¿Qué empresas se han beneficiado durante la guerra comercial entre EE.UU. y China?
Las guerras generan opuestos: vencedores y vencidos, criminales y víctimas, beneficiados y perjudicados. Incluso las comerciales. Desde abril de 2018,[…]
Las guerras generan opuestos: vencedores y vencidos, criminales y víctimas, beneficiados y perjudicados. Incluso las comerciales. Desde abril de 2018, EE.UU. y China libran una batalla arancelaria que afecta a la economía global, que podría incluso estar enfilando el camino de la recesión con nefastas consecuencias para los mercados. En el transcurso de este apenas año y medio, muchas empresas han visto penalizado su rendimiento bursátil como efecto de la guerra comercial. Sin embargo, hay otras que, según el segmento que ocupe, no solo han esquivado las caídas sino que además han salido beneficiadas. Son aquellas que pertenecen a sectores defensivos, "donde los inversores están más cómodos ante las posibles consecuencias ya que son compañías menos ligadas al ciclo económico", señala Nagore Díez, analista de Norbolsa.
De entre las menos sensibles a la guerra comercial destacan las compañías eléctricas. "En momentos de incertidumbre, y este lo es, estas compañías suelen actuar de activos refugio porque tienen una sostenibilidad de dividendos bastante recurrente", señala Ángel Pérez, analista de Renta4. En este sentido, el rendimiento en el Eurostoxx de la española Iberdrola y de la italiana Enel destacan respecto al resto de eléctricas. "Son casos muy similares, las perspectivas de crecimiento son muy positivas y de alguna forma ya tienen adjudicados los proyectos futuros de aquí a 2023 o incluso más allá", indica Pérez. Desde abril del pasado año, Iberdrola acumula un rally alcista de casi un 40%, mientras que Enel creció más de un 24%.
También las compañías de consumo han tenido un buen comportamiento en este contexto. "Es la parte de la economía a la que menos le está afectando la guerra comercial por ser compañías defensivas, al igual que las eléctricas, que se mueven con los tipos de interés", apunta Nicolás López, director de inversiones de M&G Valores. De los principales mercados de valores de EE.UU., China y Europa sobresalen marcas reconocibles como Starbucks, que se incrementó un 2,53% en el S&P500, McDonald's, que creció un 23,01% en el Dow Jones o firmas como la textil Adidas, que subió un contundente 28,50% desde abril de 2018.
Para López, este tipo de empresas también se han beneficiado de la "fuerte caída de la rentabilidad de los bonos" en los últimos meses. Pérez, por su parte, destaca a las compañías farmacéuticas. "Habría que analizar a nivel individual, pero siempre suelen contar con algún tipo de producto exclusivo", apunta el analista. En este sentido, Merck&Co, una de las mayores compañías del sector, creció un 4,29% desde abril de 2018 mientras que otras como las estadounidenses Ra Pharmaceuticals, Amarin Corporation o las chinas Shandong Pharmatheuticals Glass o Chimin Health -esta última fue la empresa que mejor rendimiento obtuvo en el periodo en la Bolsa de Shanghái- confirman que se puedan catalogar como empresas refugio en este contexto. "Son compañías más seguras, también depende del país en el que estén, pero los beneficios futuros de la comercialización de sus patentes son exclusivas para ellas. Si tienes un medicamento que cura algo en concreto, te lo van a seguir comprando más caro o más barato", concluye Pérez.
En las últimas fechas, la guerra comercial ha virado ligeramente su rumbo. Las continuas presiones del presidente de EE.UU., Donald Trump, a la Reserva Federal para conseguir que ésta bajase los tipos o la devaluación del yuan por parte de China son los primeros síntomas de lo que podría derivar en una guerra de divisas. En este sentido, dos compañías que mejor rendimiento presentaron en el Dow Jones, las financieras Visa y American Express, podrían sufrir un rebote. "Están muy ligadas al consumo, habría que ver las perspectivas para los próximos años", señala Pérez, que considera que el efecto del conflicto entre EE.UU. y China les puede afectar a medio o largo plazo. "Visa cobra más o menos el 5% por las ventas en su plataforma, veremos si ese porcentaje no se mueve", apunta el analista de Renta4. "Depende de los productos a los que les pongan aranceles. Si bebes leche y la encarecen la vas a seguir comprando igual, si te encarecen el iPhone igual te compras un modelo de Nokia o un Huawei".
La mayoría de aranceles que se han impuesto hasta la fecha han afectado a los productos tecnológicos. Un informe de BofA Merryl Lynch señala que la tecnología ha sido la más afectada a pesar de que los productos de consumo han conseguido esquivar los daños de la guerra comercial. Nicolás López apunta que el sector tecnológico es uno de los que lo ha hecho bien durante este tiempo, pero distingue entre valores cíclicos, "que lo han hecho muy mal", y los defensivos, "que lo han hecho mejor". Para Ángel Pérez, esta guerra se trata de un "intento" para frenar a las tecnológicas chinas.
De sus competidoras americanas destaca a Microsoft, que subió 50,55% siendo la tercera compañía del Dow Jones con mejor rendimiento. "Tiene un producto propio, Windows, que las empresas chinas no pueden replicar, no tienen un competidor directo como puede ser Apple (con Huawei) o Ebay con Ali Baba. Al final en cierta medida es un monopolio a nivel mundial, no tiene el problema de la competitividad", señala Pérez sobre la fortaleza de la compañía fundada por Bill Gates.
Entre los sectores que más han sufrido durante la guerra comercial se encuentra el bancario. En Europa, grandes entidades como ING, BBVA o BNP Paribas acumulan caídas de más del 25% -en el caso del prestamista francés ese descenso se sitúa por encima del 32%- lo que certifica esa tendencia bajista. "Un escenario de desaceleración favorece políticas monetarias más laxas, como bajadas de tipos, lo que es muy negativo para la generación de ingresos futuros de la banca", indica Nagore Díez. "En general, todas las empresas que dependan de que la economía se acelere o no están en la parte baja de la tabla. En Europa es muy evidente: bancos, materias primas, automóviles...", apunta.
Europa ha sido uno de los mercados más lastrados durante el transcurso de la guerra comercial. "Si coges los índices, el área que más está sufriendo a nivel de cotización es Europa, a pesar de casos como el de Iberdrola", señala Ángel Pérez. De prolongarse el conflicto comercial entre EEUU y China, el analista señala que el Viejo Continente podría sufrir las consecuencias. "Europa tienen un poder de negociación menor por el hecho de que tienes que poner de acuerdo a 27 países, y hay bastantes dudas sobre todo en cuanto a las perspectivas de crecimiento. Parece que el Banco Central Europeo todavía tiene capacidad para responder, pero cada vez es más limitada".