «Como no me aprobéis el presupuesto, vais a tener al PP, a Ciudadanos y a Vox», advierte a podemitas y nacionalistas. Mintiendo, como siempre, pues intenta seguir gobernando con el presupuesto de Rajoy aderezado con sus «medidas sociales» pasadas por decreto-ley. Iglesias se le ha rendido sin lucha -qué remedio le queda siendo el otro gran perdedor en Andalucía-, y sabiendo que los secesionistas no pueden ceder con sus líderes en la cárcel, pero eso le permitirá demostrar que no ha cedido ante ellos. Chantajea también a Rivera, advirtiéndole que, como se acerque a Vox, abandonará el centro, su baza favorita. Al PP no puede chantajearle, al haber reconocido a su hijo pródigo, así que le ataca con furia, sabiendo que es el enemigo a batir. Y como se ha visto en situaciones aún más comprometidas, está convencido de que podrá salir también de ésta. Osadía y capacidad de resistencia no le falta.